Botánica

Encinos o robles (género Quercus): características, usos, especies


Los encinos o robles (género Quercus) son arbustos y árboles maderables que pueden alcanzar los 45 m de altura y pertenecen a la familia Fagaceae. Este género comprende más de 300 especies de plantas distribuidas en las regiones montañosas templadas del hemisferio norte entre los paralelos 15º-30º N.

Se caracterizan por sus troncos erectos de corteza agrietada y fisurada de colores oscuros y denso follaje de color verde o pardo-rojizo. Constituye uno de los géneros más empleados por el hombre como fuente de taninos, carbón y madera de alta calidad, durabilidad y resistencia.

La mayoría de las especies del género Quercus han sido sometidas en sus diversos ambientes naturales a la deforestación intensa. Bien sea por su alto valor comercial como especies maderables o simplemente por la expansión de las fronteras agrícolas y explotaciones ganaderas.

Además, los encinos y el roble común han sufrido ingentes bajas ocasionadas por los incendios forestales y las explotaciones mineras. Al respecto, muchas de las repoblaciones se realizan con especies de rápido crecimiento como pinos o eucaliptos, perdiendo así sus espacios naturales.

Índice del artículo

Características generales

Morfología

Las especies pertenecientes al género Quercus frecuentemente son arbustos o árboles de gran porte con troncos rectos y frondosos. De hojas simples, alternas y estipuladas, de hábitos caducifolios, perennifolios o marcescentes, y de márgenes enteros o aserrados.

Las flores masculinas se presentan en inflorescencias racimosas colgantes, cada flor contiene de 4-10 estambres y largos filamentos. Las flores femeninas en espigas o cabezuelas poseen tres estigmas y óvulos anátropos rodeados por una estructura compacta que será la capsula al madurar.

Su fruto es una nuez o bellota de posición axial, individual o en grupos de dos o tres unidades. Se encuentra rodeada por una cápsula coriácea, con una semilla grande carente de endospermo y cotiledones abultados y suculentos.

Taxonomía

– Reino: Plantae

– División: Magnoliophyta

– Clase Magnoliopsida

– Orden: Fagales

– Familia: Fagaceae

– Género: Quercus

Hábitat y distribución

Los bosques de encinos o robles se localizan por toda Europa y Asia, a través del Medio Oriente, nororiente de África y América. De hecho, se encuentran en la mayoría de los bosques templados del hemisferio norte, incluso en algunas regiones tropicales y subtropicales.

Cultivo

La siembra se realiza durante el otoño con semillas recién recolectadas procedentes de bellotas vigorosas y libre de magulladuras, plagas o enfermedades. En primavera se pueden emplear semillas estratificadas en una mezcla porcentual de arena y turba manteniendo la humedad por 30-60 días a una temperatura de 0-2º C.

En el caso de emplear semillas estratificadas, se presenta una pequeña raicilla de 2 – 5 cm que se recomienda podar antes de sembrar. El cultivo se establece en bolsas de polietileno de 500 cc de volumen con un sustrato suelto y rico en materia orgánica.

La germinación se produce entre las 4-6 semanas después de la siembra. Procurando mantener durante el proceso de crecimiento de las plántulas los practicas agronómicas adecuadas: riego, desmalezado, fertilización, control de plagas y enfermedades.

Las plantas estarán listas para ser trasplantadas al sitio definitivo cuando alcancen una altura promedio de 25-40 cm.

Plagas y enfermedades

Las semillas almacenadas regularmente son atacadas por pequeños escarabajos de la familia Curculionidae. Los daños son causados por larvas que penetran las semillas y se desarrollan en su interior. Al madurar emerge el adulto, haciendo evidente la perforación.

Durante el establecimiento en vivero las plántulas son afectadas por el hongo Pestalotia sp., agente causal de la mancha foliar. Los síntomas se manifiestan con el amarillamiento de las hojas, necrosis y muerte de la planta.

En plantas sembradas en el campo se ha detectado la enfermedad denominada muerte descendente del roble- causada por el hongo Ceratocystis fagacearum asociado con el coleóptero Xyloborus sp. La planta experimenta perdida de vigor, defoliación y reducción del follaje ocasionando la muerte descendente que acaba con la muerte del árbol.

Usos

Alimenticio

La bellota de diversas especies es consumida por el hombre o utilizada como alimento para animales silvestres o ganado bovino y caprino. En la península Ibérica los frutos son destinados para la alimentación de los cerdos ibéricos empleados en la elaboración del jamón serrano.

