¿Qué es la selección estabilizadora? (Con ejemplos)
La selección estabilizadora, también conocida como purificadora, es una de las tres formas principales por la cual la selección natural actúa sobre determinado carácter cuantitativo y heredable.
Generalmente, este tipo de selección ocurre sobre un rasgo particular y mantiene su tamaño durante el paso de las generaciones. En los ambientes constantes es, presumiblemente, el modelo de selección más común en la naturaleza.
Este tipo de selección se encarga de preservar las características promedio de una población, favoreciendo la reproducción de estos individuos.
La selección natural es capaz de modificar los parámetros – promedio y varianza – de un carácter en la población. Este carácter continuo se grafica en una curva de distribución normal o gráfico de campana (ver gráfico en imagen superior).
La manera en que la selección modifique esta curva normal nos permitirá concluir si la selección es diversificadora, direccional o estabilizadora.
En el modelo de selección estabilizadora, la media de la población no se ve modificada a lo largo de las generaciones, mientras que la varianza va disminuyendo (ya que este tipo de selección elimina los valores extremos, y el carácter empieza a ser más homogéneo).
Aunque podríamos pensar que la estabilidad de la media en una población podría indicar que no hay fuerzas evolutivas actuando en ella, el fenómeno podría explicarse por la presencia de una fuerte selección estabilizadora.
Índice del artículo
Antes de hablar de los tipos de selección, es necesario entender qué es la selección natural. A pesar de que es un concepto muy popular, está rodeado de malentendidos.
La selección natural es un mecanismo que genera cambios en las poblaciones a lo largo del tiempo – es decir, evolución. Esta admirable idea fue propuesta por Charles Darwin, en 1859 y revolucionó todos los campos de la biología. Actualmente, sigue siendo el pilar de la biología evolutiva moderna.
La selección natural es éxito reproductivo diferencial y ocurre en la población siempre y cuando ocurran tres condiciones: 1. existe variación, 2. estas variaciones son heredables (es decir, pasan de padres a hijos) y 3. algunas variaciones están asociadas a una ventaja en la reproducción (en términos más exactos, ciertas variaciones posee mayor adecuación biológica).
De este modo, la selección natural está directamente relacionada con la reproducción del individuo y no con la “supervivencia del más fuerte” y otras frases virales con las que solemos asociar el concepto.
La selección estabilizadora actúa de la siguiente manera: en la distribución de frecuencias de los caracteres fenotípicos, son seleccionados los individuos que se encuentran en el centro de la curva, es decir los individuos más frecuentes en la población.
Este fenómeno ocurre porque los individuos promedio tienen mayor fitness o eficacia biológica. En otras palabras, esta característica promedio les da a los individuos que la portan alguna ventaja en la reproducción – sobre sus compañeros que no cuentan con el valor promedio de dicho rasgo.
Este patrón es común en la naturaleza, particularmente en ambientes cuyas condiciones sean estables durante largos periodos de tiempo.
Definición de media y varianza
Para determinar el tipo de selección que está experimentando alguna población en particular, los biólogos cuantifican un carácter en la población a lo largo de las generaciones y observan el cambio en los parámetros del mismo.
Como medida de tendencia central suele calcularse el promedio aritmético del carácter: la media. Por ejemplo, podemos evaluar en una población humana el peso de un número de sus integrantes y calcular el promedio, digamos 62 kilos.
Sin embargo, conocer la media no es suficiente y es necesario también determinar un valor que nos indique la homogeneidad o heterogeneidad de los datos.
La varianza, por su parte, nos permite conocer cómo se dispersan los valores de la muestra alrededor de ese promedio.
La media es constante pero la varianza disminuye
En el modelo de selección estabilizadora esperamos encontrar que la media se mantuviese constante a medida que pasan las generaciones.
Imaginemos que estamos evaluando la evolución del peso en las poblaciones humanas y calculamos el promedio por varias generaciones. En nuestros resultados, vemos que el promedio se mantiene constante. Erróneamente podríamos pensar que en dicha población no están actuando las fuerzas de selección.
Por ello, es importante calcular también la varianza. En este modelo de selección, esperaríamos una reducción de la varianza en el tiempo.
En su forma más simple, la selección estabilizadora tendería a reducir la variación dentro de las poblaciones. Sin embargo, la disminución de la variación ocurre a nivel de la variabilidad del carácter y no tiene por qué llevar consigo a una disminución en cuanto a la variabilidad genética.
Recordemos que existen mecanismos naturales que generan variabilidad. Además, en muchos casos, el óptimo de un carácter no es igual para todos los fenotipos de una población.
El ejemplo que mejor ilustra el modelo de selección es el peso de los bebés humanos al momento de su nacimiento. Este fenómeno fue reportado en distintos países, incluyendo el Reino Unido, Estados Unidos, Italia, Japón, entre otros entre 1930 y 1940.
Los bebes más pesados o más livianos no tenían tasas de supervivencia tan altas – si las comparamos con los individuos promedios.
El mismo fenómeno de estabilización del tamaño en los recién nacidos lo observamos en los nacimientos de otros animales y en la puesta de sus huevos.
Es probable que la selección estabilizadora haya actuado con mayor intensidad hasta la llegada de la cesárea y de los cuidados prenatales tan efectivos que vemos en la actualidad.
De hecho, algunos estudios realizados a mediados de los años 50 concluyeron que las presiones selectivas que llevaron al nacimiento de bebés de tamaño promedio se han relajado excesivamente. Para los años 80 y 90, el patrón había desaparecido casi por completo en los países desarrollados.
Los bebes más grandes que antes representaban una complicación para el parto, ahora pueden nacer usando las técnicas de cesárea. El otro extremo, los bebés más pequeños, logran sobrevivir gracias a los extensos cuidados médicos.
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