10 Ejemplos de

Prosa

La prosa es la forma de expresión más natural del lenguaje y se caracteriza por su continuidad: la escritura en prosa no es fragmentada sino que se continúa durante toda la línea, y en ella se articulan las ideas de manera consecutiva y coherente.

Se utiliza en distintos tipos de textos, como noticias, tesis, novelas y ensayos. Por ejemplo:

La península de Katiavar, patria de Mahatma Gandhi, está situada en el extremo occidental de la India, a medio camino entre Bombay y Karachi, y se adentra por el sur en el mar Arábigo. Esta situación geográfica la ha mantenido hasta hoy fuera de las rutas habituales de los viajeros.

(Ghandi, de Heimo Rau)

El texto en prosa se organiza en:

La prosa se diferencia de otra forma de lenguaje, el verso, porque no se ajusta a las reglas de la métrica ni de la rima. Sin embargo, se rige por las reglas ortográficas (la correcta escritura de las palabras), las morfosintácticas (el orden y la concordancia de las palabras en una oración), las de puntuación (la correcta utilización de los signos de puntuación), las de cohesión, las de coherencia y las de organización del discurso.

Tipos de prosa

La prosa se utiliza con distintos objetivos, como describir, narrar o argumentar, por eso, existen distintos tipos según cuál es su función principal:

Ejemplos de prosa

1. Prosa descriptiva

En esta playa suele haber muchos turistas en primavera y en verano, pero pocos en otoño y en invierno. El mar suele estar tranquilo. Hay tres muelles en los que las personas pasean o pescan. Además, hay cuatro restaurantes y dos hoteles con vista al mar.

1. Prosa narrativa – Fragmento de “La argentina ya no toma mate”, de Rodolfo Walsh

“La pasión y la preocupación del país” se había transformado, en 1966, en una amarga conjetura. El imperio de la yerba de cultivo que en cinco décadas se expandió en proporción de 140 a 1 se resquebrajaba por innumerables fisuras.

Para algunos era el fin: un alemán-brasileño de Eldorado macheteaba furiosamente al ras del suelo su yerbal intacto.

1. Prosa narrativa – Fragmento de Frankenstein, de Mary W. Shelley

Cuando tuve 17 años, mis padres decidieron que me convirtiera en estudiante de la Universidad de Ingolstadt. Hasta entonces había concurrido a las escuelas de Ginebra; pero mi padre creía necesario que, para completar mi educación, conociera costumbres diferentes a las de mi país natal. Se fijó mi partida en una fecha próxima; pero antes de que llegara el día señalado, ocurrió la primera desgracia de mi vida, un anticipo, en cierto modo, de mi futura miseria.

1. Prosa expositiva – Fragmento de La imagen-movimiento, de Gilles Deleuze

Se llama encuadre a la determinación de un sistema cerrado, relativamente cerrado, que comprende todo lo que está presente en la imagen, decorados, personajes, accesorios. Así pues, el cuadro constituye un conjunto que posee gran número de partes, es decir, de elementos que entran a su vez en sus conjuntos y de los que se puede hacer un inventario.

1. Prosa argumentativa

Es necesario que se tomen medidas de manera urgente para que el calentamiento global no siga empeorando, ya que las consecuencias de este fenómeno se agravaron en los últimos cien años, cuando la temperatura media de la tierra aumentó 0, 76 °C.

1. Prosa poética – Fragmento “Lamento de otoño”, de Stéphane Mallarmé

Desde que María me abandonó para ir a otra estrella —¿cuál, Orión, Altair, y tú, verde Venus?— yo siempre he amado la soledad. Cuántas largas jornadas pasadas solo con mi gato. Por solo entiendo sin un ser material y mi gato es un compañero místico, un espíritu.

1. Prosa ficcional – Fragmento de “La carta robada”, de Edgar Allan Poe

Recobrándose un tanto, tomó una pluma y, después de varias pausas y abstraídas contemplaciones, llenó y firmó un cheque por cincuenta mil francos, extendiéndolo por encima de la mesa a Dupin. Este lo examinó cuidadosamente y lo guardó en su cartera; luego, abriendo un escritorio, sacó una carta y la entregó al prefecto. Nuestro funcionario la tomó en una convulsión de alegría, la abrió con manos trémulas, lanzó una ojeada a su contenido y luego, lanzándose vacilante hacia la puerta, desapareció bruscamente del cuarto y de la casa, sin haber pronunciado una sílaba desde el momento en que Dupin le pidió que llenara el cheque.

1. Prosa ficcional – fragmento de “Don Rafael”, de Mario Benedetti

Lo esencial es adaptarse. Ya sé que a esta edad es difícil. Casi imposible. Y sin embargo. Después de todo, mi exilio es mío. No todos tienen un exilio propio. A mí quisieron encajarme uno ajeno. Vano intento. Lo convertí en mío. ¿Cómo fue? Eso no importa. No es un secreto ni una revelación. Yo diría que hay que empezar a apoderarse de las calles. De las esquinas. Del cielo. De los cafés. Del sol, y lo que es más importante, de la sombra.

1. Prosa no ficcional – Fragmento de “Raíces históricas de la integración latinoamericana”, de Sergio Guerra Vilaboy y Alejo Maldonado Gallardo

Desde entonces a la fecha diferentes intentos y propuestas han sido diseñadas para la unión en un solo sistema político y económico de los Estados de este subcontinente, cuyo nombre definitivo también ha sido objeto de controversias y modificaciones durante mucho tiempo y que, tras diversas y sucesivas denominaciones en el transcurrir de los siglos, ha terminado por conocerse como América Latina.

1. Prosa no ficcional – Fragmento de Historia del siglo XX, de Eric Hobsbawm

La tecnología revolucionó las artes haciéndolas omnipresentes. La radio, que ya había llevado los sonidos —palabras y música— a la mayoría de los hogares del mundo desarrollado, siguió su penetración por el mundo en vías de desarrollo. Pero lo que la universalizó fue el transistor, que la hizo pequeña y portátil, y las pilas eléctricas de larga duración, que la independizaron de las redes oficiales (es decir, urbanas) de energía eléctrica.

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