InicioFilosofía

Liberalismo

Te explicamos qué es el liberalismo, sus corrientes, origen y representantes. Además, el liberalismo social y económico.

¿Qué es el liberalismo?

El liberalismo es la doctrina filosófica que prioriza la protección y fomento de las libertades individuales como el problema central que debe atender el ejercicio político.

Tanto en lo político, lo social y lo económico, el liberalismo propone que la razón de ser del Estado radica en garantizar la igualdad ante la ley y el justo ejercicio de las libertades. Al mismo tiempo, el Estado debe tener límites claros a su poder, para que no constituya un impedimento para la vida libre.

Más que una doctrina unificada, sin embargo, el liberalismo en realidad abarca un conjunto de formas de pensar que comparten la defensa de los derechos individuales (como la libertad de expresión), la libertad económica, el secularismo, la propiedad privada, la democracia y el Estado de derecho.

Se trata de un conjunto de formas ideológicas propias de la sociedad burguesa y la era industrial, de modo que sus orígenes tienden a ser los mismos del capitalismo.

Existen varias corrientes históricas liberales o derivadas del liberalismo, que son:

  • Liberalismo clásico. Nacido de la burguesía europea del siglo XVII y XVIII y su lucha contra el absolutismo monárquico y los privilegios aristocráticos, defendió en su momento la no intromisión del poder real en los asuntos civiles, la libertad de culto, de ejercicio político y de ejercicio económico. Fue un movimiento propio del capitalismo naciente, fundamental en la caída del Antiguo Régimen y en el surgimiento de la Ilustración, que se opuso a partir del siglo XIX a la intromisión del Estado en los asuntos económicos, defendiendo las libertades individuales a toda costa.
  • Socioliberalismo. También conocido como liberalprogresismo, capitalismo social o economía social de mercado, persigue un balance entre la defensa de las libertades individuales y del ejercicio económico, y la protección que el Estado puede ofrecer contra formas injustas y excesivas del mercado, como los monopolios y otras formas de competencia desleal, garantizando el estado de bienestar.
  • Minarquismo. Partidario del Estado mínimo, encargado únicamente de la defensa territorial de la nación y el sostén de la justicia y del orden público, este modelo propone que el resto de la sociedad debe quedar en manos privadas. Este término fue acuñado en 1971 por el estadounidense Sam Konkin (1947-2003).
  • Anarcocapitalismo. Conocido también como anarquismo de libre mercado o anarcoliberalismo, propone una sociedad organizada y carente de Estado, en la que absolutamente todos los bienes y servicios provengan de la libre competencia del mercado.

Puede servirte: Política económica

Características del liberalismo

Fundamentalmente, el liberalismo se caracteriza por:

  • Considerar la libertad como un elemento inviolable de la vida ciudadana, en todos sus diferentes aspectos: libertad de culto, de prensa, de asociación, de pensamiento, etc., siempre y cuando el ejercicio de dichas libertades no contradiga las de los demás. Dicha libertad debe ser sagrada y el gobierno no debe poder violentarla a su antojo.
  • Defender el principio de la igualdad ante la Ley (Estado de derecho), tanto en los ámbitos políticos como sociales, ya que sólo así el individuo será libremente responsable de sus actos.
  • Defender el principio de la propiedad privada como un derecho inalienable del individuo, protegido por la ley frente a iniciativas colectivistas.
  • Defender la existencia de un Estado laico y una educación laica, compuesto por poderes autónomos e independientes de acuerdo al modelo republicano (ejecutivo, legislativo, judicial), pues la solución de los dilemas siempre puede hallarse mediante el ejercicio del diálogo político.
  • Generalmente proponer la mínima intromisión del gobierno en la vida ciudadana, y la mínima intromisión del Estado en la conducción de la economía.

Origen del liberalismo

El origen del liberalismo se remonta a la Gran Bretaña del siglo XVII, como heredero de la filosofía empirista y utilitarista que vio nacer el mercantilismo, una escuela de pensamiento que demandaba la intervención Estatal en la economía, para garantizarle a la nación las condiciones para generar riqueza y competir con sus vecinos.

Sin embargo, la intromisión estatal solía beneficiar a las clases establecidas y ejercerle resistencia a la libre empresa, lo cual iba en contra del ascenso de las clases medias burguesas, o sea, comerciantes.

Así, en el siglo XVII y XVIII se produjeron las Revoluciones Burguesas, que fueron en contra de los intereses de la aristocracia y del Antiguo Régimen, especialmente en Francia e Inglaterra. Así tuvieron lugar las Guerras Civiles inglesas, la Revolución Gloriosa o la Revolución Francesa de 1789.

