Definición de quimiosíntesis
La quimiosíntesis es el nombre que recibe un método de producción energética que realizan diversos organismos vivientes. El mecanismo se desarrolla mediante la síntesis de trifosfato de adenosina (ATP), luego de la liberación de energía que se produce mediante las reacciones de oxidación que llevan a cabo ciertos compuestos inorgánicos.
En otras palabras: una reacción química inorgánica de oxidación libera energía que se aprovecha en forma de trifosfato de adenosina. Ese aprovechamiento se conoce como quimiosíntesis.
El organismo que realiza quimiosíntesis toma la energía que se halla en ciertos alimentos. Para esto, bombea átomos de hidrógeno mediante las membranas de las células, algo que provoca una diferencia en la concentración existente. Una vez terminada la acción, los átomos de hidrógeno regresan y liberan la energía que se emplea para sintetizar el ATP.
Aquellos organismos que están en condiciones de desarrollar quimiosíntesis reciben el calificativo de quimiosintéticos o quimioautótrofos. Los mismos tienen la capacidad de tomar dióxido de carbono para obtener carbono, de una manera similar a lo que hacen las plantas.
Hay bacterias que viven en el fondo del mar y que apelan a la quimiosíntesis para obtener energía. Debido a que en el mundo submarino no llegan los rayos del sol, resulta imposible que estas bacterias produzcan energía a través de la fotosíntesis: la quimiosíntesis, por lo tanto, les permite generar sus reservas energéticas.
Al igual con la fotosíntesis, la quimiosíntesis presenta dos fases muy distintas: en una se produce poder reductor (la capacidad que tienen algunas biomoléculas de actuar como receptoras de protones o donadoras de electrones en ciertas reacciones matabólicas) y ATP (activador tisular del plasminógeno, una proteína ligada al proceso de disolución de coágulos de sangre); en la otra, se lleva a cabo la fijación del dióxido de carbono.
Cuando un organismo autótrofo alcanza la quimiosíntesis, se espera que los quimiosintéticos muestren cierta atracción a las moléculas inorgánicas reducidas que se hallan en el medio, siendo las más importantes el H2S (sulfuro de hidrógeno), el H2 (hidrógeno), el Fe2+ (hierro ferroso), el S2O (tiosulfato) y el S (azufre elemental). Los electrones que han sido extraídos de dichos sustratos entran en una cadena que los transporta, de modo similar a la respiración aeróbica (la cual consiste en extraer energía de moléculas orgánicas).
A raíz de las características de la quimiosíntesis, muchos científicos creen que este mecanismo de producción de energía puede desarrollarse en otros planetas, lo que abre la posibilidad de la existencia de vida extraterrestre.
Tipos de bacterias quimiosintéticas
Las bacterias pueden clasificarse en diversos grupos, de acuerdo con el sustrato que utilizan, como puede apreciarse a continuación:
* incoloras del azufre: estas bacterias son capaces de oxidar azufre o compuestos en los cuales se halle azufre. Pueden transformar el H2S (ácido sulfhídrico) que procede de descomponer la materia orgánica, que es abundante en las aguas llamadas residuales (toda clase de agua que haya sufrido un descenso de calidad a causa de la influencia antropogénica, o sea, como resultado del accionar del ser humano);
* del nitrógeno: este tipo de bacteria tiene la habilidad de oxidar compuestos reducidos de nitrógeno procedentes de la descomposición de restos vegetales y cadáveres de animales, como ser el NH3 (amoníaco), los cuales luego puede transformar en NO3- (nitratos). Las plantas pueden asimilar dichos nitratos luego de la transformación;
* del hierro: a través de la oxidación, pueden dar compuestos férricos a partir de ferrosos. En otras palabras, estas bacterias son capaces de transformar en yacimientos de óxidos de hierro los depósitos minerales de carbonatos de hierro;
* del hidrógeno: son capaces de usar el hidrógeno molecular y se consideran quimioautótrofas facultativas.