Definición de mutilación
Se conoce con el concepto de mutilación al proceso y las consecuencias de mutilar, un verbo que hace referencia a amputar o escindir un fragmento de algo. Generalmente se utiliza para referirse al cercenamiento de alguna parte del cuerpo de un ser vivo.
Algunos ejemplos donde encontramos el término pueden ser: “Las autoridades investigan la mutilación de decenas de vacas en una zona rural de la provincia”, «En algunos lugares la mutilación de genitales es parte de la cultura; un paso necesario para alcanzar la pureza» , “El cineasta se indignó por la mutilación de su obra”.
La mutilación puede asociarse a la amputación de un miembro u otra parte del cuerpo. La misma puede producirse debido a una decisión médica (para evitar la propagación de una enfermedad o reducir su impacto) o por un fuerte traumatismo.
A nivel quirúrgico, una mutilación consiste en amarrar los vasos sanguíneos para evitar hemorragias y luego cortar los músculos y los huesos de la zona. Cuando es posible, se adecua la zona para que el paciente pueda utilizar una prótesis a modo de reemplazo de la extremidad amputada.
La mutilación, por otra parte, puede llevarse a cabo a la manera de castigo. Ciertos pueblos defienden la punición física a los criminales y pueden llegar a cortar las manos de los delincuentes para evitar que vuelvan a robar.
A nivel simbólico, por último, la mutilación es un recorte o cercenamiento de cualquier objeto: “El editor decidió la mutilación de la novela, eliminando los fragmentos más polémicos”, “La mutilación de la escultura se llevó a cabo en horas de la noche, cuando el museo estaba cerrado”.
Mutilación femenina: clitoridoctomía
Se habla de mutilación genital cuando se extirpan, ya sea total o parcialmente, los órganos reproductivos. En estos casos, la mutilación puede deberse a una cuestión vinculada a la religión o a razones estéticas. En algunas regiones, la mutilación genética se aplica a la mujer (eliminando el clítoris) como una forma de dominación.
Se trata de un ritual que se realiza cuando las mujeres van a entrar en la vida adulta; y se considera como una forma de prepararlas para la madurez. En las culturas que comparten este tipo de ritual piensan que así se purifica el cuerpo para llevar una vida acorde a las reglas de la religión que los congrega.
Bajo el nombre de clitoridoctomía o ablación de clítoris, este ritual se desarrolla en muchas más culturas de las que creemos; la mayoría de ellas ubicadas en Medio Oriente y Asia. La cirugía consiste en eliminar el labio inferior y dos terceras parte del superior del clítoris, el aparto genital femenino externo.
Las niñas son expuestas a esta cirugía para marcar el término de su edad infantil y el comienzo de su madurez, en la que comenzaran a mantener relaciones sexuales: a grandes rasgos el mensaje de esta operación es indicar que la niña ya está lista para procrear. Se trata de una ceremonia en la que participan todos los miembros de la comunidad que se practica desde hace millones de años. En la mayoría de estas culturas se cree y las niñas crecen convencidas de ello, que si no se realiza esta mutilación serán castigadas con toda clase de torturas divinas.
Como es de esperarse, esta costumbre tiene muchísimos detractores debido a que podría considerarse una violación de los derechos humanos. En parte porque este tipo de acciones impiden el goce sexual en las mujeres, por otra parte porque las niñas que son sometidas a él no tienen la opción de elegir.
Cabe mencionar que estas cirugías se realizan en condiciones paupérrimas de higiene y esta es otra de las razones por las que se las considera un delito contra la integridad de las mujeres. Durante estas operaciones se produce un sangrado impresionante y las niñas generalmente se desmayan. Quienes realizan estas prácticas tienen que ser mujeres; y son personas de confianza del círculo familiar que ya lo han realizado con anterioridad pero que no tienen licencia médica. Los instrumentos utilizados tampoco son los apropiados y no están desinfectados correctamente. Esto, como es de esperarse, trae muchísimos problemas posteriores, de infecciones que, muchas veces acaban con la vida de las víctimas.
Al día de hoy hay muchísimas organizaciones que luchan por eliminar para siempre esta práctica del mundo, respaldadas por Unicef, el órgano de Naciones Unidas encargado de preservar los derechos de la infancia.