Definición de electroválvula
La noción de electroválvula se emplea en el terreno de la mecánica. El término hace referencia a una válvula que funciona gracias a un electroimán y que permite el control de un circuito neumático o hidráulico.
Para comprender qué es una electroválvula, como puede apreciarse, hay que prestar atención a varios conceptos. Comencemos con la idea de válvula: se trata de un mecanismo que regula el flujo o el paso de un fluido.
En el caso de la electroválvula, la válvula es accionada mediante un electroimán. Así se denomina a un imán artificial que dispone de un núcleo de hierro dulce con una bobina a su alrededor, por la cual pasa una corriente eléctrica.
Un lavadero automático de automóviles suele contar con una electroválvula.
Funcionamiento de una electroválvula
Un electroimán, pues, es la pieza que permite el accionamiento de una electroválvula para la regulación de un circuito. El electroimán en cuestión tiene una bobina solenoide que crea el campo magnético necesario para el funcionamiento de la válvula.
El solenoide posibilita la conversión, a través del magnetismo, de la energía eléctrica en energía mecánica. Esta energía mecánica mueve la válvula.
Lo que hace la electroválvula es abrirse o cerrarse para permitir o rechazar el paso del fluido por una tubería. Cabe destacar que la electroválvula solo puede adoptar dos posiciones (totalmente abierta o totalmente cerrada), a diferencia de las válvulas motorizadas que aceptan posiciones intermedias.
Clasificación según el tipo
Es posible diferenciar entre las electroválvulas directas o sencillas y las electroválvulas asistidas. Las electroválvulas sencillas quedan abiertas o cerradas según la alimentación eléctrica.
Estas electroválvulas pueden estar cerradas en reposo y abrirse por la intervención de un muelle cuando se activa la bobina solenoide al recibir energía eléctrica, o permanecer normalmente abiertas si no hay alimentación eléctrica y cerrarse por el muelle cuando la bobina es activada.
En las electroválvulas asistidas, en cambio, el solenoide no se encarga de controlar la válvula de manera directa, sino que actúa sobre una válvula secundaria, mientras que la válvula principal acciona con la energía proporcionada por la presión del fluido.
Con una electroválvula, se puede automatizar un sistema de riego.
Usos de la electroválvula
Las electroválvulas se utilizan en numerosos aparatos y sistemas. Su finalidad siempre es la misma: gestionar el paso de un fluido, permitiendo su avance en ciertos momentos y bloqueándolo en otros.
Una cafetera, un surtidor de combustible y un lavadero automático de automóviles pueden contar con una electroválvula. También una lavadora, un sistema de riego y una fuente de aguas danzantes, por ejemplo.
Automatización de un sistema de riego
Veamos en profundidad el caso del sistema de riego. La electroválvula es el dispositivo que se encarga de abrir y de cerrar el paso del agua, con lo cual actúa justamente como una llave de paso.
La particularidad de la electroválvula es que obedece a una programación, lo que permite automatizar el riego. Dicho de otro modo: no se necesita que una persona abra y cierre manualmente el paso ya que esas acciones dependen de las señales eléctricas enviadas por el programador.
Como en el resto de las electroválvulas, el solenoide posibilita la transformación de la señal eléctrica en el movimiento físico que abre o cierra la válvula. Si se necesita operar de manera manual la electroválvula, se debe desenroscar el solenoide.