Definición de péndulo
El término péndulo tiene su origen etimológico en pendulus, un vocablo del latín que puede traducirse como “pendiente”. Un péndulo es un objeto que oscila, colgado de otro. Por ejemplo: “El movimiento del péndulo logró tranquilizarme y finalmente pude dormirme”, “Cuando el hilo se cortó, el péndulo cayó pesadamente contra el suelo y se rompió en mil pedazos”, “Me agrada el sonido de los relojes de péndulo”.
Como sistema de la física, un péndulo implica la oscilación de un cuerpo gracias a ciertas características y la acción de distintas fuerzas. De acuerdo a la oscilación, un péndulo puede servir para realizar una medición del tiempo o de otras cuestiones.
Un reloj de péndulo, por lo tanto, es aquel que utiliza un péndulo para medir el paso del tiempo. Dicha oscilación es constante gracias a la longitud del péndulo, mientras que el reloj en sí no debe moverse para que no pierda exactitud. Por lo general, el reloj de péndulo cuenta con un mecanismo que le permite emitir un sonido cada una hora u otro lapso temporal.
Los metrónomos también son dispositivos que pueden apelar a un péndulo para medir el tiempo de una obra musical. Gracias a que emite ciertas señales (ya sea sonoras o de otro tipo), un músico puede seguir el péndulo del metrónomo para conservar un mismo ritmo en la ejecución de una melodía.
Varios péndulos llevan el nombre del científico que lo diseñó con un objetivo o fin, o del pensador al que se homenajea con su construcción. En este sentido puede hablarse del péndulo de Newton (con cinco bolas que actúan como péndulos para demostrar cómo se conserva la energía), el péndulo de Charpy (que busca mostrar la tenacidad de algo) o el péndulo de Foucault (de forma esférica, oscila con libertad en un plano de tipo de vertical).
Péndulo de Newton
También conocido como cuna de Newton, se trata de un dispositivo que tiene por objetivo demostrar que la cantidad de movimiento y la energía pueden ser conservadas. Lo conforman un grupo de bolas (por lo general, son cinco), cada una sostenida por dos hilos que se aferran a un marco que hace de sostén. Las bolas deben estar perfectamente alineadas en el eje horizontal y hacer contacto con la o las adyacentes cuando no están en movimiento.
Dado que los hilos forman dos ángulos idénticos si observamos las esferas desde una perspectiva en la cual éstos salgan hacia los lados, el movimiento queda restringido a un solo eje (que podría describirse como hacia adelante y hacia atrás). Para ponerlo en funcionamiento, basta con tomar una de las dos bolas que se encuentran en los extremos, alejarla unos centímetros de su adyacente y soltarla para que comience el movimiento.
Péndulo de Foucault
Se trata de un péndulo esférico capaz de oscilar con libertad durante varias horas sobre cualquier plano vertical y sirve como demostración de la rotación de nuestro planeta. Recibió este nombre en honor a su creador, Léon Foucault, un físico oriundo de Francia que vivió entre los años 1819 y 1868.
El péndulo de Foucault consiste en una pesada esfera (algunos ejemplares superan los varios cientos de kilogramos) unida a un extenso hilo de metal. La teoría es que el plano de oscilación se va alterando de acuerdo con la rotación de la Tierra, de manera que se puede observar una modificación constante en su trayectoria como resultado de dicho fenómeno. Mientras que en algunas partes del mundo su giro completo puede superar las 50 horas, en los polos tarda exactamente 24.
Péndulo de Charpy
Este péndulo disfruta de menos popularidad que los dos anteriores, aunque eso no refleje en absoluto la genialidad detrás de su creación. Se trata de un dispositivo usado para determinar la tenacidad de los materiales, o sea, cuánta energía absorben antes de romperse. Consta de un péndulo que se deja caer sobre una probeta para partirla; los valores de altura inicial y final son utilizados para calcular dicho valor de energía absorbida.