Hernán Cortés: biografía, expediciones
Hernán Cortés fue el conquistador español responsable de la conquista del imperio azteca en 1521, logrando anexar el territorio mexicano al imperio español. Durante el proceso de colonización de México, tuvo un papel muy influyente, pero también muy controvertido. Esto se debió principalmente a dos de sus cualidades: inteligencia y ambición.
También conocido como Hernando Cortés, este aventurero fue uno de los conquistadores españoles de América más exitosos. Se le reconoce como un hombre comprometido con la misión de convertir a los nativos americanos al catolicismo. En el siglo XVI, fue considerado un héroe, aunque nunca ocultó su anhelo de saquear las tierras en busca de oro y riquezas.
Los relatos históricos resaltan su participación en el proceso de esclavización de gran parte de la población nativa, dejando un poco de lado todos sus logros. De igual manera, ponen el énfasis en su responsabilidad por la destrucción de muchos de los pueblos indígenas. Estos desaparecieron a causa de enfermedades europeas.
Así pues, se hace muy poca referencia a cómo Hernán Cortés participó de manera activa en la construcción de Ciudad de México, que sigue siendo la capital de la nación mexicana. También jugó un papel importante en la colonización de Cuba y contribuyó en la apertura de una vía para una mayor exploración y conquista de América Central hacia el sur.
Índice del artículo
Biografía
Primeros años
En el año 1485, nació Hernán Cortés en Medellín, cerca de Mérida, Extremadura, Castilla (España). Era hijo de Martín Cortés de Monroy y de Doña Catalina Pizarro Altamirano, ambos pertenecientes a familias de antiguo linaje, pero con poca riqueza. Era un primo lejano de Francisco Pizarro, el explorador que con sus viajes conquistó el imperio inca en el Perú.
Cuando era un niño pequeño, Hernán Cortés estaba frecuentemente enfermo, pero durante sus años de adolescencia su salud mejoró notablemente. Desde joven dio muestras de precoz inteligencia. A la edad de 14 años, fue enviado a estudiar derecho en la Universidad de Salamanca, en el centro-oeste de España.
Sin embargo, su carácter altivo, travieso, pendenciero y muy dado a las mujeres pronto dio al traste con estos planes educativos. Hernán Cortés, frustrado por la aburrida vida provincial y motivado por las historias del Nuevo Mundo que Colón acababa de descubrir, se embarcó hacia el puerto de la costa este de Valencia para servir en las guerras italianas.
Primer viaje al Nuevo Mundo
Cristóbal Colón había desembarcado en San Salvador y había explorado las Indias Occidentales en 1492, cuando Cortés era un niño de 7 años. Su esperanza era encontrar una ruta a Asia o India, buscando incorporar a España al comercio mundial de nuez moscada, clavo de olor, pimienta y canela de Indonesia y de la India.
Por su parte, Hernán Cortés también tenía un espíritu aventurero y deseaba ser parte del movimiento exploratorio de las nuevas tierras. Además, quería pertenecer al movimiento comercial dinámico entre India, China, Medio Oriente, África y Europa. En 1504, a sus 19 años, zarpó hacia la fortuna y aventura en La Española (República Dominicana).
Años en La Española y Cuba
Hernán Cortés pasó siete años en La Española, viviendo en la nueva ciudad de Azua y trabajando como notario y agricultor. Esta actividad agrícola le trajo mucha riqueza y la posesión de esclavos nativos. No obstante, el conquistador quería una vida de acción, y seguía fascinado por los cuentos de oro y riquezas en el Nuevo Mundo.
Finalmente, tuvo su primera experiencia de exploración cuando se unió a una misión para conquistar Cuba bajo el mando de Diego Velázquez en 1511. Luego de la conquista de estos nuevos territorios, se desempeñó como secretario del tesorero y más tarde como alcalde de Santiago.
Estando Cortés en Cuba, Velázquez fue nombrado gobernador. Este hecho trajo muchos beneficios para él. Uno de ellos fue el otorgamiento de un repartimiento (regalo de tierra y esclavos indios) y una casa de lujo en la recién erigida capital de Cuba.
Hernán Cortés fue electo dos veces alcalde de Santiago. Durante todo ese tiempo se creó una fama a su alrededor de que era un gran y correcto caballero. Por lo tanto, fue la elección natural del gobernador de Cuba cuando le encomendó la expedición de ayuda en la conquista de las costas mexicanas en el Nuevo Mundo.
