Biografías de personajes históricos

Francisco Javier Clavijero: biografía, estilo, obras, frases


Francisco Javier Clavijero (1731-1787) fue un historiador y sacerdote novohispano, nacido en territorio mexicano, que perteneció a la Orden de los Jesuitas. La importancia de su obra radicó en el lugar que le dio a la historia de su país en cuanto a la conquista y al proceso de evolución de los indígenas.

La obra de Clavijero tuvo rasgos de su personalidad, es decir, su pluma fue innovadora y moderna para la época en que la desarrolló. También usó un lenguaje claro y osado; tal vez, sus escritos se vieron influenciados en estilo por las lecturas de Descartes, Benito Feijoo y Gottfried Leibniz.

Algunos de los títulos más destacados de Clavijero fueron: La historia antigua de México, De la colonia de los tlaxcaltecasy La historia de la antigua o Baja California. El sacerdote se convirtió en una referencia para el estudio de la historia prehispánica de México.

Índice del artículo

Biografía

Nacimiento y familia

Francisco nació el 9 de septiembre de 1731 en la antigua Nueva España, hoy México, específicamente en Veracruz, en el seno de una familia que prestó servicios a la monarquía española. Sus padres fueron los españoles Blas Clavijero y María Isabel Echegaray; tuvo diez hermanos, siendo él el tercero.

Infancia de Clavijero

La infancia de Clavijero se caracterizó por constantes mudanzas, debido al trabajo que desempeñó su padre, estrechamente ligado a la corona española. Vivió en ciudades como Puebla y Oaxaca; desde pequeño estuvo involucrado con la vida de los indígenas, su cultura, lenguas y tradiciones.

Formación educativa

Francisco Clavijero estudió en los colegios San Jerónimo y San Ignacio de los jesuitas, en Puebla, donde aprendió latín, literatura, filosofía y teología. Luego, en 1748 y a los diecisiete años de edad, ingresó a la Orden de la Compañía de Jesús en Tepotzotlán para ser sacerdote.

Después de tres años en Tepotzotlán, en 1751, volvió al San Ildefonso para cursar estudios en filosofía escolástica o de revelación cristiana. Sin embargo, no se sintió agradado del todo con esa enseñanza, así que decidió aprender sobre filosofía, y después profundizó sobre teología en la capital mexicana.

Clavijero sacerdote

Clavijero fue ordenado sacerdote en 1754. Por aquella época ya se había desempeñado como docente, y estuvo a cargo del Colegio San Ildefonso. Desde siempre manifestó interés por los indígenas, y por eso solicitó ser parte de las misiones que se hacían en California; no obstante, no fue enviado.

En 1758, cuando comenzó a laborar en el Colegio San Gregorio, en Ciudad de México, fue uno de los encargados de la formación que allí se les dio a los indios. Al mismo tiempo, ahondó en la historia mexicana, en especial en los trabajos de investigación realizados por el escritor novohispano Carlos Sigüenza.

Dedicación a la educación

Francisco Clavijo estuvo durante cinco años, entre 1762 y 1767, dedicado a la enseñanza. Primero estuvo en el San Gregorio, luego fue destinado a Puebla, al colegio San Francisco Javier para enseñar a los nativos; y en 1763 fue enviado a Morelia para el mismo fin.

Expulsión de los jesuitas

Clavijero se encontraba en una institución de enseñanza de Guadalajara cuando el monarca Carlos III ordenó, en febrero de 1767, la expulsión de los jesuitas de todos sus territorios; esto fue por razones de peso, según él. A partir del 25 de junio de ese año comenzó la etapa de exilio para el sacerdote.

Comienzo del exilio

Francisco Clavijero y sus compañeros estuvieron un tiempo en Veracruz, antes de partir el 25 de octubre de 1767 a La Habana. El proceso de exilio fue largo y difícil. En el trayecto el sacerdote se enfermó, logró recuperarse, finalmente llegó a Italia, y en 1770 se residenció en la ciudad de Bolonia.

Su interés por lo prehispánico

A partir del proceso de conquista por parte de los españoles a América, se dieron muchos debates sobre la cultura de los indígenas. Debido a ello Clavijero se interesó y preocupó en mantener y darle valor a cada una de las tradiciones y costumbres de los pueblos nativos en México.

