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Wallaby: características, clasificación, hábitat, especies


El wallaby o ualabí es el nombre común que recibe cualquier especie de marsupial diprotodonto, integrante de la familia Macropodidae, cuyo tamaño sea menor que el de los canguros. El tamaño puede variar desde 46 centímetros hasta 1,8 metros.

En la actualidad, existen alrededor de 30 especies, distribuidas principalmente en Australia y en las islas de Nueva Guinea. En estas regiones habita en montañas, selvas o zonas rocosas.

Sus extremidades traseras son poderosas, mientras que las delanteras son más cortas, pero con una musculatura igual de fuerte que las posteriores. El ualabí tiene una cabeza alargada y pequeña, en comparación al cuerpo.

En cuanto a los ojos, son de gran tamaño y están situados a los lados de la cabeza. El hocico es alargado, terminando en una boca pequeña, cuyo labio superior se encuentra dividido.

Características del wallaby

Tamaño

Las dimensiones del wallaby son menores que las del canguro. Dependiendo de la especie, este puede tener un tamaño mediano o pequeño. De manera general, los más grandes pueden llegar a medir 1,8 metros, con un peso que oscila los 42 kilogramos.

En cuanto al miembro más pequeño de este grupo, es el wallaby enano. Su cuerpo tiene una longitud de 46 centímetros y una masa corporal de aproximadamente 1,6 kilogramos.

Extremidades

Las extremidades posteriores son poderosas y estrechas, mucho más compactas que la de los canguros. Esta particularidad le permite movilizarse ágilmente en las áreas boscosas donde habita. Además, cuando el ualabí pelea, puede propiciar unas fuertes patadas con sus patas posteriores. Estas poseen cuatro dedos, dos de los cuales son vestigiales.

También, tienen tendones elásticos de gran tamaño. En estos se almacena la energía de tensión elástica, utilizada en los saltos. Por otra parte, el rebote ocurre por la acción de resorte que realizan los tendones, en lugar de ser producto del esfuerzo muscular.

Con relación a las extremidades anteriores, son cortas y poseen cinco dedos, incluyendo un pulgar no oponible. Cada uno de estos termina en una garra afilada. Estas patas se encuentran constituidas por un gran grupo de músculos, que en los machos son particularmente fuertes.

Esto es debido a que son utilizadas en las peleas y en las demostraciones de dominancia ante el grupo. Además, el ualabí emplea sus patas delanteras para realizar saltos a grandes distancias y para saltar, mientras se desplaza a una gran velocidad.

Cola

La cola es larga y tiene una base gruesa. Así mismo, es musculosa, lo que contribuye en el mantenimiento del equilibrio corporal, al igual que interviene cuando el animal se desplaza de manera pentapedal. También, sirve de apoyo al cuerpo mientras descansa.

Pelaje

El pelo es suave, lanoso y corto. Con relación a la coloración, varía según el género y la especie. Sin embargo, generalmente suele ser brillante y cada ualabí puede presentar dos o tres tonos diferentes.

Entre los colores del pelaje se encuentran el gris, marrón claro, marrón parduzco y rojizo, alternados con pelos blancos que le dan un aspecto canoso. Algunos pudieran tener rayas en la cabeza, en las patas traseras o en la espalda.

Como ejemplo de esta diversidad de colores está el wallaby de cuello rojo (M. rufogriseus), que tiene los hombros y la parte posterior del cuello de color rojizo, mientras que el wallaby de bridas ​(Onychogalea fraenata) tiene rayas en los hombros.

También, el wallaby de cara bonita (M. elegans) presenta marcas en las mejillas y el wallaby de roca (Petrogale lateralis) tiene el cuerpo en tonos grises y marrones, con rayas y parches.

Dentición

El wallaby habita en bosques densos, donde se alimenta principalmente de hojas. Debido a las características de los vegetales que consume, necesita dientes planos, que contribuyan a moler los alimentos. Así, sus dientes no son cortantes, por lo que las coronas de los molares son menos pronunciadas.

No obstante, este mamífero tiene una pieza bucal afilada, ubicada en la mandíbula superior. Esta es utilizada para cortar las plantas, cuando esto sea necesario. Además, a diferencia de los canguros, el ualabí mantiene sus premolares.