Los frutos de algunas especies de encinos como el Quercus ilex y Quercus alba son empleados artesanalmente para la elaboración de harinas. Este proceso consiste en el asado, cocción, lixiviación y agregado de aditivos como bicarbonato o arcillas para eliminar el sabor astringente de las bellotas.

Industrial

Especies como Quercus tinctoria y Quercus coccifera contienen elementos químicos similares a la cochinilla. Así, esta característica los hace útiles para ser empleados en la industria de las tinturas y colorantes.

Además, la corteza de diversas especies de Quercus contiene gran porcentaje de taninos, sustancia astringente empleada para la industria de la curtiduría. La corteza del Quercus suber – alcornoque mediterráneo – se emplea para la fabricación de los corchos de las botellas de vino y coñac.

Madera

La madera del Quercus es muy apreciada por su firmeza, peso y durabilidad, siendo empleada para la fabricación de barcos, construcciones, mueblería, carpintería y ebanistería en general. Actualmente se emplea para la fabricación de los barriles de madera donde se añejan el vino y el coñac durante su proceso de fermentación.

Medicinal

Las propiedades medicinales del Quercus son el resultado de la cantidad de flavonoides y taninos que tiene, que proveen propiedades antinflamatorias, antisépticas, astringentes y hemostáticas.

El uso artesanal de cocimientos o infusiones de hojas y cortezas se emplea satisfactoriamente para el tratamiento de molestias digestivas. De hecho, es efectivo para aliviar diarreas, hemorragias intestinales, gastritis, incontinencias urinarias, problemas rectales y faringitis.

Además, es recomendado para tratar problemas de las encías, hemorragias nasales, llagas en la boca, afecciones cutáneas y anginas.

Principales especies

Quercus canariensis Willd.

Especie arbórea robusta de hasta 30 m de altura conocida como quejigo andaluz o roble andaluz. En condiciones naturales presenta una copa amplia y densa de perfil trasovado que proyecta una gran sombra redondeada o irregular.

Nativo del suroeste de Europa y el norte de África – Marruecos -, en la península Ibérica se localiza en Andalucía, Algarve, Cataluña, Sierra Morena y Toledo. Crece en zonas de montaña media, barrancos, laderas y riberas de arroyos a niveles altitudinales inferiores a los 1.000 msnm.   ​

Quercus coccifera L.

Especie arbustiva que en condiciones propicias puede alcanzar los 5 – 6 m de altura es una fagácea originaria de la región mediterránea. Es conocida comúnmente como carrasco, carrasca, carrasquilla, carrasquizo, coscoja, chaparra o chaparro.

Es una planta muy resistente a los climas secos y áridos alrededor del mediterráneo, siendo tolerante a las temperaturas extremas y las bajas precipitaciones. La madera es empleada como leña para la obtención de carbón vegetal, y las bellotas son empleadas como alimento para rebaños caprinos y porcinos.

Quercus faginea Lam.

Árbol marcescente de copa amplia y follaje denso que alcanza los 20 m de altura, típico del norte de África y la península Ibérica. Sus hojas se caracterizan por permanecer en el árbol durante otoño hasta la primavera siguiente cuando emergen los primeros brotes florales.

Se conoce como roble carrasqueño, quejigo o roble valenciano, crece en todo tipo de suelos y variaciones estacionales, creciendo hasta niveles altitudinales de 1.900 msnm. Su madera es empleada para la fabricación de herramientas agrícolas o de uso artesanal y en la construcción de recipientes o toneles de almacenamiento.

Quercus ilex L.

Árbol perennifolio nativo de la región del Mediterráneo de talla media – baja, de 20 – 25 m de altura con una copa frondosa y extendida. Este tipo de encina es conocida como carrasca, chaparro o chaparra, presenta la corteza muy agrietada y rugosa de color gris – parduzco en el caso de árboles mayores.

Se distribuye en gran parte de la península Ibérica y las Islas Baleares, formando bosques densos asociados con matorrales y trepadoras. La especie es de gran importancia paisajística formando parte de los bosques de encinas – dehesas – ligados al desarrollo rural. Es fuente de carbón vegetal y se emplea en tenería.

Quercus petraea (Mattuschka) Liebl.

Especie caducifolia de gran porte. Árbol corpulento e imponente, alcanza los 45 m de altura presentando una copa abierta y extensa, y un fuerte sistema radical. Conocido como roble de invierno o roble albar forma parte de los robles blancos de Norteamérica, Europa y Asia.

