Definición de mantra
Lo primero que vamos a hacer es determinar el origen etimológico del término que ahora vamos a analizar. Así, podemos establecer que mantra emana del sánscrito y es fruto de la suma de dos elementos: el vocablo mans, que puede definirse como “mente”, y tra, que es sinónimo de “liberación”.
Mantra es un término que puede traducirse como “pensamiento”. En religiones como el budismo y el hinduismo, un mantra es una frase, palabra o sílaba sagrada que se recita como apoyo de la meditación o para invocar a la divinidad.
Es importante recalcar el hecho de que, por regla general, los mantra suelen estar formados por frases largas. No obstante, esta circunstancia es una excepción en el hinduismo, ya que en dicha religión se apuesta, sin embargo, por cadenas de mantras, letanías y estrofas.
Además de todo esto, hay que determinar que los mantras se utilizan de la siguiente manera para que tengan utilidad:
• Son pronunciados por los individuos tanto en voz alta como interiormente, según las circunstancias de cada momento.
• Se repiten constantemente y de una forma rítmica.
• Al igual que sucede en la religión cristiana, se suele recurrir en algunos casos al uso de una serie de elementos que contribuyen a seguir la cadena de mantras, a no perderse y a contabilizar los mismos. En aquella se conocen estos como rosarios y en otras religiones reciben el nombre de mapalas.
• Gracias a los mantras, lo que se consigue es que la persona que los recite pueda relajarse, concentrarse en una tarea determinada y también acabar con las divagaciones que posee su mente. Todo ello sin olvidar que también ayudarán a ese individuo a eliminar de su cabeza todo tipo de pensamientos impuros y que le impidan purificar todo lo que tiene a su alrededor.
El mantra actúa como una herramienta que ayuda a liberar la mente del flujo constante de pensamientos. Gracias a la repetición del mantra, la persona ingresa en un estado de concentración profunda. La meditación, con la ayuda de la mantra, permite que el sujeto concentre su atención en su propia conciencia, en un pensamiento o un objeto externo.
Aunque los mantras no tienen un significado exacto o preciso, se dice que cada sonido corresponde a un aspecto de la iluminación y permite asociar la mente con uno de estos aspectos.
El mantra más popular del budismo es “om mani padme hum”, que corresponde a la compasión. Su traducción más frecuente es “La joya en el loto”. Los budistas sostienen que las seis sílabas de este mantra se vinculan con la dicha o la meditación (om), la paciencia (ma), la disciplina (ni), la sabiduría (pad), la generosidad (me) y la diligencia (hum).
Ciertas tradiciones budistas indican que el mantra sólo tendrá efecto si su recitación es autorizada o supervisada por un lama o gurú. Para algunos líderes como el Dalai Lama, el mantra “om mani padme hum” siempre es útil pero quien lo recita debe pensar en su significado.
Entre los hinduistas, uno de los mantras más conocidos es “om namah shivaia” que suele traducirse como “Reverencias a Shivá” (un dios).