Qué es Intervencionismo:
Se denomina intervencionismo a la tendencia a intervenir, participar o inmiscuirse en asuntos ajenos. Este término es empleado, sobre todo, en los ámbitos de la política y la economía para referirse a la injerencia de un actor, ente u organismo en el terreno o las facultades que competen a otro.
El intervencionismo, en este sentido, tiene connotaciones negativas, especialmente cuando dicha intervención ocurre por imposición o por la fuerza. No obstante, en ciertas situaciones conflictivas, tanto en el ámbito privado como en el público, el intervencionismo es concebido con finalidades moderadoras o reguladoras, y sus acciones van encaminadas a la fijación de normas o a la mediación efectiva entre las partes.
En su expresión más radical en el ámbito político, el intervencionismo puede dar lugar a prácticas políticas de tipo imperialistas.
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Intervencionismo estatal en economía
En el ámbito económico, el intervencionismo estatal hace referencia a la participación o interferencia del Estado o de los órganos de la administración pública en la actividad económica de un país. En este sentido, no se limita a la fijación de las normas que conducen las prácticas del mercado, sino que dirige o planifica la economía. Las razones para aplicar el intervencionismo económico son variadas:
- Corregir desigualdades y fallas del mercado.
- Proteger el medio ambiente y los recursos naturales.
- Gestionar áreas estratégicas de la economía.
- Regular ciertas actividades en función de su conveniencia para la sociedad.
- Moderar el mercado.
- Frenar los abusos de poder.
- Financiar la seguridad social.
- Planificar u orientar la economía del país en determinada dirección.
Sin embargo, el grado de intervención o participación varía dependiendo de la doctrina que rija el modelo económico del país, y puede ir desde la defensa de la intervención mínima (liberalismo y neoliberalismo), pasando por una participación moderada (socialdemocracia y socialismo democrático), hasta una intervención casi absoluta (comunismo, fascismo).
Intervencionismo político
En política, el intervencionismo se refiere a la actuación de un Estado, ente u organismo en el ámbito de acción habitual de otro, para mediar, influir o entrometerse en sus asuntos o conflictos. En este sentido, puede presentarse en dos escenarios: el interno y el internacional.
Intervencionismo en política interior
Se produce cuando un poder se excede en sus atribuciones o facultades e interfiere en las decisiones o acciones de otro poder, reduciendo considerablemente su autonomía y restándole facultades. Por lo general, los poderes en el Estado están facultados para moderarse entre sí, no obstante, se habla de intervencionismo cuando se incurre en excesos o autoritarismos.
Intervencionismo en política internacional
Ocurre cuando un país, por medio de un conjunto de acciones, pretende influir o interferir en las acciones y decisiones de otro país, valiéndose de diferentes mecanismos de presión y coacción que van desde la diplomacia hasta el uso de la fuerza.
Ejemplos de intervencionismo, en el pasado, fueron los practicados durante la Guerra Fría por países como Estados Unidos o la URSS ante otros países para imponerles afiliaciones o líneas ideológicas, como el capitalismo o el comunismo.
Vea también Guerra Fría.