Definición de formación
El concepto de formación proviene de la palabra latina formatio. Se trata de un término asociado al verbo formar (otorgar forma a alguna cosa, concertar un todo a partir de la integración de sus partes). La formación también se refiere a la forma como aspecto o características externas (“Es un animal de excelente formación”) y a la acumulación de piedras o minerales que comparten ciertos rasgos en su geología.
En el ámbito militar, por otra parte, la formación es una agrupación de las tropas por algún motivo: «La formación enemiga avanza hacia el norte». Un uso similar recibe en los deportes, ya que indica quiénes participarán de un partido y qué puesto ocupará cada jugador.
Muchas empresas apuestan por la formación continua de sus empleados.
La formación como capacitación
Actualmente, la noción de formación suele ser asociada a la capacitación, sobre todo a nivel profesional. La formación de una persona, por lo tanto, está vinculada a los estudios que cursó, al grado académico alcanzado y al aprendizaje que completó, ya sea a nivel formal o informal.
Parte de esta educación suele ser obligatoria en muchos países y en general comprende los conocimientos necesarios para desenvolverse en la vida adulta, sea para trabajar como para afrontar la compra de una casa y el mantenimiento de la misma.
La importancia de especializarse
En los últimos años, dado el aumento del índice de desempleo en varias partes del mundo, han surgido diversos centros que ofrecen formación específicamente orientada al desempeño de oficios. La titulación que ofrecen suele ubicarse en el rango de la diplomatura, aunque algunos cursos, sobre todo los informáticos, alcanzan la licenciatura. Dado que el carácter de muchas de estas carreras es terciario, tienen como requisito mínimo haber completado los estudios secundarios.
Algunas oraciones de ejemplo, en las que podemos apreciar diferentes acepciones de la palabra: «La formación de las nubes se produce por la acumulación del vapor de agua», «El entrenador todavía no comunicó la formación del equipo», «Tenemos que contratar a un ejecutivo de buena formación para que nos ayude a sacar adelante esta empresa».
La formación es imprescindible a nivel profesional.
Internet y las alternativas a la formación tradicional
Aunque los medios de comunicación siguen presentando la universidad como el objetivo más alto a nivel educativo, muchos de los profesionales que han revolucionado la tecnología, por ejemplo, así como figuras de todas las disciplinas admiradas por millones de personas alrededor del mundo han escogido un modo de formación cada vez más popular, gracias a internet: el autoaprendizaje. Programadores, apasionados de los idiomas, del diseño, modeladores 3D, escritores, todos ellos pueden encontrar suficiente material en línea como para estudiar y llegar a hacer grandes cosas, sea que busquen conseguir un muy buen trabajo o que se inclinen por la investigación y el desarrollo.
Asimismo, internet ofrece posibilidades jamás soñadas hace unos años, como ser la formación a distancia. Popular sobre todo para el aprendizaje de idiomas, esta modalidad de estudio requiere de una conexión medianamente veloz, por lo que un gran porcentaje de la población puede acceder a ella. La ventaja principal, más allá de la comodidad de no necesitar trasladarse a un instituto y de la reducción de las tarifas, reside en el hecho de poder escoger entre un mayor número de maestros. En el caso de las lenguas, por ejemplo, acceder a una tutoría con una persona con nivel nativo del idioma es un beneficio invaluable.
Más allá de lo académico
Dentro de los tipos de formación que no incluyen la escolaridad, debemos tomar en cuenta los conocimientos que se adquieren con la práctica, a partir de la experiencia laboral. En este sentido, una persona que trabajó durante quince años en un taller mecánico muy probablemente esté preparado para resolver problemas en un automóvil, aún cuando no tenga un título o un grado que lo acredite.
Más aún, no existe curso universitario que brinde a sus estudiantes los conocimientos y la práctica necesarios para enfrentarse al mundo profesional. Es siempre necesario complementar lo aprendido con la experiencia, sobre todo en materias relacionadas con la ciencia y la tecnología.