Crece y se desarrolla a lo largo de las laderas montañosas, sobre suelos secos y profundos, incluso en terrenos rocosos hasta los 1.800 msnm. La madera es muy apreciada por su dureza y calidad, sus bellotas se emplean como suplemento alimenticio y es fuente de taninos para curtir pieles.

Quercus pubescens Willd.

El roble pubescente es una especie caducifolia de hasta 20 m de altura de copa extendida y denso follaje, caracterizada por sus ramas jóvenes muy pilosas. Se distribuye en la parte baja de Europa, desde España hasta la frontera asiática de Turquía, entre los 400 – 1.500 msnm.

Se adapta a climas más cálidos y secos que otras especies de roble, preferiblemente sobre suelos calizos, de baja fertilidad y poco meteorizados. Es una especie usada con fines agroforestales, la madera se emplea como leña para combustión y contiene taninos empleados en tenería.

Quercus pyrenaica Willd.

Especie arbórea caducifolia de 25 m de altura, más rústica y abierta que las otras especies de roble, conocida comúnmente como melojo o rebollo. Durante el verano el follaje presenta una coloración verde claro que se vuelve parda y marcescente durante el invierno.

Se distribuye en el Mediterráneo occidental, por la península Ibérica, sur de Francia, norte de África, incluyendo Marruecos y el macizo del Rif. A media exposición solar, entre los 500-2000 msnm y precipitaciones promedio de 650-1.200 mm anual. La madera es usada en construcción y carpintería, con amplio uso agroforestal.

Quercus robur L.

El roble común, robre fresnal, cajiga o roble carballo es una especie de gran porte, robusto y majestuoso que puede alcanzar los 40 m de altura. Es un árbol de hojas caducifolias, tallo leñoso de amplias grietas longitudinales y copa extendida.

Habita a lo largo de toda Europa y Asia occidental, incluso en condiciones climáticas extremas desde el nivel del mar a los 1.400 msnm. Es utilizada como árbol ornamental y su madera es de excelente calidad, dura, pesada y resistente, ampliamente utilizada en ebanistería y carpintería.

Quercus rubra L.

Especie arbórea caducifolia de grandes hojas que llega alcanzar los 25 m de altura, se caracteriza por su corteza gris y suave. Llamada roble rojo americano, roble rojo del Norte o​ roble boreal rojo americano, es nativo del centro-este de Norteamérica.

En Europa es cultivado como ornamental o con fines forestales; no obstante, en algunas zonas es considerado como especie invasora. Se cultiva comercialmente por la calidad de su madera, y como especie ornamental debido a su porte gallardo y atractivo follaje durante el otoño.

Quercus suber L.

Árbol perennifolio de bajo porte, tallo relativamente corto y copa redondeada que no alcanza los 15 m de altura. Nativo del norte de África y de Europa, se ha extendido ampliamente por el excelente corcho que se obtiene de su corteza.

Se conoce como alcornoque, siendo un árbol muy común en los bosques mediterráneos con altas precipitaciones anuales y periodos secos temporales sobre suelos silíceos. El aprovechamiento del corcho es su principal valor económico. Sin embargo, la leña y el carbón son de excelente calidad y sus bellotas son fuente de alimento animal.

Referencias

  1. Flores-Maya, S., Flores-Moreno, I., Romero-Rangel, S., Rojas-Zenteno, C., & Rubio-Licona, L. E. (2006). Análisis cariológico de ocho especies de encinos (Quercus, Fagaceae) en México. In Anales del Jardín Botánico de Madrid (Vol. 63, No. 2). Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
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  3. Marañón, T. (2011). Ecología, historia y gestión de los árboles del género Quercus: simposio de Isparta, Turquía. Revista Ecosistemas, 20(1).
  4. Montoya Oliver, J. M. (1995). Técnicas de reforestación con encinas, alcornoques y otras especies de quercus mediterráneos. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Madrid (España).
  5. Quercus (2018) Wikipedia, La enciclopedia libre. Recuperado en: es.wikipedia.org
  6. Quercus L. (2013) Árboles Ibéricos: Árboles de la Península Ibérica (España, Portugal y Andorra) e Islas Baleares. Recuperado en: arbolesibericos.es
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  8. Valencia, A. (2004). Diversidad del género Quercus (Fagaceae) en México. Boletín de la sociedad Botánica de México, (75).