Definición de geobotánica
La geobotánica es la disciplina que examina el vínculo entre la vegetación y la superficie terrestre. También conocida como geografía vegetal o fitogeografía, se encarga de investigar la distribución y el hábitat de las plantas en el planeta.
Descripción e interpretación de especies
Los expertos en geobotánica se dedican a describir e interpretar los distintos modos de distribución de las especies vegetales en el tiempo y en el espacio. En su trabajo tienen en cuenta los factores que condicionan dicha distribución.
La geobotánica describe la distribución de los vegetales en espacio y tiempo
Lo que hace la geobotánica, en definitiva, es estudiar cómo se desarrolla la vida de los vegetales en función del medio terrestre. Esta labor tiene múltiples alcances y resulta muy importante para el ser humano.
Con la geobotánica es posible propiciar un uso sostenible del suelo, aprovechándolo al máximo pero sin descuidar su conservación. Este campo del saber además permite encarar tareas de restauración y recuperación en caso de ser necesario.
Objetivos principales
A nivel más específico, debemos señalar que la geobotánica tiene como metas fundamentales el estudio de los siguientes puntos:
* estructura, composición y distribución en el espacio de la vegetación, ya sea con respecto a la cantidad como a la calidad;
* como parte de la geobotánica funcional, la productividad, los ciclos denominados biogeoquímicos y la función;
* los aspectos mesológicos, entre los que se cuentan el suelo y el clima;
* la ontogenia y la sucesión.
Relación con otras disciplinas
En primer lugar, podemos mencionar algunas de las disciplinas con las que la geobotánica se integra desde hace mucho tiempo. Entre ellas destacan la biogeografía, la bioestadística, la botánica, la edafología, la ecología, la geología, la geografía física y la geografía humana. La lista es más extensa y se enriquece con el paso del tiempo, así como también puede sufrir modificaciones si algunas de estas disciplinas dejan de existir o se fusionan con otras.
También es correcto decir que algunos campos del conocimiento aprovechan la geobotánica para aplicarla de manera práctica en sus procedimientos e investigaciones. Aquí estamos ante la praticultura, la agricultura, la silvicultura, la valoración del patrimonio de la naturaleza, la batalla contra la erosión y la ordenación territorial.
Mapa de vegetación
Se denomina de esta manera a una herramienta fundamental para la investigación científica y el trabajo técnico, ya que es una fuente documentada muy detallada. Entre los requisitos para este tipo de cartografía se encuentran la especificación de las limitaciones en el ámbito técnico, las ideas dominantes y los métodos que corresponden a cada época y que hayan limitado su realización.
Gracias a los mapas de vegetación que realiza la geobotánica, por ejemplo, se puede contar con información clave para administrar un territorio bajo criterios racionales. La geobotánica también ayuda a conocer la reacción de las plantas ante las características del medio ambiente.
Los mapas de vegetación son claves para la administración racional de territorios
Es importante señalar que cada mapa de vegetación depende de diferentes factores; destacan los objetivos de su autor y los elementos que haya decidido incluir, como ser la escala y la leyenda. De este modo, no es fácil encontrar dos iguales. Sin embargo, con los avances tecnológicos de las últimas décadas, gran parte de los procedimientos se ha automatizado, de manera que dichas diferencias se han diluido en pos de una mayor precisión en el reflejo de la realidad.
Como adjetivo
Cabe destacar que el concepto de geobotánica (o geobotánico) incluso puede emplearse para aludir a aquello relacionado con las plantas y el medio terrestre. Una ruta geobotánica, en este sentido, es un recorrido que sirve para apreciar cómo la vegetación se distribuye y crece en una zona determinada. Una reserva geobotánica, por otro lado, es un espacio dedicado a la protección de las plantas de una región geográfica específica.