Definición de equivocación
En el latín es donde encontramos el origen etimológico del término equivocación que nos ocupa en este momento. Exactamente deriva de “aequivocatio, aequivocationis”, que, a su vez, procede de “aequivocus”.
Este término alude al acto y la consecuencia de equivocarse o equivocar (tomar una decisión errónea, considerar algo de manera incorrecta, desacertar).
Entre los sinónimos de equivocación nos topamos con error, desacierto, fallo, desliz, equívoco, imprecisión, gazapo, falta o inexactitud. Por el contrario, entre sus antónimos nos topamos con palabras tales como exactitud o acierto.
Por ejemplo: “Disculpe, camarero, hubo una equivocación: solicité pollo frito y me trajeron un pescado”, “Al llegar al cruce de caminos, cometí una equivocación y giré hacia la izquierda, por eso nos perdimos”, “El sospechoso aseguró que no tiene nada que ver con el crimen y atribuyó su detención a una equivocación de los investigadores”.
Las equivocaciones son frecuentes en todos los ámbitos ya que el ser humano no es perfecto: en todas sus acciones hay un cierto margen de error. La mayoría de las equivocaciones no tienen efectos relevantes, aunque algunas pueden ser graves y hasta mortales.
Supongamos que, al preparar una receta, una persona comete una equivocación y, en lugar de incluir una taza de harina, añade dos. Esto puede hacer que el resultado de la preparación no sea óptimo, pero el fallo no reviste de mayor gravedad. En cambio, si un anestesista equivoca la dosis de fármaco que debe suministrarle a un paciente, puede llegar a matarlo.
La reacción de los individuos ante las equivocaciones ajenas suele depender de las consecuencias de las mismas y del grado de responsabilidad de quien se equivoca. Un futbolista de 17 años que debuta en la Primera División puede incurrir en equivocaciones propias de la falta de experiencia: por lo general, los entrenadores, los otros deportistas y los simpatizantes comprenden y aceptan esta situación. Pero si el presidente de un país comete una serie de equivocaciones a partir de un análisis erróneo de la realidad, provocando un incremento del desempleo y de la pobreza, posiblemente reciba duras críticas y sea castigado en las urnas con votos a la oposición.
En el ámbito de la cultura nos topamos con una gran cantidad de obras que han utilizado en sus títulos la palabra que ahora nos ocupa. Este sería el caso, por ejemplo, de la película estadounidense “Equivocación mortal”, protagonizada por Paul Walker.
De la misma manera, también nos encontramos con libros que usan en sus títulos dicho término. Buena muestra de ello es “La equivocación”, escrito por Ángel Alberto Núñez Moreno, una novela en la que se plantea que un partido totalitario y populista con incluso tintes masónicos consigue hacerse con el poder en la República Idealista Hispánica.
Asimismo, no hay que pasar por alto la novela titulada “Bendita equivocación”, que vio la luz en el año 1997 y que es obra de la famosa autora del género romántico Corín Tellado. La historia gira en torno a la figura de Alexandra, que se ha criado con sus tíos tras morir sus padres y que ahora, que ha acabado sus estudios, ha tomado la decisión de comenzar una nueva vida independiente. Por eso, se traslada a Boston a vivir con una amiga modelo cuyo novio, acaba cayendo rendido a los encantos de aquella.