Definición de nefasto
La noción de nefasto proviene del vocablo latino nefastus. Se trata de un adjetivo que puede emplearse para calificar a un momento, una jornada u otro periodo temporal que resulta adverso, desastroso o fatídico.
Por ejemplo: “Ayer tuve un día nefasto: me peleé con mi novia, discutí con mi jefe y extravié mis anteojos”, “2018 fue un año nefasto para el cantante, ya que perdió un juicio millonario que le inició su ex representante y además tuvo que luchar contra varios problemas de salud”, “El equipo de la capital está teniendo un mes nefasto, con cuatro derrotas en igual cantidad de partidos disputados”.
También se menciona como nefasto a la cosa o al individuo que, por sus características o condiciones, es considerado aborrecible o detestable: “Ramírez fue un gobernador nefasto que hizo crecer la pobreza en toda la región”, “Este restaurante es nefasto: los camareros atienden mal, la comida es horrible y los precios son muy elevados”, “Mi vecino es un hombre nefasto que no respeta a nadie y siempre está dispuesto a discutir por cualquier motivo”.
Tomemos el caso de un estadio de fútbol cuyo campo de juego se encuentra lleno de pozos, con zonas sin césped. Además las líneas que marcan las áreas y los bordes son casi imperceptibles. Ante esta situación, los periodistas mencionan que el campo en cuestión se encuentra en un estado nefasto.
Supongamos, por otra parte, que dos equipos de básquetbol (baloncesto) se están enfrentando con un marcador muy parejo. En el último cuarto, sin embargo, uno de los conjuntos falla dieciséis de veinte lanzamientos al cesto y pierde ocho veces el balón. Por ese periodo nefasto, dicho equipo termina sufriendo una clara derrota.
En los ejemplos recién expuestos podemos notar ciertas diferencias en el uso de esta palabra, aunque a simple vista su significado sea siempre el mismo. Mientras que un restaurante nefasto es malo de manera extraordinaria, un día nefasto viene acompañado de desgracia, o sea que no es malo en sí mismo. El primero destaca por la pésima atención, la falta de experiencia en la elaboración de los platos y los precios demasiado altos, pero nadie nos obliga a comer allí; un día colmado de malas noticias o de sucesos terribles, en cambio, puede ser imposible de evitar.
Esto mismo se puede aplicar a otros ejemplos, que se dividen en dos grupos: uno caracterizado por la mala calidad de los sustantivos que reciben la calificación de nefastos, y otro por causar o arrastrar desgracia para quien debe vivirlo. En este segundo grupo están los sustantivos que designan porciones de tiempo, como ser «momento», «semana» o «temporada».
El enfoque que hace el emisor en cada caso es diferente: al calificar un servicio o un producto de nefastos su nivel de objetividad suele ser mucho más alto que al usar este adjetivo para describir un periodo temporal. Aquí entra en juego la superstición, un tema que divide fuertemente a la gente en quienes creen en él y quienes buscan una causa objetiva para cada suceso.
A continuación veremos una lista de los sinónimos más comunes del término nefasto, algunos de los cuales ya han sido mencionados en los párrafos anteriores: desgraciado, funesto, aciago, triste, ominoso, fatídico y desdichado. Los antónimos más normales, por otra parte, son dichoso, venturoso y propicio.
Entre estas palabras, encontramos algunas cuyos sinónimos nos amplían aún más el significado de nefasto. Tal es el caso de ominoso, que se puede definir como «despreciable» o «abominable». Podemos decir, por lo tanto, que nefasto no tiene ningún matiz positivo, como si ocurre con otros términos cuyo significado depende del contexto; en este caso, no hay situación en la cual adquiera un tinte esperanzador.