Instalado en Italia, se dio a la tarea de hacer ver que las creencias de los indígenas, en cuanto a sus dioses, eran parte de su idiosincrasia. Por tal motivo consideró necesario que las autoridades correspondientes se dedicaran a enaltecer el significado de la cultura de los nativos americanos.

Su obra máxima escrita en el exilio

Después de asentarse en Bolonia, el sacerdote jesuita comenzó a desarrollar, entre 1770 y 1780, su obra más importante: Historia antigua de México. Clavijero expuso la historia de los pueblos indígenas, y además debatió las ideas que existieron sobre ellos, a través de sus amplios conocimientos.

Razón de su obra

En el tiempo en que Clavijero se exilió en Italia, percibió que los europeos tenían una concepción errada de lo que era el suelo americano. Así que la razón de su obra fue sacar de la ignorancia a los habitantes del viejo continente, y también difundir la verdad sobre los pueblos indígenas.

Clavijero como fuente de inspiración

La labor de Francisco Javier Clavijero desde Italia de difundir y revalorizar la historia antigua de México, fue inspiración para unos cuantos novohispanos. Entre ellos estaban José Antonio Alzate, Antonio de León y Gama, Mariano Veytia, Lorenzo Boturini y Juan José de Eguiara.

Cada uno de ellos se esmeró en dejar una clara historia del México prehispánico y de la vida durante la colonización española. Para lograrlo se afianzaron en sus cualidades, aportando desde sus oficios como escritores, astrónomos, filósofos, historiadores y cronistas; su unión brindó una riqueza documental sin igual.

Últimos años y fallecimiento

Los últimos años de vida de Francisco Javier Clavijero los pasó fuera de su tierra natal, ya que no pudo volver. Se dedicó a escribir y a estar al servicio de los más necesitados. Falleció en Bolonia, el 2 de abril de 1787, por causa de una infección que padeció por mucho tiempo.

Proceso de repatriación de su cuerpo

La noticia del fallecimiento del sacerdote llegó a México setenta y cinco años después, en 1862. A partir de ese entonces comenzaron los trámites pertinentes para traer su cuerpo a tierra azteca. No obstante, primero se dedicaron grandes esfuerzos para su ubicación.

Después de años de estudios e investigaciones antropológicas, se dio con sus restos. El 13 de julio de 1970 la administración de Gustavo Díaz Ordaz anunció la repatriación, que se materializó el 5 de agosto de ese año. Después de ser homenajeado, su osamenta la depositaron en la Rotonda de las Personas Ilustres.

Vigencia de Francisco Clavijero

La vigencia de Francisco Clavijero sigue firme, debido a que sus escritos continúan siendo referencia para estudiosos de la historia de México y América. Además, el colectivo lo lleva presente en cada una de las instituciones y lugares que llevan su nombre, tales como calles, avenidas, plazas y escuelas.

Por otro lado, se ha instituido el Premio Francisco Javier Clavijero para enaltecer los estudios sobre historia y etnohistoria en México. La iniciativa fue auspiciada el Instituto Nacional de Antropología e Historia, conjuntamente con el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.

Estilo

El estilo literario del sacerdote jesuita novohispano se caracterizó por el conocimiento y el contacto directo que tuvo con las distintas poblaciones indígenas de su época. Además reflejó la modernidad de su personalidad en sus textos, lo que le permitió un mayor alcance de sus ideas.

Su lenguaje fue preciso, audaz y osado. A través de sus palabras pudo innovar lo que en aquel entonces se sabía de la filosofía escolástica. Los temas que le preocuparon estuvieron siempre relacionados con su patria, los indígenas y sus diferentes manifestaciones culturales; su objetivo fue difundirla y preservarla.

Obras

– La historia de la antigua o Baja California.

– Ensayo de la historia de la Nueva España.

– Historia eclesiástica de México.

– Diálogo entre Filaletes yPaeófilo.

– De las colonias de los tlaxcaltecas.

– Breve descripción de la provincia de México en  el año 1767.

– Physica particularis. Ensayo.