Todos estos conflictos cimentaron una nueva forma de pensamiento igualitarista, individualista y libertario, que se esparció por Europa. Así se propició en unos casos la caída de las monarquías y en otros casos se las obligó a pactar con el resto de los actores sociales y económicos.

Para ello debieron ceder buena parte de sus poderes a cambio de evitar ser guillotinados en una Revolución. Esta transformación política dio origen al Liberalismo clásico, y fue vital en el surgimiento de la sociedad capitalista.

Liberalismo social y económico

Aunque ambos aspectos conviven en el seno de la filosofía liberal, el liberalismo social y el económico pueden comprenderse por separado de la siguiente manera:

  • El Liberalismo social. Tiene que ver con la no intromisión del Estado en la vida privada de los ciudadanos, ni en sus relaciones sociales, permitiendo así que exista la libertad de culto, de pensamiento, de asociación y de prensa, siempre y cuando no se infrinjan las leyes ni se violenten las libertades de terceros. El liberalismo es partidario del Estado de derecho, o sea, de la igualdad ante la ley, y considera por el contrario que lo que ocurra en el fuero íntimo de la vida ciudadana le incumbe única y exclusivamente a los involucrados, mientras no se esté cometiendo ningún delito.
  • El Liberalismo económicoEn cambio sostiene la necesaria independencia de las relaciones mercantiles y comerciales de los ciudadanos de la intromisión del Estado, siempre y cuando, claro está, este ejercicio no constituya ninguna violencia contra las libertades de los demás. Así, los impuestos, las regulaciones y las restricciones gubernamentales deben ser, si no eliminadas, al menos restringidas a su mínima expresión, para permitir que la libre competencia guíe el mercado y la labor productiva por sus propios caminos.

Representantes del liberalismo

Los principales exponentes del pensamiento liberal, a lo largo de la historia, fueron:

  • John Locke (1632-1704). Filósofo y médico inglés, perteneciente a la corriente del empirismo inglés y considerado el padre del Liberalismo clásico, ya que fue el primero en formular una filosofía propiamente liberal, en la que se consagraba el derecho a la propiedad privada y el consentimiento de los gobernados. Sus aportes a la teoría liberal y al republicanismo fueron notables.
  • Immanuel Kant (1724-1804). Filósofo alemán considerado uno de los grandes pensadores de la Edad Moderna, representante del criticismo y precursor del idealismo alemán. Kant defendió una perspectiva liberal de la sociedad, en la que el libre albedrío es clave para una vida moral. Para Kant, los individuos debían obedecer sólo aquellas leyes que consideraran acordes a su voluntad legisladora, y estas libertades fundamentales únicamente se pueden enajenar cuando así lo decide el soberano, transfiriéndolo al gobierno en su representación.
  • Adam Smith (1723-1790). Economista y filósofo británico, fue uno de los fundadores del liberalismo económico. Su pensamiento fue clave para el surgimiento del capitalismo y se halla plasmado en su célebre La riqueza de las naciones de 1776, donde afirmaba que la libre competencia entre los actores privados distribuye mejor la riqueza de las naciones que los mercados controlados por el Estado.
  • David Ricardo (1772-1823). Economista británico en cuyos tratados se defendía el establecimiento de una unidad monetaria fuerte, cuyo valor dependiese directamente de algún metal precioso, como el oro. Fue autor de diversas teorías económicas liberales, en las que subrayó la importancia de la libre competencia y la comercialización internacional.

Neoliberalismo

Distintas cosas pueden entenderse por neoliberalismo, pero la más usual y la más reciente tiene que ver con el resurgimiento de la doctrina político-económica liberal a finales del siglo XX, luego de décadas de práctica keynesiana en Occidente, con resultados diversos a lo largo de su historia.

Ampliamente criticado por los sectores progresistas de la sociedad, especialmente los del Tercer Mundo, el neoliberalismo fue implementado durante las décadas del 80 y 90 por gobiernos de distinto tipo.

Por ejemplo, la feroz dictadura militar de Augusto Pinochet en Chile llevó a cabo profundas reformas de liberalización de la economía y el trabajo. También fue la política económica de los gobiernos de Ronald Reagan en Estados Unidos y Margaret Thatcher en Reino Unido, así como de las cuestionadas gestiones de diversos políticos latinoamericanos como Carlos Menem en Argentina y Carlos Salinas de Gortari en México.

Más en: Neoliberalismo

Referencias