Definición de chapa
El diccionario de la Real Academia Española (RAE) reconoce una veintena de significados del término chapa, incluyendo varios usos regionales y coloquiales. La primera acepción que menciona alude a una lámina u hoja de un metal u otro material.
Lo habitual es que una chapa sea una plancha metálica de escaso grosor que se emplea para fabricar diferentes artefactos y en el terreno de la construcción. El espesor de la chapa depende del destino que se le dará.
Es frecuente que a la chapa se la someta a un tratamiento para mejorar su defensa contra la corrosión y la oxidación. Por eso las chapas suelen ser galvanizadas o cromadas.
Las chapas son importantes en las carrocerías de los vehículos, por ejemplo. Además pueden usarse en techos de diferentes tipos de construcciones e incluso para desarrollar casillas o casetas.
También se conoce como chapa o chapita al tapón de metal que permite un cierre hermético de una botella. Mencionada como tapón corona, tapilla, tapa o corcholata según la región, la chapa debe quitarse con un abrebotellas y, una vez extraída, no puede volver a colocarse (o, al menos, ya no permite cerrar herméticamente el envase).
Las botellas de cerveza suelen cerrarse con una chapa. Con el paso del tiempo, de todos modos, surgieron otros tapones alternativos que funcionan a rosca o se quitan sin necesidad de un abrebotellas.
Dependiendo de la zona y el contexto, por otra parte, la noción de chapa alude a la placa que utilizan los policías o a la patente o matrícula que identifica a un vehículo: “El oficial ingresó al bar con la chapa en la mano y les pidió a los presentes que permanecieran sentados mientras él inspeccionaba el lugar”, “No llegué a ver la chapa del automóvil que me chocó y se dio a la fuga”.