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Teporingo: características, peligro de extinción, hábitat


El teporingo (Romerolagus diazi), conocido comúnmente como “tepolito”, “zacatuche” o “conejo de los volcanes”, es una especie de mamífero placentario que pertenece a la familia Leporidae del orden Logomorpha, caracterizados por poseer dos pares de dientes incisivos.

El zacatuche es una especie endémica de México. El nombre zacatuche proviene del vocablo náhuatl zacatl, que significa “conejo del zacate”; al igual que totchli (tepolito) que significa “conejo de las rocas”. De este último se cree que deriva la palabra teporingo.

La distribución del teporingo está restringida en la porción central del eje Neovolcánico Transversal en las laderas medias del Popocatepetl e Iztaccihuatl, y a las montañas que rodean la Cuenca de México.

Es un conejo relativamente pequeño, siendo el segundo más pequeño de los logomorfos después del conejo pigmeo. Las patas son cortas y sus orejas son pequeñas y redondeadas. En los ejemplares adultos, la cola pasa casi desapercibida.

La especie puede reproducirse durante todo el año. Sin embargo, se observan picos de reproducción en el verano. El periodo de gestación suele durar entre 38 a 40 días, con un promedio de crías de 2.1 por gestación. Los ejemplares recién nacidos salen con los ojos cerrados y los abren al cabo de 4 a 8 días.

Viven en madrigueras hechas de zacate y material vegetal seco en grupos de dos a cinco individuos. Son de hábitos diurnos, observándose mayor actividad entre las 10 a 14 horas. Ante el peligro, emiten un sonido agudo de alerta.

Estos conejos son alimento de muchos depredadores silvestres, siendo parte fundamental de la cadena trófica. Además, como herbívoros contribuyen a la composición y estructura de las comunidades vegetales. A pesar de esto, la fragmentación del hábitat, junto a la caza furtiva, han mermado o disminuido la población al grado de encontrase en peligro de extinción.

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Características

El zacatuche es un conejo relativamente pequeño de la familia Leporidae, familia que incluye a los conejos y liebres. Es la segunda especie de mamífero lagomorfo más pequeña después del conejo pigmeo (Brachylagus idahoensis).

Los individuos tienen patas cortas y cojinetes (almohadillas) cubiertos de pelo. Las patas delanteras poseen cinco dígitos y las traseras cuatro dígitos. Las orejas del conejo son pequeñas y redondeadas.

Su cuerpo alcanza una longitud de 26.8 a 40 centímetros. La cola es tan corta que es imperceptible a la vista. Generalmente, el adulto pesa 400 gramos; pero aún así, algunos individuos superan los 500 gramos.

En cuanto a su pelaje, es corto y abundante. La coloración del pelaje es amarillo arena, mezclado con negro y gris al dorso y en la partes laterales. Entre la punta y la base es negro, y en la zona media, la coloración es amarillenta.

Otra característica distintiva de la especie es una clase de marca triangular en la nuca, de pelo dorado-amarillento. Esta marca posiblemente corresponde a mecanismos de comunicación visual entre individuos.

La hembra tiene tres pares de glándulas mamarias: un par en el pecho, uno en el abdomen y otro par en la ingle. Su dentadura está compuesta por 28 piezas, distribuido en incisivos 2/1, premolares 3/2, y molares 3/3.

Peligro de extinción

Las poblaciones de teporingo se ven gravemente afectadas por la destrucción y modificación de su hábitat como resultado de las actividades ganaderas (pastoreo), actividades agrícolas (cultivos), incendios forestales, envenenamiento por pesticidas y fertilizantes.

Adicionalmente, el establecimiento y crecimiento de nuevos asentamientos humanos conlleva la fragmentación de su entorno natural; al igual que la construcción de carreteras, tala de árboles y prácticas turísticas mal planeadas.

La caza es otra amenaza, a pesar de que R. diazi está incluido en el Apéndice 1 de CITES y es ilegal cazarlo bajo la ley mexicana. De hecho, fue declarada Especie en Peligro de Extinción desde el año 1966.

Dentro de las medidas de protección de la especie se han propuesto programas de cría en cautividad, manejo del hábitat en especial, relacionado con la quema y sobrepastoreo de zacatón (zacates). Igualmente, se ha implementado la prohibición de la caza y comercio de R. diazi.

En la actualidad, el parque nacional Zoquiapan y Izta-Popo y el Ajusco son áreas protegidas que cubren la mayor parte de la distribución de la especie.

Hábitat y distribución

El conejo de los volcanes habita entre los 2.800 a 4.250 msnm, en bosques de pinos cubiertos densamente de zacates. El sustrato consiste en roca basáltica, suelos oscuros caracterizados por ser de rocas ígneas volcánicas. El verano en esta zona es cálido y lluvioso, mientras que el invierno es frío y seco.

El clima local es templado, subhúmedo y tiene una temperatura media anual de 11°C. Los promedios de precipitación anual en alrededor de 1.000 milímetros.

La madriguera es un agujero poco profundo de aproximadamente unos 11 cm de profundidad (máximo 5 metros) y 15 cm de diámetro. Por lo general, los accesos suelen estar cubiertos por pastizales o zacatón.

