Calentamiento global: explicación, causas, consecuencias, prevención
¿Qué es el calentamiento global?
El calentamiento global es el fenómeno mediante el cual se produce un aumento progresivo de la temperatura promedio del planeta. Así, cada año, al considerar las temperaturas máximas alcanzadas en cada mes, se constata que el promedio anual es mayor que el del año anterior.
Esto se debe a que la Tierra cada vez libera al espacio menos calor del que produce, o sea el calor se queda encerrado en nuestra atmósfera. El calentamiento global ocurre por dos causas fundamentales: el deterioro de la capa de ozono y el aumento de gases que bloquean la salida del calor.
La capa de ozono es una franja de gas ozono y su función es reducir la radiación solar ultravioleta que ingresa a la Tierra. Si esta capa se deteriora, ingresa más radiación ultravioleta de alta energía, que calienta más la Tierra.
Al mismo tiempo, las actividades humanas liberan a la atmósfera gases como el CO₂ y el metano (CH4), que retienen el calor. Así como también óxido nitroso (N2O) y los hidrofluorocarbonos (HFC), que destruyen la capa de ozono.
Todo esto ocasiona el aumento de las temperaturas, cambios del clima, derretimiento de los glaciares y la alteración del equilibrio ecológico, causando la extinción de especies. Para detener este proceso, es necesario crear conciencia sobre su ocurrencia y consecuencias.
Causas del calentamiento global
El calentamiento global se produce por una alteración de un fenómeno natural y beneficioso para la vida, llamado efecto invernadero. Este fenómeno a su vez se descontrola, debido al deterioro de la capa de ozono y al incremento de gases que retienen calor, llamados gases de efecto invernadero.
Capa de ozono (ozonosfera)
La atmósfera de la Tierra es el conjunto de gases que envuelven al planeta, los cuales forman una serie de capas, cada una con distintas características. La más cercana al suelo es la troposfera y sobre esta se encuentra la estratosfera, seguida de la mesosfera.
Entre la estratosfera y la mesosfera, aproximadamente a 50 km de altitud, se encuentra la zona de transición llamada estratopausa. En esta zona es donde se localiza una capa de gas formada de un tipo especial de molécula de oxígeno llamada ozono.
El ozono tiene la propiedad de dejar pasar la luz visible del Sol y reflejar la mayor parte de la radiación ultravioleta, lo cual es importante porque la radiación ultravioleta es de alta energía y si entra toda calentaría demasiado al planeta. Además, afecta negativamente a los seres vivos, ya que deteriora los tejidos.
Si se daña la capa de ozono y se hace más delgada, entonces entra más radiación ultravioleta, que al llegar al suelo lo calienta en exceso. Ese calor se desprende en forma de radiación infrarroja, una parte de la cual debería salir hacia el espacio exterior y evitar el calentamiento atmosférico excesivo. Otra parte del calor se necesita para que el planeta no se congele y pueda haber vida en la Tierra.
Efecto invernadero
Este es el proceso que permite regular el calor de la Tierra, garantizando que la temperatura se mantenga en un rango adecuado para que pueda existir la vida. La radiación ultravioleta que deja pasar la capa de ozono calienta el suelo y de allí se desprende el calor como radiación infrarroja.
Parte de este calor se libera al espacio exterior, pero los gases que hay en la atmósfera retienen otra parte y la reflejan de nuevo hacia la Tierra. Estos gases son el vapor de agua, el CO₂ y el metano fundamentalmente, y se llaman gases de efecto invernadero.
Esto es porque causan el mismo efecto que la cubierta de un invernadero para cultivar plantas, reteniendo parte del calor. Si no existieran estos gases, la temperatura en la Tierra sería de -15 °C, es decir, sería un planeta de hielo.
Como puedes ver, hay un delicado equilibrio entre la energía que deja pasar la capa de ozono y el calor que retienen los gases de efecto invernadero, logrando una temperatura media planetaria de 15 °C donde puede prosperar la vida.
Emisión de gases de efecto invernadero
El problema se presenta cuando el ser humano altera el equilibrio natural al liberar a la atmósfera grandes cantidades adicionales de gases de efecto invernadero, tales como el CO₂ y el metano que absorben y emiten calor. Así como otros gases que destruyen la capa de ozono, como el óxido nitroso (N2O) y los hidrofluorocarbonos (HFC).
