Pérmico: características, divisiones, geología, flora y fauna
El Pérmico fue el sexto período de la era Paleozoica, entre el Carbonífero y el Triásico (era Mesozoica). Se extendió durante aproximadamente 48 millones de años y puede decirse que fue una época de transición del planeta, tanto a nivel geológico como climático.
Durante el período Pérmico, a nivel biológico ocurrieron una gran cantidad de cambios trascendentales, como el primer esbozo de los mamíferos, en la figura de los llamados reptiles mamiferoides, así como también la diversificación y ampliación del resto de los seres vivos que existían.
Este período ha sido muy bien estudiado por los especialistas, especialmente su final, ya que aquí se presentó el evento de extinción masiva más catastrófico y devastador del planeta (más que el que ocasionó la extinción de los dinosaurios).
En este, conocido comúnmente como “la Gran Mortandad”, desaparecieron más del 90% de las especies de seres vivos. Durante este evento, las condiciones del planeta cambiaron de tal manera que hicieron prácticamente inviable la vida en el planeta.
Solo sobrevivieron unas cuantas especies, las cuales, más adelante, dieron paso a los animales más famosos de la Prehistoria: los dinosaurios.
Índice del artículo
Características generales
Duración
El período Pérmico tuvo una duración aproximada de 48 millones de años. Se inició hace 299 millones de años y culminó hace 251 millones de años.
Clima variable
Durante este período, la Tierra experimentó un clima relativamente variable, ya que tanto en sus inicios como en su final se observaron glaciaciones, y durante su fase intermedia, el clima fue bastante cálido y húmedo, en especial en la zona ecuatorial.
Evolución de ciertas especies de animales
En el período Pérmico, algunas especies de animales experimentaron una gran diversificación. Tal es el caso de los reptiles, los cuales fueron considerados como mamiferoides, ya que, según registros fósiles, pudieron ser los antepasados de los actuales mamíferos.
La Gran Mortandad
Fue un suceso de extinción masiva que ocurrió a finales del período Pérmico e inicios del siguiente período, el Triásico. Fue el proceso de extinción más devastador que ha atravesado el planeta, ya que acabó con el 90% aproximadamente de las especies de seres vivos que poblaban el planeta.
Son muchas las causas que han sido postuladas para explicar este suceso. Entre las más aceptadas se encuentra una intensa actividad volcánica que ocasionó la expulsión a la atmósfera de mucho dióxido de carbono, lo cual contribuyó a elevar la temperatura ambiental.
Así mismo, se han propuesto como causas la liberación de hidratos de carbono provenientes del fondo de los océanos y el impacto de un meteorito.
Sea cuales sean las causas, este fue un evento bastante catastrófico que afectó en gran medida las condiciones ambientales del planeta Tierra.
Geología
El período Pérmico se inició inmediatamente después del período Carbonífero. Es importante destacar que a finales del Carbonífero la Tierra experimentó una glaciación, por lo que en el Pérmico aún quedaban vestigios de esto.
Así mismo, durante este período, el supercontinente Pangea se encontraba casi en su totalidad unida, solo quedaban por fuera unos pequeños trozos de tierra, como el sudeste del continente asiático.
Durante este período, una parte de Pangea, específicamente de Gondwana, se fraccionó y comenzó a desplazarse hacia el norte. A este fragmento se le llamó Cimmeria.
Este continente contenía los territorios de lo que hoy es Turquía, Tibet, Afganistán y algunas regiones asiáticas como Malasia e Indochina. La separación y posterior desplazamiento de Cimmeria ocasionó que el océano Paleo Tetis se fuera cerrando, hasta desaparecer.
Finalmente, ya en otro período (Jurásico), este continente colisionaría con Laurasia, dando origen a lo que se conoció como la Orogenia Cimmeriana.
Así mismo, el nivel del mar fue bajo, lo cual se corresponde con lo que ocurrió también durante el período anterior, el Carbonífero. De igual forma, durante este período tuvo su fase final la Orogenia Herciniana.
Orogenia Herciniana
Como es bien sabido, este fue un proceso de formación de montañas, ocasionado por el movimiento y colisión de las placas tectónicas. Tuvo una duración de unos 100 millones de años.
Esta orogenia involucró principalmente la colisión entre dos supercontinentes: Gondwana y Laurasia. Como en todo proceso de colisión de supercontinentes, la orogenia Herciniana generó la formación de grandes cadenas montañosas que, se cree, tenían picos de altura similar a los de la cordillera del Himalaya.
Sin embargo, son solo especulaciones de los especialistas a partir de registros fósiles y proyecciones, ya que estas montañas desaparecieron producto de la erosión natural.
Es importante destacar que la orogenia Hercíniana jugó un papel primordial en la formación de la Pangea.
Océanos existentes
En el período Pérmico las masas terrestres no fueron las únicas que experimentaron transformaciones. Algunos cuerpos de agua también fueron transformados y modificados.
- Océano Panthalassa: continuó siendo el océano de mayor tamaño y profundidad del planeta, precursor del actual océano Pacífico. Se encontraba rodeando a toda las masas continentales.