Marsupio

El marsupio es un pliegue de piel que recubre las mamas de la hembra, formando una bolsa epidérmica. En esta, la cría culmina su desarrollo. Dicha estructura se encuentra en posición ventral, abriéndose horizontalmente en el área frontal.

La bolsa está conformada por ligamentos y por músculos poderosos y flexibles. Esto permite que se ajuste al tamaño que vaya adquiriendo la cría, mientras se desarrolla. Por otra parte, la madre puede contraer dicha musculatura, para cerrar el marsupio y mantener así seguro al joven.

Otra particularidad del marsupio es que se encuentra cubierto de glándulas sudoríparas, que secretan sustancias antimicrobianas. Esta tiene la función de proteger al embrión de las bacterias, parásitos y virus. También, en la parte interna, carece de pelos, por lo que contacto directo con la piel mantiene al joven en un ambiente cálido.

Funciones

La cría nace cuando aún es un embrión. En ese momento solo tiene desarrollado las extremidades anteriores, que utiliza para trasladarse desde el útero de la madre hasta el marsupio. En la bolsa, el embrión se adhiere a una de las mamas, donde obtiene una leche altamente nutritiva y rica en anticuerpos.

La composición de esta leche varía, para satisfacer los requerimientos del joven, a medida que se está desarrollando. Este permanece en el marsupio alrededor de ocho meses, aunque puede acudir regularmente por seis meses más.

En este sentido, a pesar de que el wallaby esté completamente desarrollado, la madre lo transporta en la bolsa para defenderlo de la amenaza de los depredadores.

Locomoción

El wallaby tiene un sistema muscular diseñado para mantenerse en movimiento saltando, sin que esto implique un exagerado gasto de energía.

Además de esta poderosa musculatura de las extremidades, este grupo de macrópodos tiene un conjunto de tendones que unen la cola con los huesos de la cadera. Esta singular combinación entre los músculos y los tendones permite que el ualabí se mueva eficientemente.

Así mismo, cuenta con vértebras caudales que se encuentran adaptadas para los desplazamientos laterales, que forman parte del repertorio locomotor.

Con relación al salto, ambas patas traseras se impulsan al mismo tiempo desde el suelo, pudiendo realizarlo a diversas velocidades, según sea su necesidad. Así mismo, es capaz de mantener una velocidad constante por largo tiempo.

Por otra parte, cuando se desplaza a baja velocidad, lo hace utilizando la locomoción pentapedal. En este movimiento, utiliza la cola, con la que, conjuntamente con las patas delanteras, forma un trípode. Al tiempo que esto ocurre, las extremidades traseras son llevadas hacia adelante.

En el desplazamiento pentapedal, el papel de la cola es fundamental, ya que su fuerza de propulsión es mayor que la que ejercen las patas anteriores y las posteriores.

Clasificación y especies

El ualabí pertenece a la misma familia que los canguros y, frecuentemente, al mismo género. No obstante, el término constituye una designación informal empleada para designar a los macrópodos de menor tamaño que los canguros. La clasificación sería la siguiente:

Género: Macropus

Especies:

Macropus agilis, Macropus dorsalis, Macropus rufogriseus, Macropus parma , Macropus eugenii, Macropus greyii (extinto), Macropus irma y Macropus parryi.

Género: Petrogale

Especies:

Petrogale assimilis, Petrogale lateralis, Petrogale penicillata, Petrogale coenensis, Petrogale godmani, Petrogale herberti, Petrogale mareeba, Petrogale burbidgei, Petrogale sharmani, Petrogale concinna, Petrogale persephone, Petrogale purpureicollis, Petrogale rothschildi, Petrogale brachyotis, Petrogale inornata y Petrogale xanthopus.

Género: Lagostrophus

Especies:

Lagostrophus fasciatus, Lagorchestes leporides (extinto), Lagorchestes asomatus (extinto) y Lagorchestes hirsutus.

Género: Dorcopsis

Especies:

Dorcopsis atrata, Dorcopsis muelleri, Dorcopsis luctuosa y Dorcopsis hageni.

Género: Onychogalea

Especies:

Onychogalea fraenata, Onychogalea lunata (extinto) y Onychogalea unguifera

Género: Thylogale

Especies:

Thylogale browni, Thylogale calabyi, Thylogale brunii, Thylogale lanatus, Thylogale stigmatica, Thylogale thetis y Thylogale billardierii.

