Definición de pedestre
Pedestre es un término que proviene del vocablo latino pedestris. Este adjetivo permite nombrar a aquello que se desarrolla a pie o a la persona que se moviliza caminando. Por ejemplo: “Más de doscientas personas se inscribieron para participar de la tradicional competencia pedestre”, “Por decisión del intendente socialista, este pueblo se convirtió en una localidad pedestre hace dos años”, “La carrera pedestre fue ganada por un atleta africano”.
Las calles pedestres se conocen como peatonales. Estos caminos son pensados para que la gente circule a pie, es decir, sin utilizar vehículos como automóviles o motocicletas. Al fomentar la circulación pedestre, las autoridades impulsan a la población a realizar actividad física y consiguen minimizar las emisiones contaminantes, algo positivo para el medio ambiente.
Lo habitual es que este adjetivo, de todos modos, se emplee para calificar a las competiciones deportivas cuyo desarrollo implica caminar, trotar o correr. En este contexto, puede hablarse no sólo de “carrera pedestre”, “prueba pedestre” o “competencia pedestre”, sino también de “circuito pedestre” o “pista pedestre”.
Las carreras pedestres, por ejemplo, no sólo se utilizan con fines deportivos: así como muchas otras actividades al aire libre, tales como el ciclismo, los recitales, las tómbolas y las ferias, pueden cumplir el objetivo de congregar grandes grupos de personas en torno a una causa humanitaria. Cuando la finalidad de una carrera no es llegar primero sino aumentar la visibilidad de un problema para conseguir ayuda masiva, pueden participar todos aquellos que quieran colaborar, incluso individuos con movilidad reducida.
El deporte conocido como atletismo reúne un amplio grupo de disciplinas que se agrupan en lanzamientos, saltos, pruebas combinadas, marcha y carreras. Se trata de un arte de superación de la resistencia o la velocidad de los contrincantes, así como de la altura o la distancia que hayan conseguido en una determinada competencia. Si bien el público puede relacionarse fácilmente con las actividades pedestres al presenciar un evento de este tipo, el nivel de entrenamiento necesario para dichas pruebas está muy por encima de las rutinas para mantenerse en forma de la mayoría de la gente, ya que se enfoca en llevar el rendimiento al máximo y no en quemar grasas, por ejemplo.
Este deporte tuvo su origen en la Antigüedad y tanto los tecnicismos como los reglamentos han ido evolucionando a través de los siglos. Una de las primeras carreras pedestres de las cuales se tiene referencia pertenece al siglo XV a. C. en Egipto, tal como se dejó por escrito en la tumba de Amenofis II (el séptimo faraón de la Dinastía XVIII, quien falleció en el año 1424 a. C.). Entonces también se practicaba el lanzamiento de disco y de jabalina en la isla de Creta.
Por su parte, los griegos también dejaron constancia de una de las primeras carreras pedestres de la historia; se denominaba stadion y consistía en superar una distancia que equivalía a multiplicar el pie de Hércules por 200 (más precisamente, 197,27 metros). Las referencias más antiguas de esta prueba datan del siglo VIII a. C., aunque se cree que existía desde tiempos más remotos. Más tarde surgieron el duálico (también llamado doble stadion), la carrera de fondo y la de medio fondo, todas pruebas que basaban su extensión en múltiplos de 197,27 metros.
La noción de pedestre, por otra parte, puede emplearse para denominar a las cosas que resultan mundanas, ramplonas, groseras o rústicas. Lo pedestre, en este sentido, se opone a lo que tiene vuelo (simbólicamente) o es complejo: “No se puede tomar una decisión tan importante en base a un razonamiento pedestre”, “El sitio web del proyecto es interesante, pero su diseño es bastante pedestre”, “Los argumentos pedestres no me conmueven: quiero escuchar teorías con algún tipo de sustento para convencerme”.