- Océano Paleo – Tetis: este continente se encontraba ocupando la “O” de la Pangea, entre los territorios de Gondwana y Laurasia. Sin embargo, cuando Cimmeria se separó de Gondwana y comenzó su lento desplazamiento hacia el norte, este océano se fue cerrando lentamente, hasta convertirse en un canal marítimo.
- Océano Tetis: comenzó a formarse durante este período, producto del desplazamiento de Cimmeria hacia el norte. Conforme se fue cerrando el océano Paleo – Tetis, detrás de Cimmeria se comenzó a formar este océano. Ocupó el mismo lugar que ocupaba el Paleo Tetis. Fue bautizado con ese nombre en honor de la diosa griega del mar, Tetis.
Clima
Durante el período Pérmico el clima experimentó ciertas modificaciones. Lo primero que se debe acotar es que este período se inició y se terminó con glaciaciones. Al inicio del período, parte de Gondwana se encontraba cubierta de hielo, especialmente hacia el polo sur.
Hacia la zona ecuatorial, el clima era mucho más cálido, lo cual facilitó el desarrollo y permanencia de diversos seres vivos, tal como lo demuestran los registros fósiles.
Conforme fue avanzando el tiempo, el clima del planeta se estabilizó. Las bajas temperaturas se limitaron a los polos, en tanto que en la región ecuatorial seguía existiendo un clima cálido y húmedo.
Esto era así en las áreas cercanas al océano. Kilómetros dentro en la Pangea, la historia era distinta: el clima era árido y seco. Según la opinión de especialistas, había posibilidades de que en este territorio hubiera alternancia de estaciones, con intensas lluvias y sequías prolongadas.
Hacia el final del período hubo un descenso en la temperatura ambiental, al cual le siguió un aumento significativo de la misma, producido por varias causas según diversas hipótesis: actividad volcánica y liberación a la atmósfera de diversos gases como hidratos de carbono, entre otros.
Flora
Durante este período, los niveles de oxígeno atmosféricos eran un poco superiores a los que hay hoy en día, lo cual permitió que prosperaran una serie de formas de vida, tanto a nivel botánico como zoológico.
En el período Pérmico, la vida vegetal se diversificó en gran medida. Continuaron existiendo algunas de las plantas que habían dominado durante el Carbonífero.
Particularmente el grupo de los helechos declinó notablemente durante este período. De igual forma, en la región ecuatorial había selvas, las cuales pudieron desarrollarse gracias al clima favorecedor de esta zona.
Así mismo, el tipo de planta que dominó durante el período Pérmico fueron las gimnospermas. Es importante recordar que estas plantas pertenecen al grupo de las plantas con semilla, siendo su característica esencial que su semilla se encuentra “desnuda”. Esto quiere decir que la semilla no se desarrolla en un ovario (como en las angiospermas).
Entre las gimnospermas que hicieron su aparición en la Tierra, se pueden mencionar los ginkgos, las coníferas y las cicadáceas.
Ginkgos
Se cree que los primeros ejemplares de este grupo aparecieron en el período Pérmico. Estas eran plantas dioicas, lo que quiere decir que había individuos con órganos reproductores masculinos y plantas con órganos reproductores femeninos.
Este tipo de plantas eran arborescentes. Sus hojas eran amplias, con forma de abanico e incluso se estima que podían alcanzar medidas de 20 cm.
Casi todas las especies se extinguieron, en la actualidad solo se encuentra una especie, el Ginkgo biloba.
Coníferas
Son plantas que deben su denominación a la estructura en la que se encuentran almacenadas sus semillas, los conos. Los primeros representantes de este grupo surgieron en este período. Eran plantas monoicas, con las estructuras reproductoras, femeninas y masculinas en un mismo individuo.
Estas plantas pueden adaptarse a ambientes extremos, como los muy fríos. Sus hojas son sencillas, con forma de aguja y perennes. Sus tallos son leñosos.
Cicadáceas
Este tipo de plantas han logrado sobrevivir hasta la actualidad. Entre sus características se pueden mencionar su tallo leñoso, sin ramificaciones, y sus hojas pinadas que se encuentran ubicadas en el extremo terminal de la planta. Además eran dioicas; presentaban gametos femeninos y masculinos.
Fauna
En el período Pérmico se mantuvieron algunas especies de animales que tuvieron su origen en períodos anteriores como el Devónico o el Carbonífero.
Sin embargo, durante este período surgió un grupo importante de animales, los reptiles mamiferoides, que son considerados por los especialistas como los antecesores de los mamíferos actuales. Así mismo, en los mares la vida también fue diversa.
Invertebrados
Dentro del grupo de los invertebrados, se destacaron algunos grupos marinos como los equinodermos y los moluscos. Se han encontrado diversos registros fósiles de bivalvos y gasterópodos, así como también de braquiópodos.
De igual forma, dentro de este grupo y en los ecosistemas marinos destacaron los miembros del filo porífera (esponjas), los cuales formaron parte de arrecifes de barrera.
Hubo una especie de protozoario que alcanzó una gran diversificación y desarrollo durante este período, los fusulínidos. A pesar de que se extinguieron, se ha encontrado un abundante registro fósil, tanto que han logrado identificarse más de 4 mil especies en los fósiles. Su característica distintiva era que se encontraban protegidos por una cubierta de material calcáreo.
