Lobo blanco: características, hábitat, alimentación, comportamiento
El lobo blanco o ártico (Canis lupus arctos) es un mamífero que pertenece a la familia Canidae. Este animal es una subespecie del lobo gris (Canis lupus), del cual se diferencia por ser más pequeño, de pelaje blanco y por tener un hocico y unas patas más cortas.
Con relación a la distribución, se encuentra en el Ártico, en los territorios correspondientes a Norteamérica y Groenlandia. El hábitat en estas regiones es la tundra, que está caracterizada, entre otras cosas, por tener el suelo congelado casi todo el tiempo.
El clima en esta zona puede llegar a -60 °C. Debido a esto, el lobo polar, como también es conocido, tiene adaptaciones que le permiten sobrevivir en esas inhóspitas regiones. Entre estas se encuentran su denso pelaje, que es impermeable y cumple la función de aislante térmico.
Sus patas son cortas, fuertes y cubiertas de pelos. Esto le permite al Canis lupus arctos correr, caminar o trotar ágilmente, ya que las extremidades equilibran el peso corporal y evitan que el animal se hunda en la nieve.
Índice del artículo
- 1 Evolución
- 2 Características del lobo ártico
- 3 Taxonomía
- 4 Hábitat y distribución
- 5 Estado de conservación
- 6 Alimentación
- 7 Reproducción
- 8 Comportamiento
- 9 Referencias
Evolución
El lobo gris tiene dos subespecies reconocidas, el Canis lupus orion, originario del Cabo York, en la zona noroeste de Groenlandia y el Canis lupus arctos, de la isla Melville, en Canadá.
El ancestro de estos clados pudo haber habitado en Groenlandia, hace 7.600 años atrás. Los especialistas proponen que durante el Pleistoceno tardío evolucionaron dos variedades de lobos, cuando la región norte estaba libre del hielo que lo cubrió durante la glaciación de Wisconsin.
Una de estas subespecies se radicó en Peary Land, al extremo norte de Groenlandia, mientras que la otra se asentó en Alaska. Cuando desapareció el hielo, los lobos de Peary Land se extendieron por las islas Queen Elizabeth y por Groenlandia. El grupo que estaba en Alaska amplió su rango, convirtiéndose en los lobos del norte, conocido como Canis lupus arctos.
Características del lobo ártico
– Tamaño
El lobo ártico tiende a ser de menor tamaño que el lobo común. Además, los machos son más grandes que las hembras. De manera general, la longitud de su cuerpo, incluyendo la cola, oscila de 100 y 200 centímetros. Con relación a la altura, varía entre 63 y 79 centímetros.
La masa corporal de esta especie es de 32 a 70 kilogramos, aunque algunas especies adultas han alcanzado hasta 80 kilogramos.
– Adaptaciones al medio ambiente
El Canis lupus arctos vive en regiones donde la gran parte del año el terreno está cubierto de nieve y las temperaturas son extremadamente bajas. No obstante, el organismo de este lobo tiene varias adaptaciones que le permiten vivir y desarrollarse en ese hábitat.
Orejas
Las orejas son de tamaño pequeño, con relación a las dimensiones corporales. Comparativamente, esta especie tiene, de manera proporcional, las orejas más pequeñas de todas las especies y subespecies de lobos.
Esto reduce la relación anatómica entre la superficie y el volumen. Así, el área de superficie donde pueda haber pérdida de calor es menor, en comparación con las orejas más grandes que tienen los de su género.
Pelaje
El pelaje del lobo ártico es blanco, aunque pudieran existir especies de color gris claro. Los pelos de esta especie son gruesos y altamente aislantes. Así, tiene una capa corta y muy suave, cercana a la piel. Esta cumple la función de proteger la epidermis y de aislar térmicamente el cuerpo de este canino.
También, tiene otra cobertura de pelos largos y gruesos, que son impermeables al agua y a la nieve. Esta puede volverse más densa a medida que se acerca la temporada de mayor frío.
Por otra parte, las patas del lobo blanco están cubiertas de pelos. Inclusive, entre las almohadillas tiene pelos, lo que convierte a la pata en una especie de raqueta de nieve. Estas particularidades aíslan al cuerpo del hielo y de la nieve, además de facilitarle su desplazamiento por las superficies resbaladizas y entre las profundas capas de nieve.