– Cursus philosophicus.

– Frutos en que comercia o puede comerciar la Nueva España. Ensayo.

– Proyectos útiles para adelantar el comercio de la Nueva España.

– Historia sobre la aparición de la Virgen de Guadalupe. El título en italiano fue: Ragguaglio della prodigiosa y rinomata immagine della Madonna de Guadalupe del Messico.

– Gramática y diccionario en lengua náhuatl.

– Historia antigua de México (1770-1780).

-Breve descripción de algunas de sus obras

Historia antigua de México (1770-1780)

Fue la obra más sobresaliente e importante de Francisco Clavijero, la cual desarrolló en el exilio con un alto grado de sentimentalismo por la lejanía de su patria. Con esta obra el sacerdote pretendió darle el valor que merecía a la historia mexicana antes de la conquista, tras la existencia de gran cantidad de opiniones ajenas e ignorantes.

El libro desarrollado por Clavijero fue un homenaje a América, en especial a su natal México, además de ser fuente de entretenimiento durante el paso lento del tiempo. En él, el autor se encargó de exponer la historia prehispánica del país azteca, hasta mediados del siglo XVI.

Estructura

Historia antigua de México fue estructurada en diez libros, conjuntamente con nueve disertaciones o discursos. En el caso del primero, estuvo relacionado con la formación natural de los pueblos indígenas, mientras que los otros fueron la descripción detallada del acontecer prehispánico.

Contenido

A través de esta obra, Francisco Clavijero le dio un aire nuevo al proceso histórico de México y América. Además contradijo las opiniones de quienes jamás habían pisado el territorio de Nueva España y que, aun así, pretendieron emitir juicios sobre la forma de vida que allí existía.

Por otro lado, el sacerdote se esmeró para dar a conocer un panorama amplio del pasado mexicano. Los toltecas, los mexicas o aztecas, el nacimiento del reinado de México, el arribo de los españoles y la ocupación de Tenochitlan, en 1521, formaron parte de las páginas del libro.

Las Disertaciones de Clavijero

En el apartado de las disertaciones o discursos, el sacerdote novohispano defendió y preservó con absoluta lealtad su amor y respeto por los pueblos indígenas. También en esta sección fue donde manifestó su molestia frente a los ataques sin argumento de los europeos hacia el pueblo americano.

Ante su inconformidad y desacuerdo por las opiniones de los intelectuales del viejo mundo, Francisco Clavijero se convirtió en la voz principal de los indígenas. Su intención y finalidad fue acallar rumores y falsas afirmaciones, y hacer que América fuera vista con igualdad, y como una tierra con identidad.

Ediciones

Historia antigua de México fue publicada en su primera edición en italiano, y abarcó cuatro ejemplares. Fue tanta su importancia y el buen recibimiento, que prontamente se editó en inglés y alemán, y además se mantuvo en un sitial de honor por más de quinientos años.

En 1826 la obra de Clavijero fue llevada al castellano, en dos tomos; al territorio mexicano llegó después de la gesta de independencia. Con este libro, el jesuita se convirtió en el máximo exponente y defensor de América, ya que su experiencia, documentación e investigación le otorgaron suficientes conocimientos.

En castellano

Cuando en 1826 salió la obra del sacerdote en castellano, esta se trató de una traducción del texto original, hecha en Londres por el escritor y periodista español José Joaquín de Mora. Luego, entre 1868 y 1917, logró difundirse por casi toda América.

Un siglo después se realizó la publicación en castellano directamente del texto escrito por el propio Clavijero. La tarea estuvo a cargo de Mariano Cuevas, jesuita mexicano. La obra fue presentada en cuatro volúmenes en las dos primeras apariciones, y luego se redujo a uno solo.

Fragmento

“Son los mexicanos de estatura regular, de la cual se desvían más frecuentemente por exceso que por defecto; de buenas carnes y de una justa proporción en todos sus miembros, de frente angosta, de ojos negros y de una dentadura igual, firme, blanca y tersa…

Sus sentidos son muy vivos, especialmente el de la vista, la cual conservan entera aún en su decrepitud…

No se ven regularmente en los mexicanos aquellos transportes de ira, ni aquellos frenesíes del amor que son tan frecuentes en otras naciones… son muy sufridos en las injurias y trabajos, y muy agradecidos a cualquier beneficio…”.

