Ingreso real
El ingreso real, o renta real, es la cantidad de bienes y servicios que una persona puede adquirir a través de su renta monetaria. El ingreso real muestra, por tanto, que bienes pueden adquirirse con la renta monetaria.
El ingreso real, por tanto, depende de cómo que se comporte la renta monetaria y el precio de los productos o la inflación. En este sentido, si la renta monetaria sube, pero los precios permanecen constantes o descienden, estaríamos hablando de que el ingreso real es mayor. Por el contrario, si suben los precios, pero la renta monetaria permanece constante, podremos adquirir menos bienes y, por tanto, nuestro ingreso real se reduce.
Lo contrario al ingreso real es el ingreso nominal.
El ingreso real, de esta forma, contempla los factores económicos que inciden en nuestro poder adquisitivo.
Diferencia entre ingreso real e ingreso nominal
Ingreso real, como decíamos, es justamente lo contrario a ingreso nominal. Estos se basan en lo mismo, en el ingreso. Pero en su medición, uno incluye aspectos que, en cierta forma, condicionan el ingreso a determinados factores que ahora veremos.
Por un lado, el ingreso real es, como decíamos, la cantidad de bienes y servicios que una persona puede adquirir con su renta monetaria. Es decir, el poder adquisitivo de la persona, al condicionar dicho ingreso a la inflación y otros factores que inciden en dicho poder.
Mientras que, por otro lado, el ingreso nominal es el flujo de renta, pero que no sufre ningún ajuste condicionado por factores como inflación, deflación, así como otra serie de factores. Este, a grosso modo, mide la cantidad de renta en unidades monetarias.
Otro factor que debe tenerse en cuenta, aunque no lo hemos citado, es la carga impositiva. Es decir, los impuestos. Si bien es cierto, que su ajuste depende de los conceptos de bruto y neto.
Ejemplo de ingreso real
Imaginemos que percibimos un salario de 3.000 dólares.
Una vez descontados los impuestos, dicho salario se reduciría hasta los 2.100 dólares.
Imaginemos que vamos a comer diariamente a un restaurante, con un menú de 25 dólares.
Debido a la inflación, dicho restaurante eleva el precio del menú a 28 dólares.
Aunque el ingreso nominal se mantiene constante, nuestro poder adquisitivo, al incrementarse el precio, se reduce. Esto se debe a que, con los mismos recursos, podremos ir menos veces a comer que, previamente, cuando el menú costaba 25 dólares.
Por tanto, diríamos que nuestro ingreso real se reduce.