Grasa corporal
El Canis lupus arctos tiene, debajo de la piel, una gruesa capa de grasa corporal. Esta es utilizada como una fuente de nutrientes, en caso que escaseen los animales que conforman su dieta. Además, cumple una función aislante, que lo ayuda a sobrevivir el frío invierno de las regiones donde vive.
Intercambio de calor a contracorriente en las patas
En esta especie, al igual que en el perro doméstico y en algunas aves, las patas tienen un sistema que disminuye la pérdida de calor a través de esta extremidad. Dicho mecanismo actúa cuando la sangre que ingresa a las patas calienta la sangre que sale de esta, a través de un contacto a contracorriente.
– Cráneo
Las investigaciones sobre las características del cráneo del Canis lupus arctos. han evidenciado que, desde 1930, dicha estructura ha presentado variaciones. Entre estas se encuentran el ensanchamiento, el acortamiento de la región facial y la disminución en el tamaño. Además, los dientes han reducido sus dimensiones.
Los expertos plantean varias teorías para tratar de explicar estas variaciones. Una de estas sugiere que se deben a que el cráneo de joven lobo ártico no se desarrolla completamente. En este sentido, cuando la cría tiene entre 4 y 5 meses vive su primer invierno, en el cual la poca disponibilidad de alimentos impide el crecimiento de esa estructura ósea.
Hibridación
Otra hipótesis plantea que la reducción y el cambio de forma del cráneo se encuentra asociado a la hibridación y la posterior introgresión del Canis lupus arctos con perros huskies (Canis familiaris).
En este sentido, el cráneo de un híbrido de perro – lobo es de tamaño intermedio entre los cráneos de huskies y lobos, aunque su forma presenta variaciones en cuanto a las medidas. Así, los cráneos de los lobos árticos del período 1930–1950 tienen una gran similitud al cráneo de este híbrido.
No obstante, desde 1950, la morfología craneana del lobo blanco ha tenido una reversión. Sus características y dimensiones son más parecidas a las de su género. Esto podría sugerir que la hibridación con el Canis familiaris ya no se está produciendo.
Taxonomía
-Reino: Animal.
-Subreino: Bilateria.
-Filum: Cordado.
-Subfilum: Vertebrado.
-Infrafilum: Gnathostomata.
-Superclase: Tetrapoda.
-Clase: Mammalia.
-Subclase: Theria.
-Orden: Carnivora.
-Familia: Canidae.
-Género: Canis.
-Especie: Canis lupus.
-Subespecie: C. lupus arctos.
Hábitat y distribución
Esta subespecie habita en el Ártico, en territorios que incluyen Groenlandia y Norteamérica, sin que se extienda hacia Europa continental o a Asia. Así, las poblaciones del lobo blanco están presentes en Canadá, Alaska y Groenlandia. De esta manera, vive en regiones ubicadas sobre los 67° de latitud norte.
El Ártico es una región localizada en el extremo norte del planeta Tierra. Esta área está integrada por el océano Ártico y los mares que están a su alrededor. También incluye a Groenlandia, la isla más grande a nivel mundial, y las zonas septentrionales de algunos países, como Estados Unidos y Canadá.
Una gran parte del océano Ártico permanece bajo hielo flotante casi todo el año. Así, el hielo permanente solo cubre una pequeña parte de las afueras de Groenlandia. Con relación al hábitat predominante, es la tundra. Esta se caracteriza por llanuras sin hierbas ni árboles, con suelos permanentemente congelados.
En cuanto al clima, varía de acuerdo a la estación y a la localización geográfica. Durante el invierno, en varias regiones pueden llegar a tener temperaturas de -60 °C. Contrariamente, en julio el clima es más cálido, alcanzando temperaturas alrededor de los 20 °C.
Sub regiones
Dentro de la región Ártica, las condiciones ambientales varían, ocasionando que el territorio se divida en Ártico Bajo y Ártico Alto.
