Definición de banca
Banca es un término con más de diez acepciones en el diccionario de la Real Academia Española (RAE). A continuación citamos algunos de ellos.
El primer significado que aparece en el diccionario hace referencia al asiento de madera que no tiene respaldo, aunque el concepto también puede utilizarse como sinónimo de banco (el asiento en que pueden sentarse varias personas y que puede tener, o no, respaldo). Por ejemplo: “Aprovecha para sentarte en la sombra, que allí hay una banca disponible”, “Trae la banca al patio así conversamos un poco”.
La banca también es el conjunto de bancos y banqueros. Se trata, en este sentido, del grupo de entidades cuyo objetivo primario es facilitar la financiación: “Si quiebra la banca, el país entrará en una crisis social sin precedentes”, “Necesitamos una banca más solidaria, que no cobre intereses tan elevados”.
Banca, por otra parte, es un juego de naipes que consiste en acertar el valor o el palo que se descubre del mazo. La banca es, además, la cantidad de dinero que pone quien lleva el naipe.
En Argentina, Uruguay y otros países sudamericanos, la banca es el puesto en el Parlamento que se obtiene mediante las elecciones: “El partido gobernante se quedó con veinte ganas del Senado”.
En Filipinas, la banca es una embarcación pequeña y estrecha que se construye en un tronco ahuecado. No tiene cubierta ni timón, y se maneja a través de la pagaya.
La mesa en un mercado donde se apoyan las frutas u otros productos en venta, el cajón donde se ubican las lavanderas para lavar la ropa y el bloque de hielo que flota en los mares de altas altitudes son otros significados del concepto de banca.
El rescate de la banca
Existe un concepto en economía que se denomina rescate financiero y hace referencia al acto económico en el que una entidad presta capital financiero a otro (empresa, Estado o un individuo) que se encuentra en serio peligro de bancarrota. De este modo, el asistido logra salvarse de la quiebra y la insolvencia y consigue reubicarse en la economía del mercado.
En los últimos años hubo otro, nacido de este, que se puso de moda rescate de la banca. Dada la difícil situación por la que pasan ciertos países en lo económico, muchos Estados han recurrido a los préstamos bancarios para repuntar la economía de su territorio.
No obstante, la deuda con los bancos ha ido aumentando tanto que la forma en la que algunos han decidido adquirir dinero para salvarla ha sido recortando subsidios a emprendimientos públicos. De este modo, en España, por ejemplo, han cerrado muchas bibliotecas y escuelas y se ha recortado muchísimo dinero que antes se destinaba a entretenimientos culturales.
De la misma forma, han intentado privatizar la salud y otros servicios, con el fin de abaratar costos y conseguir el dinero para devolver a la banca; para evitar que estas entidades quiebren.
Como era de esperarse, este tipo de decisiones provocaron un gran descontento y enojo en los ciudadanos, que vieron cómo su propio Estado prefería primar la estabilidad económica de las compañías financieras olvidándose de su verdadera responsabilidad: proteger la economía y estabilidad de los ciudadanos. Todo esto provocó que en los últimos años se hayan acrecentado las protestas y las huelgas contra el gobierno del país, con el fin de que este escuche la voluntad de la gente. Aunque el cambio es lento, seguramente este tipo de movimientos son los ideales si se desea una sociedad más justa.
Es necesario que el pueblo no permita que los gobiernos decidan qué se hace con el dinero público, por tanto solamente si todos nos uniéramos para pedir que se nos escuche y se respeten nuestras necesidades, podría cambiar la situación.