Definición de melanina
La melanina es un pigmento que determinadas células de los animales vertebrados presentan en el citoplasma. Esta sustancia, que aparece en gránulos, tiene un tono negruzco y le confiere el color al cabello, la piel y otras partes del cuerpo.
La melanogénesis es el proceso de producción de melanina. Dicha acción se lleva a cabo en el folículo pilosebáceo y en la epidermis como una respuesta a la radiación ultravioleta que afecta al ADN.
La melanina, en este marco, se encarga de absorber la radiación ultravioleta que resulta dañina y la transforma en calor (inofensivo). Así disipa casi la totalidad de esta radiación.
La melamina se presenta en dos tipos:
* eumelaminas: contienen azufre y su color es pardo o negro, por lo que brindan una coloración oscura. Son las más comunes;
* feomelaminas: la coloración que proporcionan es clara y aportan más azufre que las anteriores. Su color es rojizo o amarillo.
Cuando nos exponemos al sol, por lo tanto, la melamina nos protege con mayor o menor eficacia, dependiendo del individuo. La eumelanina actúa mejor que la feomelanina en estos casos. El bronceado, tan buscado por las personas de tez clara en las épocas de calor, no es otra cosa que un mecanismo de defensa de nuestra piel, una pigmentación que resulta de la adaptación a los rayos del sol y que tiene lugar gracias a la presencia de melamina en el organismo.
Dicho de otra manera, a mayor pigmentación en la piel, mayor protección contra los efectos dañinos de la luz solar. La capacidad de asimilar las radiaciones del sol se conoce como fototipo, y se divide en cinco grados según las consecuencias de la exposición solar, que van desde el bronceado hasta las quemaduras:
* fototipo I: en este grupo se encuentran las pieles que jamás pueden broncearse, y que se queman con facilidad;
* fototipo II: estas pieles tienen dificultad para broncearse, aunque pueden conseguirlo. Sin embargo, también se queman;
* fototipo III: pueden llegar a quemarse, aunque no siempre. Luego de un tiempo de exposición a los rayos del sol, se broncean;
* fototipo IV: nunca se queman y pueden broncearse sin problemas;
* fototipo V: la pigmentación constitucional es moderada;
* fototipo VI: la pigmentación constitucional es intensa. Se trata de las pieles negras.
Según las características genéticas, los seres humanos presentan un menor o un mayor nivel de melanina en la piel. El trastorno genético que causa la ausencia o la reducción de este pigmento recibe el nombre de albinismo.
Los albinos, por lo tanto, carecen de melanina o albergan una cantidad acotada de esta sustancia en su organismo. Esta condición afecta a personas y a animales.
Con el paso de los años, la pérdida de melanina es natural en todos los individuos. Cuando el pelo carece de pigmentación, por ejemplo, se torna blanco o gris y se convierte en una cana.
Al perder melanina, de este modo, el sujeto se vuelve canoso. Para retrasar este proceso, es posible seguir una dieta que, gracias a los nutrientes y las vitaminas, fomente la producción del pigmento. Las verduras, la calabaza, la zanahoria y las cerezas son algunos de los alimentos que, de acuerdo a los expertos, contribuyen a la elaboración de melanina.
En este marco, existen tres sustancias que, según los expertos, promueven la producción de melanina en nuestro organismo. En primer lugar tenemos los carotenoides, pigmentos que contienen todas las plantas verdes. El betacaroteno, por su parte, es el más buscado ya que puede proteger la piel del enrojecimiento y los eritemas causados por la exposición solar. Finalmente tenemos el antioxidante llamado licopeno, que cuando se combina con el betacaroteno potencia su absorción.