Su gran aventura
La gran aventura de Hernán Cortés comenzó luego de zarpar desde Cuba con rumbo hacia las costas mexicanas. Este viaje fue considerado una de las grandes expediciones militares de la historia. La marcha de este conquistador español es comparada con la conquista de Galia por Julio César.
Con tan solo 34 años de edad y casi sin experiencia en la guerra, llevó a unos 600 hombres y una docena de caballos a territorios inexplorados. Las nuevas tierras estaban habitadas por guerreros sedientos de sangre que superaban en número a las fuerzas expedicionarias.
Ante ese reto, Cortés explotó las feroces rivalidades tribales para conquistarlos. Impuso sus deseos con la ayuda de la pólvora, la viruela y la asistencia de muchos aliados, sabiendo combinar bondad y crueldad para lograr sus propósitos. Sus soldados no solo subyugaron, sino que se mezclaron con los indios creando una nueva raza mestiza.
Vida sentimental
Entre las esclavas recibidas como tributo por uno de sus triunfos sobre los indígenas, Cortés recibió a una llamada Malintzin. También era conocida como La Malinche o Doña Marina y hablaba tanto el idioma azteca como el maya. Esto la hizo muy útil para el expedicionario español.
Más tarde, La Malinche aprendió español, y se convirtió en la intérprete personal, guía y amante de Cortés. En realidad, tenía un estatus bastante alto para una mujer nativa durante este tiempo y lugar entre los españoles.
Cortés y La Malinche tuvieron juntos un hijo llamado Martin, a quien a veces se le llamaba “El mestizo”. Fue uno de los primeros hijos de la herencia racial resultante de la mezcla de la raza indígena y la peninsular.
Los historiadores discrepan sobre si Cortés reconocía abiertamente su relación con La Malinche y a su hijo Martín. La duda se presenta porque el conquistador deseaba con mucho ahínco mantener su reputación y posición entre la comunidad española que no miraba con buenos ojos estas relaciones.
Últimos años y muerte
Durante los años siguientes a su conquista de México, Cortés se mantuvo muy activo en la vida política del Nuevo Mundo. Ocupó la posición de gobernador, pero fue expulsado del poder por componendas políticas de grupos antagónicos en el año 1524.
Entonces, se fue a España a reunirse con el rey español para reclamar su título, pero nunca lo recuperó. Regresó a México después de su fracaso con el monarca y participó en varias expediciones en todo el Nuevo Mundo.
Finalmente, se retiró a España en 1540. Murió siete años más tarde un 2 de diciembre en su casa en Castilleja de la Cuesta (Sevilla) aquejado por una pleuritis, una enfermedad pulmonar.
Expediciones de Hernán Cortés
Primera expedición
En 1519, Hernán Cortés salió de Cuba con unos 600 hombres y se dirigió a la región de Yucatán en México. Llegó por primera vez a la isla de Cozumel y comenzó a explorar la tierra con la intención final de colonizarla. A su llegada, su atención fue capturada por una gran gran pirámide que encontró y en donde advirtió manchas de sangre y restos humanos.
De inmediato, supo que esta pirámide se usaba para sacrificios humanos a los dioses de los nativos. Así que, horrorizado, Hernán Cortés comenzó el proceso para convertir a los nativos al cristianismo. Como acción inicial, derribó todos sus ídolos y los reemplazó con cruces y estatuas de la Virgen María.
Expedición a México
Con el fin de preparar expediciones a tierras interiores, Cortés utilizó traductores y guías indígenas para comunicarse y poder viajar de manera segura. Tiempo después de su llegada a Cozumel, Cortés y sus hombres iniciaron una expedición a México.
En esta expedición, desembarcaron en Tabasco. Aquí, Cortés y sus hombres se enfrentaron con los nativos el 25 de marzo de 1519, en el valle de Cintla. Ese día, las dos partes chocaron en la batalla conocida como la Batalla de Cintla. Los nativos fueron notoriamente avasallados por el armamento y las armaduras de los soldados españoles.
Como resultado de la confrontación, unos 800 indígenas fueron asesinados y solo 2 conquistadores españoles perdieron sus vidas. Al final, los tabasqueños juraron su lealtad a España. Asimismo, proporcionaron a los europeos comida, suministros y 20 mujeres.
Expedición a Tlaxcala
Habiendo conquistado al pueblo tabasqueño, Cortés se trasladó a la costa de Tlaxcala, una ciudad del poderoso imperio azteca. Para ese tiempo, los aztecas no siempre fueron gobernantes populares entre los habitantes de las ciudades que habían sometido. Cuando Cortés se enteró de esto, lo usó para su ventaja.