Por otra parte, los artrópodos, en especial los insectos, se mantuvieron, al menos al principio, como en el Carbonífero. Cabe destacar que el tamaño de los insectos era bastante significativo.
Un ejemplo de esto era Meganeura, la llamada “libélula gigante”, así como otros miembros del grupo de los arácnidos. Sin embargo, conforme avanzó el tiempo el tamaño de estos insectos fue disminuyendo gradualmente. Los especialistas han indicado que esto quizás se debió a una reducción de los niveles de oxígeno atmosférico.
Por último, dentro del grupo de los artrópodos, en este período aparecieron varios órdenes nuevos, como los dípteros y los coleópteros.
Vertebrados
Los vertebrados también experimentaron una gran ampliación y diversificación, tanto en ecosistemas acuáticos como terrestres.
Peces
Entre los peces más representativos de este período se encuentran los condrictios (peces cartilaginosos), como el tiburón y los peces óseos.
Hybodus
Este pertenecía al grupo de los condrictios. Fue un tipo de tiburón que se extinguió en el período Cretácico. Según los datos recabados, se cree que podía tener una dieta mixta, ya que presentaba dientes de diferentes formas, adaptados a diferentes tipos de alimentos.
Eran muy similares a los tiburones actuales, aunque no era de gran tamaño, ya que sólo podía alcanzar unos 2 metros de longitud.
Orthacanthus
Fue un tipo de pez extinto. A pesar de que pertenecía al grupo de los tiburones, su aspecto era bastante diferente. Tenía el cuerpo alargado y algo delgado, similar al de una anguila. Tenía también varios tipos de dientes, lo que permite inferir que podía tener una dieta variada.
Anfibios
En este período existieron varios de tipo tetrápodos (con cuatro patas). Entre estos, uno de los más representativos fue el Temnospondyli. Tuvo su auge durante los períodos Carbonífero, Pérmico y Triásico.
Este era un grupo bastante diverso, cuyo tamaño podía oscilar entre algunos centímetros hasta aproximadamente 10 metros. Sus extremidades eran pequeñas y su cráneo tenía forma alargada. En lo referente a su alimentación, era carnívoro, siendo depredador de pequeños insectos esencialmente.
Reptiles
Este fue un grupo que experimentó una gran diversificación. En este período destacaron los llamados terápsidos, así como también los pelicosaurios.
Terápsidos
Es un grupo de animales que, se cree, son los antepasados de los mamíferos actuales. Debido a esto, se conocen como reptiles mamiferoides.
Dentro de sus características distintivas se puede mencionar que presentaban varios tipos de dientes (como los mamíferos de la actualidad), cada uno adaptado a diversas funciones. Además presentaban cuatro extremidades o patas y su dieta era variada. Había especies carnívoras y otras herbívoras.
Dicinodontos
Este tipo de terápsidos presentaban un cuerpo bastante compacto, con huesos resistentes y cortos. Así mismo, sus dientes eran bastante pequeños y su hocico se modificó en un pico. En lo referente a la alimentación, era netamente herbívoros.
Cinodontos
Eran un grupo de animales de pequeño tamaño, siendo el mayor tamaño de 1 metro de longitud. Así como los mamíferos actuales, tenían diferentes tipos de dientes, especializados para distintas funciones como desgarrar, cortar o triturar.
Los especialistas creen que este tipo de animales pudieron tener el cuerpo cubierto de pelos, lo cual es una de las características distintivas del grupo de los mamíferos.
Pelicosaurios
Fue un grupo de animales que presentaban un cuerpo algo compacto, con cuatro extremidades cortas y una larga cola. Así mismo, en su superficie dorsal presentaban una amplia aleta que, según los expertos, les permitía regular la temperatura corporal para mantenerla constante.
Mesosaurus
Mención aparte merece este reptil propio de ecosistemas dulceacuícolas, en donde era un reconocido depredador. Su cuerpo era más largo que alto y presentaba también un hocico alargado, provisto de largos dientes. Externamente se asemejaban a los cocodrilos actuales.
Divisiones
El Pérmico se encuentra dividido en tres épocas, las cuales, a su vez, abarcan nueve edades.
Cisuraliense
Fue la primera división de este período. Tuvo una duración de 29 millones de años y a su vez estuvo integrada por cuatro edades:
- Asseliense (299 – 295 millones de años)
- Sakmariense (293 – 284 millones de años)
- Artinskiense (284 – 275 millones de años)
- Kunguriense (275 – 270 millones de años)
Guadalupiense
Segunda división del período. Con una duración de 5 millones de años. La conformaron tres edades:
- Roadiense (270 – 268 millones de años).
- Wordiense (268 – 265 millones de años)
- Capitaniense (265 – 260 millones de años)
Lopingiense
Fue la última división del período. Alcanzó una duración de 9 millones de años. Las edades que la conformaron fueron:
- Wuchiapingiense (260 – 253 millones de años)
- Changhsingiense (253 – 251 millones de años.
Referencias
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