Definición de conferir
El verbo conferir procede del vocablo latino conferre y alude a otorgar, adjudicar o atribuir un derecho, un cargo o una facultad a un individuo. Conferir también puede consistir en designar una cualidad que no sea física a algo o alguien.
Por ejemplo: “El jurado decidió conferir el galardón a un joven escritor cordobés de 20 años de edad”, “Creo que el cambio de táctica va a conferir mayor fortaleza al equipo”, “El gobierno debería conferir prioridad a los niños y a los jubilados a la hora de distribuir la ayuda social”.
Supongamos que los directivos de una asociación cultural deciden comenzar a entregar un premio anual a un pintor o escultor que se destaque por sus contribuciones al mundo del arte. Para esto convocan a tres personalidades reconocidas para formar el jurado. Estos integrantes del jurado, luego de debatir y analizar diferentes posibilidades, deciden conferir el premio a un determinado artista: es decir, le otorgan el reconocimiento en cuestión por sus méritos.
Las autoridades municipales de una localidad, por su parte, pueden implementar un sistema de licencias para autorizar a los artesanos locales a ofrecer sus creaciones en la vía pública. En este marco, se encargan de conferir dichos permisos de acuerdo al cumplimiento de distintos requisitos: quienes desean acceder a las licencias deben ser residentes del municipio y no tienen que contar con trabajo estable, por citar dos de las exigencias.
Los socios de un club, por último, pueden conferir al presidente de la institución la potestad de incrementar la cuota con el objetivo de recaudar fondos adicionales que se destinarán a la construcción de un nuevo polideportivo.
Si nos situamos por un momento en la Corona Española, por ejemplo, existe una serie de funciones denominadas «relacionales», donde se engloban los actos regios con el Gobierno y las Cortes Generales. Dentro de este grupo de funciones se encuentran las que tiene por objetivo mejorar o completar los actos que emanan los demás órganos, ya sea que vengan de las Cortes Generales o del Gobierno.
Las Cortes Generales pueden sancionar y promulgar las leyes, convocar elecciones y las Cortes mismas, así como disolverlas; el Gobierno, por su parte, tiene el poder de proponer al candidato a Presidente, nombrar y organizar los puestos del Gobierno, conferir empleos militares y civiles, además de distinciones y honores, y expedir los decretos que el Consejo de Ministros aprueba previamente.
Con respecto al poder de conferir los empleos militares y civiles, es necesario que este nombramiento se haga siguiendo las leyes al pie de la letra. En otras palabras, es una función de configuración legal; según ciertos autores, el Rey posee un margen de iniciativa en esta atribución, aunque previamente deba ser consultada por el Gobierno y, una vez concretada, el acto debe ser refrendado.
En definitiva, el verbo conferir hace referencia a brindar a un tercero un poder que, en principio, podría ser quien lo otorga pero, por determinadas razones, «prefiere» que el otro se encargue de administrarlo. Esto acarrea una serie de riesgos, ya que al conferir un poder o potestad también se siembran ciertas expectativas que de no ser cumplidas pueden tener consecuencias de diversos grados, según el caso.
Como se expresa en los ejemplos anteriores, el gobierno y las autoridades son las figuras a las que el país confiere una serie de poderes para que garantice el bienestar y el desarrollo de su gente, aunque es sabido que no siempre cumplen con estos objetivos. Son muchas las historias de corrupción y abuso de autoridad por parte de quienes deberían dar el ejemplo al pueblo, y en ellas se aprecian los mayores riesgos de esta concesión de poder.