Lengua y literatura

Miguel Hernández: biografía y obra literaria


Miguel Hernández Gilabert (1910-1942) fue un poeta y dramaturgo español, reconocido como uno de los más importantes del siglo XX. Formó parte de la Generación del 36, surgida después de la Guerra Civil española. Sin embargo, su estilo literario y características fueron más cercanas a la Generación del 27.

Hernández fue un poeta autodidacta, cuya obra se caracterizó por ser singular y profunda, alineada en gran medida al deber que sentía con la sociedad de su tiempo. El primer trabajo literario con que se dio a conocer fue Perito en lunas, una serie de poemas basados en objetos habituales.

La primera parte de la obra del poeta se relacionó con las costumbres y tradiciones propias de su época. Luego pasó a ser personal e íntima, llena de sentimientos y emociones. El desarrollo de su escritura estuvo influenciado por grandes literatos como Luís de Góngora, Francisco de Quevedo y Garcilaso de la Vega.

Índice del artículo

Biografía

Nacimiento y familia de Hernández

Miguel nació el 30 de octubre de 1910 en la localidad de Orihuela, Alicante. Provino de una familia humilde, dedicada a las actividades del campo. Sus padres fueron Miguel Hernández Sánchez y Concepción Gilabert. El poeta fue el tercer hijo de los siete que tuvo el matrimonio.

Educación

Miguel Hernández estuvo involucrado desde niño en las labores de pastoreo. Sin embargo, recibió educación primaria en el instituto Nuestra Señora de Monserrat entre 1915 y 1916, posteriormente pasó a la escuela el Amor de Dios desde 1918 hasta 1923.

En 1923, cuando tenía trece años de edad, inició el bachillerato en uno de los colegios de los jesuitas en Orihuela, llamado Santo Domingo. Siempre mostró talento para los estudios, por ello le fue propuesta una beca para seguir estudiando. No obstante, su padre no aceptó, porque a su juicio el joven poeta debía dedicarse al pastoreo.

Fue entonces cuando Hernández abandonó los estudios, sin embargo, se aferró mucho más a la lectura, actividad que realizó mientras pastoreaba. Por esa época conoció al sacerdote Luís Almarcha, quien le facilitó varios libros. Además, Miguel asistió de manera frecuente a la biblioteca de su ciudad.

Un poeta autodidacta

El deseo de aprender de Miguel Hernández siempre estuvo vivo, así que en una de sus tantas visitas a la biblioteca decidió formar una especie de club literario con otros chicos. Entre los integrantes estuvieron los hermanos Fenoll, Carlos y Efrén, Manuel Molina y Ramón Sijé.

Aunque Hernández no pudo continuar los estudios, encontró las maneras de seguir aprendiendo. Los libros se convirtieron en sus principales maestros. Obtuvo conocimientos a través de las obras de escritores como Miguel de Cervantes, Garcilaso de la Vega, Luís de Góngora, Lope de Vega, por nombrar algunos.

Primera máquina de escribir y único premio

Para escribir sus poemas en limpio, Miguel contó con la ayuda de un cura. Posteriormente decidió comprarse su propia máquina de escribir, así que adquirió una portátil que le costó, en aquel entonces, trescientas pesetas. El poeta estrenó su adquisición el 20 de marzo de 1931.

Cinco días después de haber usado por primera vez su preciada máquina, obtuvo su primer y único premio de parte de la Sociedad Artística del Orfeón Ilicitano; tenía veinte años de edad. La obra con que ganó se tituló Canto a Valencia, bajo el lema luz, pájaros, sol, un poema de 138 versos.

Dos viajes a Madrid

Hernández realizó su primer viaje a Madrid el 31 de diciembre de 1931, con la finalidad de asegurarse un lugar en la plaza literaria. Aunque llevó la experiencia obtenida en su natal Orihuela, y algunas recomendaciones, no consiguió lo que buscaba, y regresó un año después, el 15 de mayo.

Al año siguiente publicó su primera obra, Perito en lunas, y después de algunas actividades en torno al libro se fue de nuevo a la capital del país. Esa vez la estadía en Madrid fue más fructífera. En ese entonces fue colaborador en las Misiones Pedagógicas.

Además, el escritor José María de Cossío lo empleó como secretario y redactor de la enciclopedia Los toros, y fue el protector de la obra de Hernández. La Revista Occidente también le abrió las puertas, y colaboró en varios artículos. El escritor hizo amistad con Pablo Neruda y Vicente Aleixandre.

