Definición de rueda de prensa
Rueda, que procede del latín rota, es un concepto con varios usos. En este caso nos interesa destacar su acepción como un círculo o una reunión de individuos. Prensa, por su parte, puede referirse al conjunto de los periodistas o de publicaciones.
La idea de rueda de prensa refiere a la convocatoria que realiza una entidad o una personalidad para reunir a los periodistas y comunicarles alguna información. Este tipo de evento, también conocido como conferencia de prensa, consiste en invitar a los medios de comunicación a un mismo espacio para que todos tengan acceso simultáneo a ciertos datos y luego puedan reproducirlos en los diarios, revistas, programas de televisión, emisiones radiales o sitios de Internet.
Algunos gobiernos tienen la costumbre de organizar ruedas de prensa de manera periódica y sistematizada. De este modo, por ejemplo, un presidente puede comprometerse a brindar una rueda de prensa todos los lunes a las 9 de la mañana en un salón de la Casa de Gobierno. Por lo general, las ruedas de prensa comienzan con algunas palabras del protagonista, quien anuncia aquello que quería difundir, y luego se procede a un espacio de preguntas por parte de los periodistas.
Pese a que la rueda de prensa es un mecanismo útil para comunicar información a la sociedad, los periodistas no siempre cuentan con la posibilidad de preguntar con libertad. Ocurre con frecuencia que el protagonista escoja a qué periodistas darles la oportunidad de participar, dejando a otros afuera. Incluso hay ruedas de prensa que no contemplan las preguntas, convirtiéndose en monólogos.
La imagen de una corporación o de una persona pública es de suma importancia, por lo cual toda actividad que pueda afectarla debe estar respaldada por un trabajo de investigación previo que derive en un plan de acción bien definido. Las ruedas de prensa no son la excepción, y por eso existen empresas dedicadas específicamente a ofrecer asesoramiento para llevarlas a cabo con éxito. Veamos a continuación algunos consejos útiles:
* realizar una rueda de prensa solamente en los casos en los que se considere la mejor estrategia para conseguir los objetivos planteados. Existen otras herramientas similares que pueden resultar más adecuadas, como ser los seminarios, las notas de prensa, las presentaciones corporativas y los almuerzos informativos;
* debe estar pensada como un canal para evacuar dudas específicas del público y para ofrecerle información que le resulte relevante. Nunca se debe dar una rueda de prensa con el único objetivo de brindar un comunicado, sea o no de interés para los periodistas, ya que esto puede ser tomado como una pérdida de tiempo y repercutir negativamente en la credibilidad de quien la organiza;
* en el caso de las empresas, deben estar dispuestas a compartir datos numéricos específicos a los presentes, así como novedades con respecto a sus productos y servicios. No es beneficioso limitarse a exponer porcentajes, ya que esto puede generar dudas acerca de la situación financiera;
* dejar que los datos hablen por sí mismos. En otras palabras, una rueda de prensa no es el espacio para decir «somos los líderes del mercado», sino para ofrecer a los periodistas determinada información y darles la oportunidad de analizarla para sacar sus propias conclusiones;
* evitar por todos los medios el vocabulario técnico o de difícil comprensión por el público no especializado, así como los mensajes demasiado extensos. Si no es posible reemplazar un término técnico, entonces se debe aclarar su significado de forma inmediata;
* es importante acompañar los datos de presentaciones gráficas con un estilo directo y fácil de leer. Además, se recomienda entregar una copia física o digital de las mismas al finalizar el evento;
* quizás el consejo más importante de todos es escoger al portavoz adecuado.