Definición de epitafio
Antes de entrar de lleno en el significado del término epitafio, vamos a proceder a descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos establecer que deriva del griego, exactamente de “epitaphius”, que es fruto de la suma de los siguientes componentes léxicos:
-El prefijo “epi”, que significa “sobre”.
-El sustantivo “taphos”, que puede traducirse como “tumba”.
La noción de epitafio alude a la inscripción que se coloca junto a una tumba, lápida o sepulcro. Por lo general se trata de un texto breve elegido por el difunto o seleccionado por sus seres queridos.
En un primer momento el concepto se refería a los versos que se recitaban durante las exequias. Con el tiempo, pasó a asociarse a la inscripción mencionada. El epitafio incluye ciertos datos generales sobre el fallecido, como su nombre completo, su fecha de nacimiento y el día de su deceso. Luego pueden añadirse versos o líneas de texto que le rinden homenaje o que invitan a algún tipo de reflexión.
Frank Sinatra, por ejemplo, eligió para su epitafio un lema que posiblemente resuma cuál fue su filosofía de vida o que pretende motivar a quienes se acercan a visitar su tumba: “The best is yet to come”, una expresión que puede traducirse como “Lo mejor está por llegar”.
Otro epitafio que se volvió popular es el de Mel Blanc, actor de doblaje que aportó su voz a personajes animados de Hanna-Barbera y Warner Bros como Bugs Bunny, Porky y el Pato Lucas. “That’s all, folks”, es decir “Eso es todo, amigos”, es la inscripción que se lee junto a sus restos mortales, la misma que aparece al final de las caricaturas.
De la misma manera, hay otros muchos epitafios de personajes famosos que han conseguido llamar la atención poderosamente:
-El que está en la tumba de William Shakespeare dice así: “Buen amigo, por Jesús, abstente de cavar el polvo aquí encerrado. Bendito sea el hombre que respete estas piedras y maldito el que remueva mis huesos”.
-El epitafio del humorista y actor Mario Moreno “Cantiflas” deja patente a que se dedicó pues dice así: “Parece que se ha ido, pero no”.
-No menos singular y curioso es el epitafio que se encuentra en la tumba de Donatien Alphonse François de Sade reza: “Si no viví más es porque no me dio tiempo”.
-Una de las tumbas más visitadas en Estados Unidos tanto por la figura a la que pertenece como por su epitafio es la de Martin Luther King. La misma dice así: “Libre por fin. Libre por fin. Gracias Dios todopoderoso. Soy libre por fin”.
-Asimismo es muy singular e incluso humorística la de la escritora Dorothy Parker pues dice de esta manera: “Perdonen por mi polvo”.