Fragmento de las Disertaciones de Francisco Javier Clavijero

“Es verdad que los mexicanos no tenía voces para explicar los conceptos de la materia, sustancia, accidente y semejantes; pero es igualmente cierto que ninguna lengua, de Asia o de Europa tenía tales voces antes que los griegos comenzasen a adelgazar, abstraer sus ideas y crear nuevos términos para explicarlas.

El gran Cicerón, que sabía tan bien la lengua latina y floreció en los tiempos en que estaba en su mayor perfección… lucha muchas veces en sus obras filosóficas para encontrar voces correspondientes a las ideas metafísicas de los griegos…”.

La historia de la antigua o Baja California

Fue otra de las obras relevantes de Francisco Clavijero. Esta fue publicada en Italia, en 1789, por su hermano, el también sacerdote jesuita Ignacio Clavijero. La obra se trató sobre la labor misionera que los padres de la Orden de la Compañía de Jesús realizaron en el territorio de Baja California.

El desarrollo de la obra estuvo sustentado con los relatos y los testimonios de los jesuitas, entre ellos: Juan María Salvatierra, Miguel Venegas, Eusebio Kino y Juan de Ugarte. Fue dividida en cuatro tomos; en México vio la luz a mediados del siglo XIX, específicamente en 1852.

Fragmento

“En cuanto a la religión, artículo esencial en la historia, poco es lo que podemos decir, porque casi no la había entre los californios. No tenían templos, altares, simulacros, sacerdotes ni sacrificios, y, por tanto, no se halló entre ellos ningún vestigio de idolatría, o de culto externo a la divinidad.

Tenían, sin embargo, alguna idea de un Ser Supremo, creador del mundo, pero tan oscurecida y confusa como en otros pueblos bárbaros, y desfigurada con mil despropósitos, necesidades y puerilidades…”.

Frases

– “Sus almas son en lo radical como las de los demás hombres, y están dotados de las mismas facultades. Jamás han hecho menor honor a su razón los europeos, que cuando dudaron de la racionalidad de los americanos… sus entendimientos son capaces de todas las ciencias, como lo ha demostrado la experiencia”.

– “De nada sirven las leyes cuando se cela su observación y no se castiga a los delincuentes”.

– “La filosofía es noble y erudito reposo, consuelo en las tribulaciones, útil y suave solaz en las vicisitudes de la vida”.

– “El deseo de felicidad que estimula a los hombres a cometer las más arduas empresas, frecuentemente los arroja a los más hondos precipicios”.

– “Fácilmente disipan su riqueza quienes la han adquirido sin fatiga”.

– “Vive del producto de tu trabajo, porque así te será más agradable el sustento”.

– “Nunca faltan a los poderosos hombres perversos y banales que sean ministros de sus pasiones”.

– “No hay trono más vacilante que el que se sostiene más bien en la fuerza de las armas que en el amor al pueblo”.

– “Quiero quejarme amistosamente de la indolencia o descuido de nuestros mayores con respecto a la historia de nuestra patria”.

– “… Por la pérdida de los escritos la historia de México se ha hecho dificilísima, por no decir imposible. Ya que está pérdida, no se puede reparar, al menos que no se pierda lo que nos queda”.

Referencias

  1. Francisco Xavier Clavijero de Echegaray. (S. f). Cuba: Ecu Red. Recuperado de: ecured.cu.
  2. Tamaro, E. (2004-2019). Francisco Javier Clavijero. (N/a): Biografías y Vidas. Recuperado de: biografiasyvidas.com.
  3. Francisco Javier Clavijero. (2019). España: Wikipedia. Recuperado de: es.wikipedia.org.
  4. Macías, O. (S. f.) Frases célebres de: Francisco Javier Clavijero. (N/a): Omar Macías. Recuperado de: omarmacias.com.
  5. Reyes, A. (2017). Francisco Xavier Clavijero. México: Enciclopedia de la Literatura en México. Recuperado de: elem.mx.