Halcón monetario

En otras palabras, el halcón monetario es un término muy utilizado en Estados Unidos, y hace referencia a la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal. En función de la política económica por la que apueste el gobernador, estaremos ante un halcón o una paloma.

Es decir, si apuesta por una política cuya prioridad sea una inflación baja. Una política restrictiva que apueste por la normalización de la política monetaria y, por ende, por la contención de la inflación, estamos ante un halcón o halcón monetario.

Si por el contrario, estamos ante un gobernador que apuesta por políticas acomodaticias. Políticas que persiguen, quizá, una menor tasa de desempleo, restándole importancia al comportamiento de la inflación. En otras palabras, un gobernador que apuesta por políticas expansivas, estamos ante una paloma o una paloma monetaria.

La principal diferencia, como digo, se encuentra en que el halcón apuesta por una política económica más estricta, que se centra en contener la inflación. Mientras que, por otro lado, tenemos la paloma, que apuesta por una política acomodaticia, la cual promueve otros objetivos más allá de contener las presiones inflacionarias.

Hay que decir que hay banqueros centrales que han sido denominados halcón y paloma simultáneamente. Es decir, que apostaban por unas políticas para una cosa y, para otra cosa, apostaban por unas políticas totalmente opuestas. A estos se les denomina «pigeon» o «centristas», pues se posicionan en ambos lados.

El origen del concepto «halcón monetario» se encuentra en Estados Unidos.

En el país estadounidense, este concepto se utiliza para hacer referencia a la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal (FED). Pues tienen gran influencia en la política monetaria de los Estados Unidos. Asimismo, los propios gobernadores de la FED, así como los miembros del Comité Federal del Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) también pueden recibir dicho calificativo.

No obstante, con el paso del tiempo, este término comenzó a extenderse, así como a sonar en otros lugares del planeta.

Entre estos, Reino Unido, por ejemplo, comenzó a utilizar dicho término.

En el mundo económico, se ha comenzado a denominar «halcón monetario» o «paloma monetaria» a todo aquel gobernador de cualquier banco central en el mundo que apostaba, en el caso de los halcones, por políticas económicas más restrictivas. Mientras que, en el caso de las palomas, a todo aquel gobernador que apostaba por políticas más expansivas y acomodaticias.

Dicho lo cual, el halcón es aquel gobernador que, tratando de contener la inflación, aboga por políticas restrictivas. El halcón, además, suele proyectar mayor inflación futura. Por lo tanto, percibe una mayor presión inflacionaria y una mayor necesidad de políticas monetarias más restrictivas.

La paloma, por su parte, tiende a predecir una inflación futura baja. Por ello, aboga por políticas monetarias expansivas. Para las palomas, la expansión cuantitativa, por ejemplo, es beneficiosa. Para los halcones, sin embargo, distorsiona el valor de los activos en el mercado.

No obstante, muchos son los que se han opuesto a estos calificativos, ya que carecen, para ellos, de objetividad.

En este sentido, numerosos economistas definen estos calificativos como simplistas, ya que muchos gobernadores de distintos bancos centrales han sido definidos como «halcones» y como «palomas» en distintas épocas. Janet Yellen es un buen ejemplo, pues ha sido calificada como «halcón» y como «paloma».

De la misma forma, otros economistas opinan que los calificativos no son objetivos, pues no tienen en cuenta el punto de vista del que emite dicho calificativo. En este sentido, un buen ejemplo es Mario Draghi, el ex gobernador del Banco Central Europeo (BCE). Dicho gobernador ha sido calificado como «halcón» y como «neoliberal» por facciones radicales de la izquierda. Mientras que ha sido duramente criticado por su política acomodaticia extendida tras la Gran Recesión de 2008.