Estos gases se producen por la emisión de los escapes del tránsito automotor y las centrales termoeléctricas que queman combustibles como carbón o petróleo. Al igual que a partir de las emisiones de las industrias, los incendios forestales, la fermentación y quemas en los vertederos de residuos, la agricultura y la ganadería.
El Protocolo de Kioto, un acuerdo internacional para reducir los gases de efecto invernadero, ha definido una lista de 6 gases principales. Estos son:
- Dióxido de carbono (CO₂).
- Metano (CH4).
- Óxido nitroso (N2O).
- Hidrofluorocarbonos (HFC).
- Hidrocarburo perfluorado (PFC).
- Hexafluoruro de azufre (SF6).
Entonces, el calentamiento global se produce porque estos gases, por un lado, dañan la capa de ozono dejando entrar más energía. Mientras que al mismo tiempo, evitan que escape gran parte del calor que debería salir al espacio exterior. De esta forma intensifican el efecto invernadero, haciendo que la temperatura aumente cada vez más.
Consecuencias del calentamiento global
El efecto fundamental del calentamiento global es el aumento de la temperatura media del planeta, a partir de allí se desarrollan diversas consecuencias.
Cambio climático
Al aumentar las temperaturas se altera todo el clima terrestre, ya que las temperaturas determinan otros procesos como los vientos, las corrientes marinas, la evaporación y condensación del agua, y las lluvias.
Efectos del cambio climático son que hay más lluvias de lo normal en algunos sitios y más sequías en otros. Al igual que fuertes tormentas, ciclones, tornados y otros fenómenos naturales que aumentan tanto de frecuencia como de intensidad.
Derretimiento de los glaciares
Al calentarse más la Tierra, los hielos se derriten, tanto en los glaciares de las altas montañas, como el hielo de los polos terrestres. Especialmente problemático es el derretimiento del hielo sobre el Ártico y la Antártida, ya que provoca el aumento del nivel del mar y puede traer como consecuencia la inundación de ciudades costeras.
Desequilibrios ecológicos
Los ecosistemas requieren unas condiciones climáticas relativamente estables para mantenerse y que puedan sobrevivir las especies que en ellos habitan. Si aumentan las temperaturas y cambia el clima, los ecosistemas se alteran y muchas especies se extinguen (desaparecen para siempre).
Disminución de la producción de alimentos
Al igual que ocurre con los ecosistemas, los cultivos y la producción animal requieren ciertas condiciones de clima, determinadas temperaturas y cantidad de lluvias. Si esto se altera por el calentamiento global, los cultivos no prosperan y los animales mueren, por tanto habrá menos alimentos.
Aumento de enfermedades
Al alterarse el ambiente toda la ecología se altera, incluidas las condiciones que permiten el desarrollo de organismos que causan enfermedades. De tal forma que está ocurriendo la aparición de enfermedades propias del trópico en zonas templadas, al aumentar la temperatura.
Prevención del calentamiento global
El calentamiento global es actualmente el peor desastre ambiental al que se enfrenta la humanidad. De tal forma que es fundamental detener su desarrollo para garantizar nuestra supervivencia y para ello se deben tomar las previsiones necesarias.
Concienciación
Lo primero es que toda la ciudadanía sea consciente de en qué consiste el calentamiento global, qué lo causa, sus consecuencias, su importancia y cómo evitarlo. De esta forma se hará la presión social necesaria para que los gobiernos del mundo y las empresas privadas tomen en serio el problema y asuman las medidas pertinentes.
Dejar de expulsar a la atmósfera gases de efecto invernadero
Lo urgente es reducir la emisión a la atmósfera de los gases que dañan la capa de ozono y que bloquean la salida del calor. Es decir, reducir o eliminar la emisión de gases de efecto invernadero.
Esto implica buscar alternativas de transporte, como los autos eléctricos o a base de hidrógeno. Evitar los incendios forestales, reducir los gases industriales y usar fuentes de energías limpias.
Entre las energías limpias están la energía solar, la hidráulica (agua), la eólica (viento) y la geotérmica (calor interno de la Tierra), entre otras.
Mantener e incrementar la capa vegetal
Las plantas, sobre todo los árboles, es decir las selvas y bosques retienen el CO₂ en los tejidos vegetales. Así que mientras más selvas y bosques existan, menos CO₂ se liberará a la atmósfera y menos calentamiento global habrá.
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