Medio ambiente

Pisos térmicos de Colombia y sus características


¿Qué son los pisos térmicos de Colombia?

Los pisos térmicos de Colombia son una forma de clasificar los distintos tipos climáticos del país en función de la altitud como principal factor determinante de la temperatura.

La posición intertropical de Colombia trae como consecuencia que las variaciones anuales de la temperatura sean mínimas, siendo esta más influenciada por las variaciones altitudinales que por las variaciones anuales (estacionalidad). La disminución de la temperatura con la altitud determina los diferentes pisos térmicos.

A nivel del mar, Colombia reporta temperaturas medias anuales altas, con un promedio de 28ºC. Sin embargo, es un país con una geografía compleja por la presencia de cordilleras montañosas que en algunos puntos superan los 5.000 msnm.

En la medida en que se asciende en las laderas montañosas se reporta una disminución progresiva de las temperaturas medias anuales, a razón de un promedio de 1,8ºC por cada 100 m. Esto genera la presencia de cinco pisos térmicos, espaciados cada 1.000 msnm.

Descripción de los pisos térmicos de Colombia

Cálido

El piso térmico cálido se extiende entre los 0 y los 1.000 msnm, con una temperatura que abarca entre los 24 y los 29 ºC. Este piso se extiende por aproximadamente  913.000 Km2, un 80% del territorio colombiano.

Templado 

El piso térmico templado abarca las zonas bajas de las montañas, entre 1.000 y 2.000 msnm. Reporta temperaturas medias anuales que se encuentran entre los 17 y 24 °C. Comprende un 10% del territorio nacional, con  114.000 Km2.

Frío

El piso térmico frío corresponde a las franjas montañosas ubicadas entre los 2.000 y 3.000 msnm. Presenta temperaturas medias anuales que oscilan entre 11 y 17 °C. Corresponde al 7.9% del territorio colombiano, con 93.000 Km2.

Páramo

El piso térmico del páramo corresponde a la franja entre 3.000 y 4.000 msnm, con temperaturas que varían entre los 6 y 12 °C. Abarca 29.000 Km2 que equivale al 2,5% del territorio continental colombiano.

En este piso altitudinal se han identificado 34 ecosistemas, asociados en 5 tipos: páramo, sub-páramo, súper-páramo, páramo seco y páramo húmedo. Distribuidos en la Cordillera Occidental, Oriental y Central, así como en la Sierra Nevada de Santa Marta y el Sector Nariño-Putumayo.

Estos ecosistemas son clave en la regulación del clima y sus humedales constituyen la fuente principal de agua para la generación de electricidad y para consumo humano en grandes ciudades. Además constituyen un refugio importante para la biodiversidad.

Para su protección se han conformado 20 áreas protegidas del Sistema de Parques Nacionales de Colombia y 12 Reservas Forestales Protectoras Nacionales. El 35% de la superficie total de páramos se encuentra protegido bajo las categorías más estrictas de protección.

Glacial

El piso térmico glacial, también es denominado piso térmico de nieves perennes. Este abarca desde los 4.000 hasta los 5.775 msnm en el pico Cristóbal Colón, el punto más alto de la geografía colombiana.

Este piso presenta temperaturas medias anuales inferiores a los 6°C, acompañadas de lluvias escasas, fuertes vientos helados y nevadas frecuentes. Tiene una superficie menor al 0.1% del territorio colombiano.

En Colombia existen seis glaciares, que se encuentran distribuidos en la Sierra Nevada de Santa Marta y en las cordilleras Oriental y Central. El 100% de este territorio se encuentra protegido mediante el Sistema de Parques Nacionales Naturales colombiano.

Flora

Cálido

Al ser una región tan extensa, este piso altitudinal incluye una gran diversidad de ecosistemas terrestres, cada uno con sus propias características de vegetación.

Los bosques secos tropicales se caracterizan por registrar mayor número de especies para las familias capparidaceas, sapindaceas, bignoniaceas y leguminosas. Mientras que en las planicies del Orinoco las familias predominantes son cyperaceas, poaceas, rubiaceas y leguminosas.

En las sabanas de los llanos colombianos, predominan las ciperáceas, las gramíneas y las leguminosas herbáceas. Mientras que en las sabanas amazónicas, dominan las gramíneas, algas, rapatáceas y xyridáceas. En el Caribe dominan las gramíneas y son menos frecuentes las ciperáceas y otras plantas herbáceas.

Las formaciones xerofíticas y subxerofíticas están dominadas por las cactáceas, que constituyen la vegetación típica.

El bosque húmedo tropical es un ecosistema con una alta diversidad de especies vegetales. Entre los árboles, las leguminosas constituyen la familia con mayor diversidad. Mientras que en el sotobosque son comunes las plantas de la familia Araceae, como los anturios (Anthurium), cañagrias (Costus), bihaos (Calathea), platanillos (Heliconia) y afines.

Templado y frío

La biodiversidad asociada a estos pisos térmicos es principalmente aquella característica de los bosques nublados. Constituyen ecosistemas estratégicos, por su gran valor para el bienestar social. Son importantes en el mantenimiento del agua, sumideros de carbono, fuente de estabilidad climática y refugio de un gran número de plantas y animales.

Resalta la presencia de especies endémicas como las ericáceas Macleania penduliflora, Diogenesia antioquiensis y Cavendishia albopicata. A su vez, resaltan como especies emblemáticas de la zona andina los pinos autóctonos de Colombia (Prumnopitys y Podocarpus), el roble del género Quercus y la palma de cera (Ceroxylon quinduense).