La hembra construye el refugio a partir de fragmentos de plantas secas de pino (Pinus sp.), aliso (Alnus arguta), hierbas (Penstemon sp., Eryngium sp. y Gnaphalium sp.) y una gran masa de pelo. La especie también puede usar madrigueras abandonadas de animales como tuzas, ardillas, armadillos y tlalcoyotes.

El zacatuche es una especie endémica de México; es decir, su distribución está limitada y no se encuentra de forma natural en ninguna otra parte del mundo. Su localización está concentrada en la porción central del eje Neovolcánico Transversal conformada por: Pelado, Tláloc, Iztaccíhuatl y Popocatépetl.

Reproducción

Los teporingos alcanzan la madurez sexual a los cinco o seis meses de edad. Cuando el macho alcanza la madurez sexual, los testículos descienden al escroto, donde permanecen durante todo el año. Por lo tanto, la especie puede reproducirse durante todo el año. No obstante, hay un notable pico de reproducción durante el verano, cálido y lluvioso.

El periodo de gestación es de 38 a 40 días y el tamaño promedio de la camada es de 2.1 crías. Los recién nacidos son de pelaje escaso y sus ojos se abren entre 4 y 8 días después. Son destetados entre los 21 y 28 días.

También, las crías recién nacidas exhiben una cola cubierta de pelo visible externamente; esto es lo contrario a los adultos, en quienes la cola se encuentra encerrada debajo de la piel. Además, nacen con garras bien desarrolladas. Pueden alcanzar una longitud de 8.3 a 10.6 centímetros y pesar unos 25 a 32 gramos.

Las crías nacen dentro de las madrigueras que las hembras elaboran a partir de materia vegetal seca y pelaje de la propia madre, que esta se quita antes del alumbramiento. Después del nacimiento, permanecen 14 días en ella; y tras un periodo de tres semanas de edad, empiezan a independizarse de su refugio.

Alimentación

Este animal se alimenta de hojas y brotes tiernos de plantas herbáceas de Festuca amplisima, F. rosei, Muhlenbergia macroura, y Stipa ichu. Aunque principalmente les gusta comer zacate, un tipo de hierba que sirve de pasto y forraje.

A la vez se alimentan de avena, semillas de Sicyos angulatus (pepino asado), un tipo de planta enredadera de la familia de las calabazas; y también consumen corteza verde del aliso andino (Alnus acumiata), especie arbórea nativa de Suramérica. Solo en algunos casos, puede observarse el canibalismo.

Los miembros de esta especie juegan un rol importante dentro del ecosistema, ya que regulan la densidad poblacional de la vegetación y, al mismo tiempo, dispersan las semillas en áreas lejanas por medio de las heces.

Conjuntamente, las excreciones de los teporingos dispersan esporas de hongos micorrízicos (que forman micorrizas) y levaduras, que fomentan el crecimiento de microorganismos que asimilan nutrientes y favorecen el crecimiento vegetal.

Comportamiento

Los teporingos viven en grupos de dos a cinco individuos. Durante el día juegan, pelean y forrajean. Son especialmente activos temprano en la mañana y tarde, entre las 10 am a 2pm. Generalmente al medio día se les observa descansando.

La cópula se realiza durante el día. El parto suele observarse durante la noche. El cuidado parental en esta especie es escaso. Después del parto, la hembra se acerca a la madriguera solo ante un llamado de socorro. Al cabo de entre tres semanas y dos meses, la cría se independiza.

Habitualmente, se trata de una especie territorial. El macho defiende su madriguera de otros machos, aunque no suele observarse agresión, solo persecución. No sucede así en caso de las hembras. La agresión entre hembras y hembras-machos es frecuente, momento en el que atacan y muerden a otros individuos.

El diámetro de desplazamiento está limitado alrededor de su territorio y refugios, moviéndose máximo 2.5 Km².

Suelen mantenerse inmóviles con las orejas levantadas ante cualquier amenaza. Al alarmarse, estos conejos emiten vocalizaciones agudas. Frente al peligro, se desplazan algunos metros, deteniéndose en varias ocasiones antes de llegar a su refugio.

El teporingo permanece activo todo el año, incluso en días fríos y nublados. Su comportamiento diurno lo hace una presa fácil de reptiles, serpientes, aves y animales domésticos como perros y gatos.

Al igual que otros logomorfos, el zacatuche ingiere sus propios excrementos para digerirlos nuevamente y asimilar la mayor cantidad posible de nutrientes. Este comportamiento se conoce como coprofagia.

Referencias

  1. Teporingo, zacatuche, conejo de los volcanes, tepolito, volcano rabbit. Comisión Nacional de Áreas naturales protegidas. Mamíferos terrestres.
  2. Romerolagus diazi. Tomado de Wikipedia.
  3. Volcano rabbit. Tomado de Wikipedia.
  4. Romerolagus diazi, Volcano Rabbit. Tomado de iucnredlist.org
  5. Conejo de los volcanes. Tomado de biodiversidad.gob.mx
  6. Cervantes, F., L. Consuelo & R. Hoffman. Mammalian Species. Romerolagus diazi. American Society of Mammologists. 1990 Oct. 360: 1-7.