Definición de índice de desarrollo humano
Con origen en el latín index, la palabra índice describe a un indicio, una referencia o una señal que da cuenta de una determinada cosa. El término puede aprovecharse para identificar a la estructura numérica que revela la relación entre diversas clases de indicadores o entre un par de cantidades.
Desarrollo, por su parte, es el hecho y resultado de progresar o desarrollarse (acrecentar, aumentar o incrementar algo de orden intelectual, físico o moral). Humano, por último, es aquello que se asocia o guarda relación con el hombre.
Con estas nociones en claro, podemos pasar a analizar el concepto de índice de desarrollo humano (expresado por lo general con la sigla IDH). Se trata de un indicador de carácter estadístico que recopila información sobre el nivel de vida que predomina en cada nación.
El IDH está bajo responsabilidad del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (cuya sigla es PNUD), un organismo que concibe al desarrollo humano como el impulso del progreso potencial de los sujetos.
Países con mayor y menor Índice de Desarrollo Humano
Este índice comenzó a utilizarse a partir del año 1990 a través de un proyecto lanzado por la ONU, hasta dicho momento el desarrollo de los países se medía con su crecimiento económico, pero dadas ciertas investigaciones se descubrió que este número no respondía al desarrollo humano también, sino netamente comercial, por tanto se creó el Índice de Desarrollo Humano (IDH).
Dicho proyectó se anunció bajo el argumento de que las personas son la verdadera riqueza de una nación y que era necesario tenerlas más en cuenta que a las ganancias económicas. Gracias a él puede establecerse una lista para clasificar a cada país teniendo en cuenta no sólo los ingresos económicos, sino también indicadores que responden a cuestiones de salud y educación, principalmente.
Este índice incluye el promedio de ingresos de cada individuo y su salud y educación, tomando en cuenta otros indicadores como el de esperanza de vida y el promedio de escolaridad en adultos y niños en edad escolar.
De momento estas son las variables que se tienen en cuenta a la hora de medir el índice de desarrollo, sin embargo el PNUD busca otras formas de conocer el desarrollo humano, tales como el nivel de democracia, la sostenibilidad, la libertad de expresión y la desigualdad y se espera que en un futuro no muy lejano éstas puedan incluirse también, aunque su implementación es mucho más difícil debido a que es más complejo de calcular.
De acuerdo a las diversas estadísticas realizadas a partir de los cuantiosos censos que se realizan cada año en cada país, se puede alcanzar un conocimiento de la esperanza de vida al momento del nacimiento; el nivel de alfabetización en gente adulta; la asistencia estudiantil en los niveles primarios, secundarios y superiores; los años de instrucción obligatoria; y el Producto Interno Bruto (PIB) por persona. Estas estadísticas permiten obtener un guarismo que refleja el desarrollo humano de cada territorio.
El continente más desigual en el Desarrollo Humano es América Latina, teniendo países que ocupan los últimos escalones de la lista y otros que se encuentran a la mitad. El mejor país en este continente en cuanto al IDH, es Chile, que ocupa el puesto 45º a escala mundial.
En otros datos que se recogen del último censo, realizado en el año 2010 puede verse que Noruega es el país con mejor IDH: 0,938 puntos. Le siguen Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos e Irlanda, en ese orden. Al otro extremo, la nación con peor IDH es Zimbabwe (0,140), con un resultado apenas más alto que la República Democrática del Congo, Níger, Burundi y Mozambique.