Varias especies vegetales han sido consideradas dentro de alguna categoría de amenaza global y nacional. El molinillo (Magnolia hernandezii) y el tiragua (Blakea granatensis) se encuentran en peligro crítico. La palma de cera (Ceroxylon quindiuense), el nogal (Juglans neotropica), el marupito montañero (Couepia platycalyx) y el amarraboyo (Meriania peltata) se encuentran en peligro. El pino colombiano (Podocarpus oleifolius) y el roble (Quercus humboldtii) se han considerado vulnerables.

Páramo

En los páramos habitan más de 4.700 especies vegetales, de un total de 27.860 especies de seres vivos reportadas para Colombia. Esto indica que los páramos representan el 17% de la diversidad florística de Colombia en apenas 2,5% del territorio continental.

Los páramos tienen una vegetación abierta, de rala hasta arbustiva con bosque bajo. Entre las especies de plantas emblemáticas de los páramos destacan las especies de la familia Asteraceae. A esta pertenecen más de 80 especies de frailejones (Espeletia spp.).

Los frailejones presentan un alto grado de endemismo. Probablemente debido a que sus semillas, a diferencia de otros géneros de la misma familia, no tienen adaptaciones que les permitan ser dispersadas por el viento. Por consiguiente, su distribución es más restringida.

Glacial

En este piso altitudinal las heladas nocturnas son frecuentes y los vientos son extremos. La vegetación es escasa y discontinua. Abundan las gramíneas y los arbustos enanos.

Por encima de los 4.800 msnm se encuentra la zona nival, con muy poca o nada de vegetación, y con la presencia de glaciares.

Fauna

Cálido

En este piso térmico, el ecosistema con mayor diversidad de fauna corresponde al bosque húmedo tropical. Entre los peces predominan los órdenes Characiformes y Siluriformes.

Los anfibios son diversos, con presencia de ranas venenosas (Dendrobatidae), sapos y algunas salamandras. Los reptiles incluyen especies de serpientes, lagartos, iguanas, tortugas, babas y caimanes.

En los bosques húmedos tropicales existe una alta diversidad de aves, principalmente en el Chocó y la Amazonía. Además, contienen la mayor parte de los mamíferos reportados en el país, siendo los murciélagos más de la mitad de las especies.

Entre los mamíferos emblemáticos, están las ardillas y varias especies de marsupiales. Sobresalen algunos trepadores como monos, martejas (Potos flavus) y perezosos. Mientras que entre los grandes mamíferos están los saínos (Tayassu pecari y Pecari tajacu), las dantas (Tapirus), el puma y el jaguar.

Templado y frío

En los bosques nublados asociados a estos pisos térmicos las aves, anfibios e invertebrados presentan un alto grado de riqueza de especies. Además, estos grupos de fauna, en conjunto con los mamíferos, presentan un alto grado de endemismo.

Las zonas de mayor endemismo de aves se encuentran en la cordillera andina, con aproximadamente 130 especies. Además, algunas especies de aves se han identificado con algún nivel de amenaza.

El paujil (Crax alberti) se ha considerado en peligro crítico, el águila crestada (Oroaetus isidori) en peligro, la clorocrisa multicolor (Chlorochrysa sp) como vulnerable y el zamarrito gorjiturquesa (Eriocnemis godini) podría estar extinto.

La mayoría de las especies de mamíferos del bosque nublado se encuentran en alguna categoría de amenaza. Algunas de las especies más emblemáticas son el mono aullador negro (Alouatta palliata), en estado vulnerable, el venado sabanero (Odocoileus virginianus) en peligro crítico, y el tapir de montaña (Tapirus pinchaque) en peligro.

La riqueza de especies es de anfibio es especialmente alta en la región andina, con 121 especies en la cordillera Central, 118 en la cordillera Occidental y 87 en la cordillera Oriental.

El arlequín de Albán (Atelopus farci) y la rana saltona anómala (Hyloxalus ruizi) se encuentran en peligro crítico. El arlequín de Malvasa (Atelopus eusebianus) y las ranas de lluvia (Eleutherodactylus jorgevelosai, E. lichenoides, E. tribulosus) están en peligro. Mientras que E. renjiforum y E. suetus se consideran vulnerables.

Páramo

En los páramos colombianos se han registrado 70 especies de mamíferos, 15 especies de reptiles, 87 de anfibios, 154 de aves y 130 de mariposas.

Algunas especies emblemáticas de la fauna de los páramos colombianos son el oso de anteojos o frontino (Tremactos ornatus) y el puma (Puma concolor) entre los mamíferos. En cuanto a las aves resaltan el cóndor de los Andes (Vultur grhypus), el águila de páramo (Geranoaetus melanoleucus) y el colibrí chupasavia (Boissonneaua flavescens).

Glacial

Las condiciones extremas de viento, precipitación, bajas temperaturas, heladas y zona nivales hacen al piso térmico glaciar un ambiente poco propicio para la fauna. Sin embargo, es posible encontrar algunos ejemplares de cóndor de los Andes (Vultur grhypus), de águila de páramo (Geranoaetus melanoleucus).

Referencias

  1. Armenteras D., Cadena-V C. y Moreno R.P. 2007. Evaluación del estado de los bosques de niebla y de la meta 2010 en Colombia. Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt. Bogotá, D.C. – Colombia. 72 p.
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  7. Rangel-Ch, J.O. (2015). La biodiversidad de Colombia: significado y distribución regional. Revista Académica Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, 39(151):176-200.