Ese segundo viaje a Madrid lo unió en una pasión fugaz con la pintora surrealista llamada Maruja Mallo, musa de algunos versos de El rayo que no cesa. Si bien por esa época su obra tuvo roces con el surrealismo, también expresó su compromiso y deber social con los más necesitados.

Hernández y la Guerra Civil

Cuando estalló la Guerra Civil en 1936, el poeta estaba en su ciudad natal, luego se trasladó a Elda para acompañar a su novia Josefina Manresa tras el homicidio de su padre. En ese mismo año se unió al Partido Comunista de España, y un año después ejerció como comisario político.

El poeta también formó parte del Quinto Regimiento de Milicias Populares, un cuerpo de voluntarios durante la Segunda República. Además, Hernández estuvo presente en la batalla de Teruel. Un año después de haber comenzado el conflicto bélico, contrajo matrimonio con Josefina el 09 de marzo.

Últimas actividades de Hernández

A los pocos días de haberse casado con Josefina Maresa tuvo que irse a Jaén, y más tarde a Madrid y Valencia para asistir al II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura; posteriormente viajó a la Unión Soviética.

El 19 de diciembre de 1937 se convirtió en padre por primera vez, pero su hijo falleció diez meses después. Al niño le dedicó Hijo de la luz y de la sombra. Al año siguiente, la vida le volvió a sonreír cuando el 04 de enero de 1939 nació Manuel Miguel, su segundo hijo. A él le escribió Nanas de la cebolla.

Encarcelamiento y fallecimiento

Con el fin de la Guerra Civil en 1939, llegó la tragedia para Miguel Hernández. La edición completa de El hombre acecha fue destruida por órdenes de Franco, sin embargo, quedaron dos impresiones que permitieron la reedición en 1981. El escritor, ante el acoso de la dictadura, intentó salir de España.

En su intento de huir de su país para llegar a Portugal, fue detenido por el cuerpo policial del dictador de ese país, Antonio de Oliveira Salazar, quien lo entregó a la guardia civil.

El escritor fue encarcelado, y la pena de muerte se la cambiaron por 30 años en prisión. Miguel Hernández falleció de tuberculosis el 28 de marzo de 1942.

Obra literaria

Miguel Hernández escribió su obra casi siempre relacionada con sus experiencias de vida. Fueron tres los temas principales: el amor, la vida y la pérdida física, tratados desde la profundidad del alma, y, en muchas ocasiones, desde el dolor. Sus composiciones fueron estructuradas, mayormente en sonetos y octavas reales.

El lenguaje de su obra fue rudo y algo tosco, pero eso no le quitó belleza a su poesía. Las metáforas y las exageraciones jugaron un papel importante, de la misma forma que lo hicieron los símbolos o analogías. Entre los recursos más usados estuvieron: la serpiente, el cuchillo, la sangre, el león y el buey.

Poesía

– Perito en lunas (1933).

– El rayo que no cesa (1936).

– Viento del pueblo (1937).

– Cancionero y romancero de ausencias (1938-1941).

– El hombre acecha (1937-1938).

– Nanas de la cebolla (1939).

Breve descripción de las obras poéticas más representativas

Perito en lunas (1933)

Esta obra fue la primera poética de Miguel Hernández, al principio fue titulada Poliedros. Los temas tratados tienen que ver con la cotidianidad, a los cuales el poeta los pone en un nivel artístico y distintivo. El libro está compuesto por 42 poemas en octavas reales o en ocho versos endecasílabos consonantes.

Fragmento de “Yo: Dios”

“El maná, miel y leche, de los higos,

lluevo sobre la luz, dios con calzones,

para un pueblo israelita de mendigos

niños, moiseses rubios en cantones;

ángeles que simulan las pasiones

en una conjunción vana de ombligos

por ésta, donde tiene serranía

tanta, pura la luz, categoría”.

El rayo que no cesa (1936)

Miguel Hernández trató en este poemario el tema del amor, ya que fue inspirado en el pasional romance que tuvo con Maruja Mallo. Su musa fue idealizada, tanto que se convirtió en la causa de los males amorosos del escritor. El poemario lo estructuró con sonetos o versos endecasílabos.

Fragmento de “El rayo que no cesa”

“¿No cesará este rayo que me habita

el corazón de exasperadas fieras

y de fraguas coléricas y herreras

donde el metal más fresco se marchita?

¿No cesará esta terca estalactita

de cultivar sus duras cabelleras

como espadas y rígidas hogueras

hacia mi corazón que muge y grita?”.

