Análisis chartista
El análisis chartista es la rama del análisis técnico que estudia los patrones que se forman en las cotizaciones bursátiles. La palabra chartista es un anglicismo proveniente de la palabra chart, que significa gráfico.
El análisis chartista nació hacia el año 1930 de la mano de Dow Jones. La primera teoría chartista que existía y que, de hecho, se estudia es la teoría de Dow. Desde que naciera han ido proliferando las investigaciones en este campo. Más tarde, gracias a la tecnología, aparecieron en escena los indicadores técnicos.
Las figuras chartistas, junto con los indicadores bursátiles forman el análisis técnico.
Principales figuras chartistas
Las figuras chartistas se pueden clasificar con base en dos criterios. Primero, según sus implicaciones. Y segundo, según su complejidad. Según su implicación dependiendo de si el patrón indica el final de la tendencia, continuación o no necesariamente alguna de las anteriores. Y según su complejidad si el patrón está formado en pocos periodos o en muchos periodos. Esta última clasificación diferencia a los patrones que se expondrán a continuación y a los patrones de velas japonesas.
Figuras de agotamiento de tendencia
Son figuras que indican una posible finalización de la tendencia en curso y, por tanto, el comienzo de la tendencia contraria.
Figuras de continuación de tendencia
Son patrones que señalan que lo más probable es la continuación de la tendencia actual.
- Bandera.
- Banderín.
- Pauta plana.
- Zigzag.
- Triángulo.
- Rectángulo.
Otras formaciones
Son patrones que no necesariamente tienen una implicación.
Análisis chartista vs indicadores técnicos
El análisis chartista y los indicadores técnicos, forman lo que se conoce como análisis técnico. No se puede decir que un tipo de análisis sea mejor que otro. Ambos tipos de análisis son válidos. Según las características de cada trader será más recomendable uno u otro.
En cualquier caso, es más fácil comprobar si un sistema de trading funciona, en el caso en que se utilicen indicadores técnicos. Esto es así, porque los indicadores técnicos constituyen la parte cuantitativa del análisis técnico. Por decirlo de alguna manera, el análisis chartista es más subjetivo y los indicadores técnicos más objetivos. Lo cual no quita que los indicadores técnicos presenten también problemas de subjetividad a la hora de interpretarlos. De hecho, algunos indicadores técnicos se contradicen entre sí en determinados momentos.
Sin embargo, no son incompatibles. Tanto es así, que algunos analistas utilizan indicadores técnicos para confirmar patrones chartistas. Y al revés, otros utilizan las figuras chartistas para confirmar los patrones dibujados por los indicadores técnicos.