Energía hidroeléctrica
La energía hidroeléctrica es una modalidad de generación de electricidad. Esta consiste en aprovechar la energía creada a raíz de mover importantes cantidades de agua.
La principal utilidad de la energía hidroeléctrica es llevar a cabo la generación de potencia eléctrica mediante el empleo de agua.
A través de diversos procesos, esta modalidad energética aprovecha la energía generada al mover o manipular importantes cantidades acuáticas.
Para su explotación, este tipo de energía precisa de distintos recursos e infraestructuras. De ese modo, es habitual la construcción de embalses y presas que puedan contener grandes cantidades de agua a aprovechar.
Atendiendo a lo anterior, se construyen centrales hidroeléctricas en estos entornos con la misión de generar diversos procesos generativos.
Al mismo tiempo, serán necesarios sistemas de almacenaje energético para recoger la energía producida.
Características de la energía hidroeléctrica
Esta modalidad de generación energética cuenta con algunas características que la distinguen de otros tipos de energía:
- Carácter circular: La energía procedente de procesos hidroeléctricos es renovable y respetuosa con el medio ambiente.
- Obra civil: Este tipo de generación eléctrica requiere de grandes instalaciones e infraestructuras para el tratamiento del agua y su puesta en marcha para la creación de impulsos eléctricos.
- Maquinaria específica: La transformación de energía cinética derivada del movimiento del agua en electricidad se realiza por medio de tecnología como las turbinas. Estas frenan el agua y la transformación creada activa generadores eléctricos.
- Gran extensión física: Para la correcta elaboración de sistemas de generación eléctrica a raíz del agua, es necesario contar con extensiones de terreno de gran tamaño. Para el aprovechamiento del salto o altura y el caudal de las aguas, se precisa de grandes superficies y alturas en la que tratar lo embalsado.
- Costes relativos: Si bien esta energía supone altos costes para su implementación, una vez creada la central hidroeléctrica, el coste de producción es bajo. Esto es posible gracias al aprovechamiento casi total de la energía creada.
La cantidad de energía desarrollada tendrá que ver directamente con variables como la velocidad o la cota.
En otras palabras, será posible generar una mayor cantidad de energía eléctrica en aquellos procesos que supongan la caída de gran cantidad de agua a una altura significativa. A más velocidad e impacto, mayor energía generada.
La posibilidad de aprovechar una y otra vez el mismo caudal de agua en sucesivas repeticiones del proceso coloca a la energía hidroeléctrica como una opción verde y renovable.