Viento del pueblo (1937)

Esta obra poética de Hernández se caracterizó por tratar el conflicto de la guerra. El autor reflejó la desidia y la desesperación de los pobres y marginados tras el conflicto. Fue un escrito de responsabilidad social, donde el poeta trató al amor desde el punto de vista universal, como una necesidad.

El lenguaje utilizado por Miguel es directo y preciso, a la vez promocionó la urgencia de mejores políticas para los más necesitados. En cuanto a la composición métrica predomina el romance o de versos octosílabos con rima asonante en los pares.

Fragmento de  “Vientos del pueblo me llevan”

“Vientos del pueblo me llevan,

vientos del pueblo me arrastran,

me esparce le corazón

y me aventan la garganta.

Los bueyes doblan la frente,

impotentemente mansa,

delante de los castigos:

los leones la levantan

y al mismo tiempo castigan

con su clamorosa zarpa.

¿Quién habló de echar un yugo

sobre el cuello de esta raza?

¿Quién ha puesto al huracán

jamás ni yugos, ni trabas,

ni quién al rayo detuvo

prisionero en una jaula?

Asturianos de braveza,

vascos de piedra blindada,

valencianos de alegría

y castellanos del alma…”.

Teatro

– Quien te ha visto y quien te ve y sombra de lo que eras (1933).

– El torero más valiente (1934).

– Los hijos de la piedra (1935).

– El labrador de más aire (1937).

– Teatro en la guerra (1937).

Breve descripción de las obras de teatro más representativas

Quien te ha visto y quien te ve y sombra de lo que eres (1933)

Esta obra de teatro del dramaturgo español fue escrita en 1933, pero publicada un año después en la revista Cruz y Raya. Fue de tipo religioso, muy parecida a las escritas por Pedro Calderón de la Barca; estuvo estructurada en tres actos.

Los actos que la compusieron se titularon: estado de las inocencias, estado de las malas pasiones y estado del arrepentimiento. Cada uno se relacionó con el nacimiento, el pecado y el arrepentimiento. Esta obra fue llevada por primera vez a un escenario el 13 de febrero de 1977, en el Teatro Circo de Orihuela.

Los hijos de la piedra (1935)

La obra fue inspirada en Fuenteovejuna de Lope de Vega. El autor desarrolló la historia de amor entre dos amantes, en medio de una lucha por las reivindicaciones obreras. La obra se torna trágica cuando Retama, la protagonista, fallece a causa de la violencia de su jefe.

Miguel Hernández la estructuró en tres actos, repartidos en las acciones de los trabajadores de una mina, para luego pasar a la temática social de la baja de salarios hasta pasar al drama, y llegar a la revuelta cívica. La pieza teatral gozó de cualidades poéticas y escénicas.

El labrador de más aire (1937)

Fue una obra de teatro de carácter social, escrita por Hernández en versos. Fue la expresión de su preocupación ante las consecuencias abrasadoras de la Guerra Civil, plasmada en una historia amorosa que el poeta estructuró en tres actos, que a la vez se dividieron en cuadros.

Los protagonistas principales son Encarnación y Juan, quienes son primos. La historia se origina en el amor que la joven siente hacia su pariente, y este desconoce. En las sucesivas escenas van apareciendo personajes que le adicionan a la obra disputas, dolor y venganza.

Los críticos han considerado que esta obra del dramaturgo español tiene una marcada influencia de Lope de Vega. Evidenciada por la trama rural, y la existencia de un malvado que desea lucir su honra sin mancha, entre otros aspectos, pero Miguel Hernández siempre logró ser auténtico.

Antologías póstumas

– Seis poemas inéditos y nueve más (1951).

– Obra escogida (1952).

– Antología (1960).

– Obras completas (1960).

– Obra poética completa (1979).

– 24 sonetos inéditos (1986).

– Miguel Hernández y los mandones de la muerte (2014).

– La obra completa de Miguel Hernández (2017).

Referencias

  1. Tamaro, E. (2004-2019). Miguel Hernández. (N/a): Biografías y Vidas. Recuperado de: biografiasyvidas.com.
  2. Miguel Hernández. (2019). España: Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
  3. Miguel Hernández. Biografía. (2019). España: Instituto Cervantes. Recuperado de: cervantes.es.
  4. Romero, G. (2018). Perito en lunas. España: Perito en Lunas. Recuperado de: lunasperito.blogspot.com.
  5. Vida de Miguel Hernández. (2019). España: Fundación Cultural Miguel Hernández. Recuperado de: miguelhernandezvirtual.es.