Definición de exuberante
Antes de conocer el significado del término exuberante, vamos a proceder a descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos exponer que se trata de una palabra que deriva del latín, exactamente de “exuberans”, que es fruto de la suma de dos componentes léxicos:
-El prefijo “ex-”, que significa “hacia fuera”.
-El verbo “uberare”, que es sinónimo de “ser rico” o “ser fértil”.
El adjetivo exuberante permite calificar a aquello que es excesivo, profuso o cuantioso. El término puede usarse en distintos contextos.
Además de las palabras expuestas, hay otros sinónimos de exuberante, entre los que podemos destacar abundante, pleno, pletórico, fecundo, copioso, rico o espléndido. Por el contrario, entre sus antónimos están escaso, estéril, desvalido, pelado o pordiosero.
Muchas veces la idea de exuberante se asocia a la vegetación abundante y fecunda. Una “selva exuberante”, en este marco, es aquella que presenta una gran cantidad y variedad de especies vegetales. La selva amazónica, por ejemplo, es exuberante: se trata del bosque tropical de mayor extensión del planeta, con unos seis millones de kilómetros cuadrados que sobresalen por su biodiversidad.
También suele hablarse de “naturaleza exuberante” si un lugar tiene muchos recursos y atractivos naturales. Una provincia con lagos, ríos, montañas y bosques, donde crecen plantas de todo tipo y habitan numerosos animales, se destaca por su “naturaleza exuberante”.
Exuberante también es una calificación que se dedica a la mujer cuya silueta tiene curvas pronunciadas. En los medios de comunicación, suele indicarse que ciertas actrices, modelos, cantantes o celebridades son exuberantes cuando son voluptuosas y se muestran sensuales: “La exuberante actriz anunció que, en la próxima temporada de verano, protagonizará una obra teatral”, “El futbolista se mostró en la fiesta con una joven exuberante que encandiló a los presentes con su belleza”, “La exuberante cantante europea brilló sobre el escenario”.
Otro uso de exuberante se relaciona con los precios de los productos. Si alguien afirma que desistió de la compra de una camisa por su “precio exuberante”, estará haciendo referencia a que el valor le pareció exagerado. Lo mismo puede indicar un turista que optó por no alojarse en un cierto hotel ya que la tarifa de la habitación le resultó demasiado elevada.
Dentro del ámbito cultural tenemos que destacar la utilización del término que nos ocupa para darle forma a títulos de distintos tipos de obras. Así, por ejemplo, nos encontramos con el libro “La mirada exuberante: barroco novomundista y literatura latinoamericana”, que está escrito por Lois Parkinson Zamora y que obtuvo el premio Book of the Year 2006.
Se trata de un trabajo que viene a realizar un repaso por los cambios y transformaciones que sufrió el Barroco en América Latina y cómo se fue adaptando al siglo XX.
De la misma manera, también se puede utilizar para hacer mención a que un escritor cuenta con una innegable calidad literaria. Así, por ejemplo, se puede decir que “Gabriel García Márquez cuenta con una narrativa exuberante” o que “El autor granadino Federico García Lorca nos ha legado obras realmente exuberantes como La casa de Bernarda Alba”.