Motivación trascendente
La motivación trascendente es aquella que no radica tanto en la propia persona, sino que está más enfocada en el grupo o incluso en algo sobrenatural. Está muy relacionada con el entorno empresarial, ya que tiene como principal objetivo buscar los intereses que comparte un grupo.
En la motivación trascendente los intereses de uno misma pasan a un plano con menor valor dado que se priman las metas a conseguir por el grupo en general.
Se trata de una motivación muy relacionada también con los valores que tiene el propio individuo. Una persona que da un gran valor a la amistad o el trabajo en equipo, piensa siempre más allá de su propio beneficio y esa es la base de este tipo de motivación.
No solo en el ámbito empresarial, sino en otro tipo de ámbitos de la vida tiene cabida este tipo de motivación. Por ejemplo, acudir a consolar a un hijo por la noche cuando tiene miedo o pesadillas. Se piensa en su bienestar y no en el hecho de que no se dormirá demasiado esa noche con lo que conlleva para afrontar el día siguiente.
¿Cómo potenciar la motivación trascendente?
Como hemos señalado anteriormente, este tipo de motivación puede darse en distintos ámbitos de la vida. El ámbito empresarial sería uno de ellos.
Para que la motivación trascendente crezca, es importante tener en cuenta algunos factores y además potenciarlos. Estos son los más destacados:
- Compartir un objetivo anhelado por todos: Todos serán partícipes del resultado y si se consigue aquello que se desea, todos obtendrán beneficios o habrán alcanzado la meta deseada.
- Satisfacción personal: Las recompensas individuales deben alcanzar como máximo la satisfacción personal. Priman las que se alcanzan de manera conjunta.
- Liderazgo trascendente: El liderazgo debe ser motivo de ejemplo para todo el grupo. Alguien motivador que aporte positividad y potencie las habilidades del resto.
- Valores a respetar: Hay que determinar una serie de valores que se han de respetar y conocer por parte de todos los integrantes.
- El resultado común: El resultado debe ser la consecuencia de un esfuerzo común, algo anhelado por todos.
Ejemplo de motivación trascendente
Si te planteas como el líder de un equipo de trabajo hay que escoger un buen motivo para dar cohesión a ese equipo y fomentar su ilusión. Manifiesta los valores que se han de tener de forma conjunta, haz un seguimiento regular del proceso y potencia las habilidades de todos los integrantes.
Por ejemplo, la construcción de una protectora de animales de manera altruista. Puede unir a un grupo de personas con un objetivo muy claro que sería mejorar el bienestar y promover las adopciones de esos animales a corto plazo. La generosidad y el trabajo en equipo son parte de la motivación de todos aquellos integrantes que colaborarán en este proyecto.