Definición de disglosia
Se llama disglosia al trastorno del aparato articulador que dificulta la pronunciación adecuada de los fonemas. Quien padece una disglosia, por lo tanto, tiene inconvenientes para hablar correctamente.
El aparato articulador se compone del paladar, los dientes, la lengua, los labios y la glotis. La disglosia implica una alteración fisiológica o anatómica que lleva al paciente a no poder pronunciar bien los fonemas: es decir, las unidades fonológicas.
Es importante tener en cuenta que la disglosia no se vincula a un problema neurológico. Por eso no tiene que ver con el funcionamiento cerebral.
Entre los motivos más habituales de disglosia aparecen malformaciones genéticas como la fisura palatina y el labio leporino. Estas anomalías afectan el habla y la alimentación y favorecen el desarrollo de infecciones en la zona del oído. Su tratamiento suele llevarse a cabo mediante intervenciones quirúrgicas a temprana edad.
Un traumatismo y la parálisis facial periférica también pueden provocar una disglosia. De acuerdo a la causa específica, un especialista debe indicar la forma apropiada de tratar la problemática.
Existen ejercicios logopédicos que contribuyen a mejorar la pronunciación de los fonemas. Estas prácticas ayudan a la regulación de la psicomotricidad a través de técnicas respiratorias y de la coordinación del movimiento de los dientes, la lengua y los labios.
No se debe confundir la disglosia con la diglosia. Este segundo término (diglosia, sin la S antes de la G) refiere a la forma de la lengua bífida o al bilingüismo cuando uno de los idiomas es más prestigioso o relevante socialmente que el otro.