Género: Dorcopsulus

Especie: Dorcopsulus macleayi.

Género: Wallabia

Especie: Wallabia bicolor.

Hábitat y distribución

Distribución

El ualabí se distribuye ampliamente en toda Australia, aunque también se encuentra en la isla de Nueva Guinea. No obstante, ha sido introducido en diversas regiones a nivel mundial.

Así, en Nueva Zelanda se localiza en la isla de Kawau, en la zona alrededor del lago Tarawera y en South Canterbury. También habita en la isla de Man, entre Inglaterra e Irlanda. En ese territorio insular vive principalmente en los humedales de Ballaugh Curraghs.

En Hawái existe una pequeña población exótica, en la zona del Valle Kalihi, en la isla de Oahu. Además, se encuentra en Peak (Inglaterra), en la isla de Inchconnachan (Loch Lomond-Escocia) y en la isla Lambay, en la costa este de Irlanda.

Con relación al Reino Unido, fue introducido en Devon, Teignmouth, Devon, East Sussex, Ashdown Forest y en las islas de Bute y Lundy. En Francia, el wallaby se encuentra en el área sur del bosque de Rambouillet, al oeste de París.

Hábitat

Estas especies habitan en zonas muy variadas, que incluyen montañas, sabanas, áreas rocosas o selvas. Así, entre sus regiones preferidas están las escarpadas o boscosas, en lugar de las llanuras áridas abiertas. En cuanto a los wallabies más pequeños, prefieren los bosques.

Cada especie vive en una zona específica, donde cuenta con las condiciones adecuadas para desarrollarse. Por ejemplo, el wallaby de cuello rojo (M. rufogriseus), habita en los matorrales al sudeste de Tasmania y Australia.

El wallaby cola de látigo (M. parryi), se distribuye en los bosques abiertos costeros del este de Australia. Así mismo, quokka o wallaby de matorral de cola corta, (Setonix brachyurus) está restringido a las islas de Australia Occidental, especialmente en la isla de Rottnest y en la de Bald.

Estado de conservación

Los wallabies se encuentran agrupados en varios géneros, los que incluyen numerosas especies. Una gran parte de estas poblaciones decrecen día a día, lo que ocasiona que se encuentren en peligro de extinción.

Algunos ya han desaparecido de su hábitat natural, como el ualabí de Grey (Macropus greyi), el ualabí oriental (Lagorchestes leporides) y el wallaby de cola de uñas (Onychogalea lunata).

Otro grupo importante se encuentra amenazado. La UICN ha incluido a diversas especies en su lista roja, entre las cuales se encuentran el wallaby de roca de Proserpine (Petrogale persephone), el wallaby de roca (Petrogale inornata) y el wallaby de cuello rojo (Macropus rufogriseus).

También, están el wallaby de roca de patas amarillas (Petrogale xanthopus), el wallaby de Mareeba (Petrogale mareeba) y el wallaby de pantano (Wallabia bicolor).

Amenazas

El ualabí se encuentra amenazado por múltiples factores, siendo uno de los principales la pérdida y fragmentación de su hábitat natural. Esta situación trae como consecuencia que las poblaciones son forzadas a vivir cerca de las zonas urbanizadas.

Debido a esto, el mamífero puede morir por la colisión con los vehículos en las carreteras y por la depredación de los zorros y de los perros. También, en algunas regiones, el wallaby es considerado una plaga de los cultivos, por lo que es cazado por los lugareños.

Otro hecho que afecta a estas poblaciones es la competencia con otros animales herbívoros domésticos y con especies introducidas, como las ovejas, conejos y cabras. Además, especies como los wallabies de patas amarillas, han sido cazadas para obtener sus pieles y para comercializar su carne.

Alimentación

Este macrópodo es herbívoro y su alimentación está basada en una gran variedad de plantas, entre las que se encuentran los arbustos, las hierbas, los musgos y los hongos. También, come pastos, arbustos, heno, corteza de árboles, frutas y verduras.

Por otra parte, puede pasar largos períodos de tiempo sin beber agua. Un factor que contribuye a satisfacer su necesidad de agua es la ingesta de plantas, que tienen alto contenido del líquido. Incluso, varias especies, como el wallaby de Tammar, puede beber agua de mar.