Así pues, concertó reuniones con los embajadores aztecas y les dijo que deseaba encontrarse con el gran gobernante azteca Moctezuma Xocoyotzin. Por otro lado, Xicotenga, un gobernante enemigo de Moctezuma, de la ciudad de Tlaxcala, vio en Cortés un aliado. Esta era su oprtunidad para apoderarse de la ciudad capital de Tenochtitlán.
Entonces, se concretó una alianza entre ambos líderes. Como resultado, varios miles de guerreros tlaxcaltecas fueron incorporados a las filas españolas. Sin embargo, contrariamente a sus avances en las alianzas, la situación de la relación de Cortés con su jefe, Velásquez, se comenzó a deteriorar.
La causa fundamental para este alejamiento era la constante insubordinación de Cortés. Específicamente, la expedición a Tenochtitlán no contaba con el visto bueno de Velásquez. De igual manera la situación de Hernán Cortés con sus hombres tampoco era buena. Eran frecuentes las quejas por los tratos recibidos.
En vísperas de una expedición a la ciudad de Tenochtitlan, arreciaron las quejas. Esto obligó a Hernán Cortés a destruir todas sus naves, medida de presión que los forzó a acompañarlo a la nueva expedición. De acuerdo a la crónica de Díaz del Castillo, quienes pretendían desertar se vieron obligados a continuar en la empresa.
Expedición a Tenochtitlan
Habiendo destruido los medios para regresar a Cuba, se conjuró la posibilidad de una deserción masiva. Todos los hombres de Cortés marcharon hacia la nueva expedición y llegaron a la capital del imperio azteca el 8 de noviembre de 1519.
Aunque no estaba convencido de las buenas intenciones de los españoles, el gobernante de la civilización azteca les dio la bienvenida gentilmente. Además, los acompañó en un recorrido por su palacio, y los halagó con regalos extravagantes. Desafortunadamente para Moctezuma, esto alimentó la codicia de los españoles y las relaciones se volvieron hostiles poco después.
Entonces, Cortés tomó cautivo a Moctezuma y los españoles invadieron la ciudad. En el curso de estos acontecimientos, el líder de los mexicas fue asesinado apedreado por su propia gente.
Mientras tanto, esta invasión que desobedecía las órdenes expresas de Velázquez comenzó a generar intranquilidad política en Cuba. En 1520, llegó a México una fuerza española enviada desde la isla dirigida por el expedicionario español Pánfilo Narváez. Su misión era privar a Cortés de su mando y arrestarlo por insubordinación.
En una rápida maniobra, Cortés dejó Tenochtitlán a cargo de Pedro de Alvarado, uno de sus comandantes. Entonces, partió para enfrentar a los españoles contrarios. Después de derrotarlos, regresó a la capital azteca para encontrar una rebelión en progreso.
Inmediatamente reorganizó a sus hombres y aliados, tomando el control de capital en el año 1512. Esto marcó la caída del imperio azteca. Hernán Cortés fue nombrado gobernador y luego estableció la ciudad de México. Esta fue construida sobre las ruinas de la derrotada capital azteca.
Otras expediciones
En 1524, arrastrado por su inquieto deseo de explorar y conquistar, Cortés se embarcó en una nueva expedición. Esta vez al sur a las selvas de Honduras, pero los dos arduos años que pasó en esta desastrosa empresa dañaron su salud y su posición.
Por otro lado durante el curso de esta aventura, sus propiedades fueron confiscadas por los funcionarios que había dejado encargados. Este revés aquietó su espíritu aventurero. Hernán Cortés pasó el resto de su vida tratando de reponer las pérdidas acarreadas por su última expedición.
Referencias
- Hammond Innes, R. (2018, mayo 15). Hernán Cortés. Tomado de britannica.com.
- The Mariner’s museum. (s/f). Hernán Cortés. Tomado de exploration.marinersmuseum.org.
- Szalay, J. (2017, septiembre 28). Hernán Cortés: Conqueror of the Aztecs. Tomado de livescience.com.
- The Economist. (2014, diciembre 17). On the trail of Hernán Cortés. Tomado de economist.com.
- O’Brien, P. K. (2002). Atlas of World History. New York: Oxford.
- Ramen, F. (2004). Hernán Cortés: The Conquest of Mexico and the Aztec Empire.
Nueva York: The Rosen Publishing Group.