En el Ártico Alto, las condiciones ambientales son severas y se caracteriza por la presencia de una forma extrema de tundra ártica, conocido como el desierto polar. En este, los niveles de humedad son muy bajos, por lo que la vegetación es escasa.
Con relación al Ártico Bajo, aproximadamente el 80% del área está cubierta por algunas variedades de gramíneas. La capa de hielo que forma el suelo en esta región se descongela anualmente, durante el verano.
Biodiversidad
A pesar que en el Ártico existen condiciones climáticas extremas, proliferan una gran diversidad de especies vegetales. Estas pueden ser desde musgos, entre los cuales está el musgo Silene (Silene acaulis), hasta el sauce Ártico (Salix arctica). Este solo crece alrededor de dos metros de alto, siendo una de las plantas de mayor altura de la tundra.
En cuanto a los animales, existen aproximadamente 450 especies de peces, entre los que se encuentra el bacalao Ártico. Las aves también están presentes en esta fría región, como es el caso de la barnacla carinegra y la gaviota marfil.
Con relación a los mamíferos, algunos representantes de este clado son la liebre Ártica, el buey almizclero, el reno y el oso polar.
Estado de conservación
En las últimas décadas, los lobos blancos no han estado amenazados por la caza furtiva, como sí ocurre con otras subespecies de los lobos grises. Esta situación se debe fundamentalmente al hecho que las regiones donde habita el Canis lupus arctos se encuentran despobladas de seres humanos.
Actualmente, el lobo ártico no está incluido dentro de la lista roja de la UICN. No obstante, las poblaciones de esta subespecie se encuentran amenazadas por el cambio climático.
Las alteraciones climáticas están desencadenando una serie de efectos negativos en los diferentes ecosistemas del Ártico. Así, las especies vegetales han visto alterado su desarrollo, lo que impacta en la alimentación de los herbívoros. Esto afecta al lobo ártico, ya que dicho grupo alimenticio forma parte fundamental de su dieta.
Situación del lobo blanco en 1930
En la década de 1930, el Canis lupus arctos fue exterminado de la zona este de Groenlandia. Esto se produjo como consecuencia de la acción de los cazadores. Posteriormente, por más de 40 años, los especialistas consideraron ausente a esta subespecie de ese hábitat.
En 1979, los expertos reportaron la recolonización del área este de Groenlandia, por los lobos árticos que habitaban al norte de ese país. Esto originó el exitoso establecimiento de una población nueva, ya que además del par de lobos que inicialmente se radicó en la zona, posteriormente lo hicieron otros dos más.
Alimentación
El lobo ártico es animal carnívoro. Su dieta incluye focas, aves, alces, zorros árticos y caribúes. También, puede comer carroña, proveniente de la caza de otros depredadores.
No obstante, los estudios revelan que las presas favoritas son las liebres árticas y los bueyes almizcleros. La proporción de consumo entre ambas especies depende del rango geográfico donde habite y de la estación.
En este sentido, la liebre ártica es una especie fundamental para los lobos blancos que viven en el Alto Ártico. De esta manera, pueden sobrevivir y permanecer en esa región de frío extremo, inclusive en ausencia de especies unguladas.
Con relación a la alimentación de los jóvenes, los expertos señalan que las crías de buey almizclero son la fuente primaria de nutrientes. Esto es debido a las altas necesidades energéticas de los cachorros. No obstante, cuando la liebre ártica es la presa más abundante, constituye el principal componente de la dieta de las crías del lobo blanco.
A pesar que en pocas oportunidades el Canis lupus arctos tiene contacto con el oso polar, existen registros de manadas de lobos atacando a los cachorros de este mamífero.
La caza
El tamaño del territorio que ocupa esta especie va a depender de la disponibilidad de los alimentos. Así, el rango de hogar de una manada puede ser de más de 2.500 km2. El lobo ártico ingiere hasta 9 kilogramos de carne en una comida. Suele consumir todo el animal, no desperdicia ninguna parte del organismo, ni siquiera los huesos.
En cuanto al método de caza, va a depender fundamentalmente del tamaño de la presa. En el caso de animales pequeños, como las liebres y los zorros árticos, pueden perseguirlos y capturarlos de manera solitaria. Sin embargo, los grandes ungulados son cazados en manadas.
