Definición de diabetes
Del latín diabētes, que deriva de un vocablo griego que significa “atravesar”, la diabetes es una enfermedad metabólica que ocasiona diversos trastornos, como la eliminación de orina en exceso, la sed intensa y el adelgazamiento. Existen dos tipos de diabetes que no tienen ningún tipo de relación patológica pero que comparten las manifestaciones clínicas mencionadas: la diabetes mellitus (el tipo de diabetes más usual) y la diabetes insípida.
La diabetes mellitus se produce por un trastorno en la insulina (una hormona formada por más de cincuenta aminoácidos), ya sea una deficiencia en la cantidad o en la utilización. Este trastorno genera un exceso de glucosa en la sangre del sujeto afectado.
El tratamiento contra la diabetes mellitus consiste en mantener el nivel de glucosa dentro de los parámetros normales. Para esto los pacientes deben inyectarse insulina, seguir una dieta baja en azúcar y carbohidratos y realizar ejercicio físico de manera periódica.
Además de todo lo expuesto, es importante subrayar que la citada diabetes mellitus se puede clasificar en cuatro tipos claramente diferenciados:
Diabetes mellitus Tipo 1. DM-1 es como también se conoce a esta clase de patología que se da, sobre todo, en lo que es gente joven y que puede tener entre sus causas más frecuentes a elementos tales como un virus o la ingesta, durante la lactancia, de leche de vaca en lugar de la leche materna.
Diabetes mellitus Tipo 2. En este caso, la misma también es llamada DM-2. Se identifica porque en su caso están dañadas las células que tienen como misión el permitir la entrada en ellas de la glucosa. Concretamente se considera además que la misma es frecuente que aparezca en personas que sufren de obesidad.
Diabetes mellitus gestacional. Como su propio nombre indica es aquella que afecta a un porcentaje más o menos elevado de mujeres durante su embarazo. Un incremento de la glucosa y una disminución de la insulina durante la gestación es la que da lugar a la aparición de dicha patología que, en algunas ocasiones, trae consigo complicaciones en el parto.
Diabetes mellitus Tipo 1.5. LADA es el otro nombre con el que se conoce a este tipo de diabetes que se identifica por el hecho de que cuenta con características tanto de la DM-1 como de la DM-2.
A grandes rasgos podemos decir que estas son las clases principales que existen de diabetes mellitus. No obstante, existen otras más que en su caso afectan a menos del 6% de las personas que han sido diagnosticadas. Entre las mismas estaría la tipo 3A o la 3F.
La diabetes mellitus puede causar trastornos crónicos como el pie diabético, la neuropatía diabética, la retinopatía diabética y cataratas.
La diabetes insípida, en cambio, es producida por una alteración de la hipófisis. Esta enfermedad se caracteriza por una poliuria sin presencia de glucosa, aunque con elevada cantidad de sodio y osmolaridad.
El principal síntoma de la diabetes insípida es una excesiva producción de orina que luego genera una sed sin control que puede llevar a la persona a beber hasta 40 litros de líquido al día. Cuando la compensación entre las pérdidas por la orina y los líquidos ingeridos no se produce, el individuo puede deshidratarse y sufrir una importante disminución de la presión arterial.