Definición de estepa
El bioma de vegetación herbácea que comprende un territorio llano y extenso se conoce como estepa. Este bioma es habitual en los territorios de clima continental árido con escasas precipitaciones (menos de 500 milímetros anuales) y una amplia variación térmica entre el verano y el invierno.
En la estepa abundan los matorrales y las hierbas bajas que crecen en un suelo de color rojizo (por la gran cantidad de óxido de hierro). Es posible distinguir entre diversos tipos de estepa según su ubicación geográfica y características.
La estepa asiática está vinculada al clima continental semiárido. Su vegetación es xerófila, con plantas de raíces profundas capaces de subsistir con poca agua. Esta estepa está habitada por roedores, aves migratorias, caballos, antílopes y otras especies de animales.
La estepa norteamericana es aquella que ocupa las grandes llanuras desde el norte de México hasta el sur de Canadá. Estados como Colorado, Montana, Nebraska, Texas y Wyoming tienen amplias extensiones de estepa, cuyo clima es menos severo en comparación con la estepa asiática.
La estepa subtropical aparece en lugares como Sicilia (Italia) o Almería (España), mientras que la región pampeana argentina y la pampa magallánica chilena presentan particularidades similares a este bioma.
En otro sentido, el concepto de estepa se utiliza para nombrar a distintas plantas de los géneros Cistus y Halimium. También conocida como jara, la estepa se encuentra en los matorrales mediterráneos y está entre las plantas pioneras en la recuperación de suelos arrasados por incendios forestales.
Estepa, por último, es un municipio de la provincia española de Sevilla que tiene más de 12.000 habitaciones.
Flora y fauna de la estepa
La estepa suele caracterizarse por veranos de mucho calor, e inviernos fríos o frescos. Durante la primavera, el suelo debe descongelarse; la combinación de la acción del sol y la humedad resulta ideal para que germinen diversas semillas que permanecen en estado latente en los meses de verano.
Luego de unas pocas semanas, el suelo se cubre de hierbas cuyo crecimiento es muy rápido. Cabe mencionar que la estepa despliega un gran colorido una vez que florece, haciendo de la primavera su estación más preciosa a nivel visual.
Cuando llega el verano, el intenso calor del sol provoca que las flores se marchiten y la paleta de colores de la estepa se oscurece. Los frágiles tallos se quiebran con las heladas del otoño, y es ese el momento en el cual las semillas se desprenden y caen al suelo; el invierno hace que se cubran de nieve, y así se cierra el ciclo de la flora esteparia.
Dado que la insolación de la estepa es similar a la del desierto, escasean los árboles y, por lo tanto, su fauna debe estar preparada para la exposición a la humedad y a violentas variaciones de temperatura, lo cual explica que sus animales suelan cavar extensas galerías para construir nidos subterráneos; tal es el caso de la ardilla «perrillo de las praderas» y del tejón (un mamífero de tamaño mediano, que se alimenta de carne y posee las patas y la cola muy cortas), entre otras especies.
Por otro lado, se encuentran las especies que alcanzan altas velocidades en su desplazamiento para evadir a sus depredadores; algunas de ellas son el caballo y el coyote de la estepa norteamericana, que es capaz de correr a 64 kilómetros por hora.
Entre los animales que más abundan en las estepas del continente asiático se encuentran el caballo, la oveja y el camello, los cuales fueron domesticados desde la antigüedad. En Australia, por otro lado, la especie predominante es el canguro, mientras que en América del Sur, lo son el ñandú (un avestruz de menores dimensiones al procedente de África) y el guanaco.