Definición de atlas
Atlas es el nombre, en la mitología griega, del gigante que sostiene la Tierra y el firmamento sobre sus hombros. Hijo de Jápeto y Clímene, Atlas es un titán que fue condenado a cargar con el planeta por Zeus.
El término tiene diversos usos en la actualidad. Por extensión al concepto mitológico, atlas es el nombre de la primera vértebra de las cervicales, que está en contacto directo con el hueso occipital y que sostiene inmediatamente la cabeza.
Otra utilización muy frecuente de atlas es en referencia a la colección de mapas (geográficos, históricos o de otro tipo) que se hallan recopilados en un mismo volumen. Los atlas, de acuerdo a sus contenidos, pueden ser nacionales, regionales o universales. Por ejemplo: “Cuando era chico, me fascinaba mirar los mapas del atlas que tenía mi abuelo en su biblioteca”, “Voy a ir a la biblioteca a buscar un atlas: tengo que consultar un mapa del Imperio Romano”, “Miguel está tratando de encontrar el pueblo donde iremos de vacaciones en el atlas”.
La noción de atlas es habitual en la astronomía. Con ese nombre se denomina a una familia de cohetes estadounidenses, a una luna del planeta Saturno y a un observatorio espacial de la NASA que se encuentra en fase de estudio.
El club Atlas de Gualadajara es un equipo de fútbol mexicano que compite en el torneo de Primera División. Se consagró campeón en 1950-1951 y ganó varias ediciones de la Copa México.
Charles Atlas (1892–1972), por último, fue un culturista que inventó un popular método de musculación que lleva su nombre.
De la imprenta a Google Maps
Hasta principios de los años 90, la palabra atlas se asociaba a los libros impresos, a un perfecto acompañante de una enciclopedia, a un tomo de gran tamaño que deslumbraba a sus lectores con sus impresionantes mapas a todo color llenos de información interesante y poco usual de todos los puntos del planeta. Para quienes no tenían uno en su casa, estaban las bibliotecas; los afortunados, en cambio, seguramente reservaban un lugar especial en su estantería para esta fuente de conocimiento mundial.
Con la llegada de la Enciclopedia Encarta, de Microsoft, poco a poco el uso de los libros de consulta en formato físico fue disminuyendo, y su Atlas Mundial dejó boquiabiertos a millones de usuarios ante la posibilidad de manipular con libertad un globo terráqueo digital, para buscar de forma intuitiva el punto del mapa que quisieran explorar y, una vez hallado, acercarse a él, viendo con el asombro típico de la era pre-smartphone cómo un mapa planisferio se transformaba gradualmente en uno local.
Así como la inmensa popularidad de la Wikipedia ayudó a que el público fuera perdiendo interés en Encarta hasta que Microsoft la discontinuara, el omnipresente Google Maps se convirtió en una especie de atlas que un gran porcentaje de la población mundial consulta a diario como parte de sus tareas virtuales. Sin embargo, recién en marzo de 2014 Google convirtió este poderoso servicio en un atlas de manera oficial.
El atlas de Google Maps permite a sus usuarios aplicar capas en los mapas para estudiar estadísticas de población, los cambios que han sufrido las temperaturas de todo el mundo en un período determinado, planos históricos de diversas ciudades y las consecuencias de la deforestación. Todo esto, acompañado de descripciones y la posibilidad de adquirir copias en formato físico de los diversos mapas. Entre las empresas que colaboran con este proyecto se encuentra nada menos que la National Geographic.
Incluso para muchos defensores de la literatura tradicional, impresa en papel y protegida por fuertes y tangibles cubiertas, resulta fascinante observar una captura animada de la Tierra durante la noche, con las luces parpadeantes de sus ciudades, o un plano de Tokio en el siglo XVII para compararlo con el actual.