Proceso digestivo

Una vez que el animal toma la comida, utiliza los labios y la lengua para empujarla hacia los molares. Estos mastican los alimentos, valiéndose de su estructura plana y del movimiento de lado a lado de la mandíbula.

Además, existen tres músculos importantes, el masetero, temporal y pterigoideo, que se fijan en la mandíbula y en la sien. Estos contribuyen en el proceso de morder y de masticar los vegetales.

El sistema digestivo del wallaby se caracteriza por tener una glándula salival de gran tamaño. Esta produce altos niveles de saliva, que contiene una gran concentración de bicarbonato y de iones de sodio. Además, este mamífero puede regurgitar parte de los vegetales ingeridos, contribuyendo así con la degradación de la celulosa.

El estómago

Con relación al estómago, está dividido en dos cavidades: la anterior y la posterior. La cámara frontal tiene forma de saco y contiene abundantes bacterias. En las áreas tubiformes y sacciformes de dicha área, es donde ocurre la fermentación bacteriana.

De esta manera, se inicia la descomposición de los elementos de la pared celular, como la lignina, la celulosa y la hemicelulosa.

Por otra parte, el estómago posterior es la parte más pequeña de este órgano. En este es donde principalmente se lleva a cabo la digestión ácida. Así, esta parte del estómago recibe la masa pre digerida, sobre la cual actúan los ácidos y las enzimas.

Los compuestos orgánicos obtenidos de la degradación de los alimentos son empleados en la obtención de la energía necesaria en los diferentes procesos orgánicos.

Reproducción

La madurez sexual en los machos ocurre alrededor de los dos años, mientras que la hembra puede reproducirse cuando tiene entre 14 y 19 meses. En cuanto a la temporada de apareamiento, puede ser en cualquier época del año. Sin embargo, las uniones son más frecuentes durante el verano, de diciembre a febrero.

Los machos pueden luchar con otros, por el derecho de copular con las hembras. Con relación al proceso reproductivo, se inicia cuando el óvulo es fecundado por el espermatozoide. Una vez fertilizado, se incrusta en la pared del útero.

En el caso particular del wallaby, no se origina la placenta. El huevo se alimenta de la yema que lo rodea. Una vez que esta se consume totalmente, el embrión nace. Esto ocurre alrededor del día 28, contando a partir de la fecundación.

Desarrollo del embrióndentro del marsupio

El embrión emerge del cuerpo de la madre por una abertura llamada cloaca. Se desplaza utilizando sus extremidades anteriores, viajando a través del pelaje de la madre, hasta llegar al marsupio.

Una vez dentro, el embrión se dirige a los pezones. Como no tiene desarrollado los músculos que le permiten succionar la leche, el pezón se hincha dentro de su boca. Posteriormente, la mandíbula se desarrolla y la cría puede desengancharse y succionar de manera voluntaria.

Luego de cuatro o cinco meses, el joven sale de la bolsa. No obstante, regresa a esta si se siente amenazado.

A los pocos días del alumbramiento, la hembra entra en celo nuevamente y se reproduce. Este nuevo óvulo fecundado puede entrar en una etapa de inactividad, llamada diapausa embrionaria. Su desarrollo se activa nuevamente cuando la anterior cría deja el marsupio.

Comportamiento

El ualabí suele ser un animal activo durante la noche y al amanecer, pero estos patrones podrían variar según la especie. Las especies de menor tamaño generalmente son solitarias, mientras que las de mayor tamaño pueden formar grupos.

Durante el verano, este mamífero tiende a congregarse alrededor de un cuerpo de agua. En las horas donde el calor es extremo, permanece en su sitio de descanso, saliendo a buscar su alimento cuando la temperatura ambiental a bajando.

No suele ser un animal agresivo, pero si se siente en peligro, puede patear al depredador. Para esto utiliza sus poderosas patas traseras.

En el caso de percibir una amenaza, el wallaby alerta a sus conespecíficos, golpeando fuertemente el terreno con las patas posteriores. Además, puede pelear, empleando sus extremidades anteriores, haciendo movimientos similares al boxeo.

Para comunicarse puede toser, gruñir o silbar. Cuando la madre necesita llamar a su cría, puede hacer un chasquido.