La técnica empleada en estos casos requiere de la acción coordinada de todos los miembros que conforman el grupo. Generalmente no persiguen a la presa a una gran velocidad, aunque en ocasiones pueden alcanzar los 75 Km/h. El grupo va detrás del animal a un paso moderado, hasta agotarlo físicamente.
Usualmente, los primeros en cansarse de la persecución son las crías, los más adultos o los enfermos. Una vez que el animal se haya quedado atrás, los lobos árticos lo intimidan con sus colmillos, mientras lo rodean. De esta manera impiden que huya del acorralamiento.
A la hora de cazar un animal, no importa que este sea más grande o que tenga fuertes cuernos. El ataque es en conjunto, mientras un lobo muerde una pata, otro se abalanza hacia el cuello y finalmente toda la manada ataca a la presa por completo, matándola.
Reproducción
El Canis lupus arctos alcanza el tamaño adulto cuando tiene entre seis y ocho meses. En cuanto a la madurez sexual, generalmente ocurre alrededor de los 22 meses.
Al igual que en otras especies de lobos, solo los machos alfas y las hembras alfas o betas pueden aparearse. Además, el hecho que los jóvenes no tengan acceso a reproducirse ocasiona que estos abandonen a temprana edad la manada. La intención es la de formar su propia manada, donde puedan reproducirse.
Debido a que el suelo ártico está casi todo el tiempo congelado, el lobo blanco se ve imposibilitado de excavar su guarida. Es por esto que suele utilizar como madriguera los afloramientos rocosos, las depresiones poco profundas del terreno o las cuevas.
Las crías
El periodo de gestación dura alrededor de 63 días. En el momento del alumbramiento, la hembra gestante se dirige a la guarida, donde nacen de 2 a 3 cachorros.
Los recién nacidos tienen un pelaje más oscuro y sus ojos son azules. Este color cambiará a naranja o amarillo dorado, cuando tengan entre 8 y 16 semana de edad. Sus ojos y oídos están cubiertos, por lo que dependen del comportamiento instintivo y del olfato para sobrevivir las primeras semanas de vida.
Cuando el joven tiene de 12 a 14 días ya pueden escuchar los diversos sonidos del ambiente que lo rodea. Luego de 3 a 6 semanas, los cachorros salen de su guarida, comenzando a aventurarse en el ambiente que lo rodea. Sin embargo, no se alejan mucho del refugio
A los tres meses, ya forman parte de la manada, con la que viaja y caza. En esta especie, todos los miembros del grupo colaboran en la protección de los cachorros.
Comportamiento
Los lobos blancos se encuentran agrupados en manadas, que pueden estar formadas hasta por 20 lobos. De manera general, el tamaño de este grupo va a depender de la disponibilidad de los alimentos. Con relación a la pareja reproductora está formada por el macho y la hembra más fuertes
Muchas veces puede observarse un lobo ártico en solitario. Esto puede estar asociado a la búsqueda de comida o que está intentado formar su propia manada.
El Canis lupus arctos utiliza el lenguaje corporal para transmitir a los miembros del grupo las reglas. Como norma principal, deja claro que el macho alfa es el líder, seguido de la hembra alfa. Para demostrar el dominio, el macho mantiene la cola en alto y el cuerpo erguido.
El lobo ártico es muy territorial, marcando su espacio con orina y heces. No obstante, el rango de hogar suele ser muy amplio, por lo que generalmente permite que otras manadas superpongan su territorio al suyo. En el siguiente video se puede observar cómo un grupo de lobos árticos caza a una liebre:
Referencias
- Wikipedia (2019). Artic Wolf. Recuperado de en.wikipedia.org.
- Laura Klappenbach (2018). Arctic Wolf or Canis lupus arctos. Recuperado de thoughtco.com.
- Ulf Marquard-Petersen (2011). Invasion of eastern Greenland by the high arctic wolf Canis lupus arctos. Recuperado de doi.org.
- ITIS (2918). Canis lupus arctos, Recuperado de itis.gov.
- José Martín, Isabel Barja, Pilar López (2010). Chemical scent constituents in feces of wild Iberian wolves (Canis lupus signatus). Recuperado de researchgate.net.