Definición de celulitis
El término celulitis se compone del sustantivo célula (la unidad mínima con capacidad de reproducción independiente que constituye a un ser vivo) y el sufijo –itis (que alude a una inflamación). El concepto se emplea en el terreno de la medicina para denominar a una hinchazón que se registra en el tejido conjuntivo ubicado inmediatamente debajo de la piel.
Inflamación del tejido conjuntivo
Antes de avanzar, es importante mencionar que el tejido conjuntivo se forma con células de distintas apariencias y por una materia homogénea atravesada por fibras de colágeno y de otra clase.
Beber abundante agua e hidratar la piel para combatir la celulitis
La celulitis, en este marco, supone que el tejido conjuntivo subcutáneo se inflama. Esto se debe a una infección bacteriana que, en ocasiones, incluso puede llegar al músculo. Por lo general la celulitis es provocada por bacterias estreptococo y estafilococo.
Cabe destacar que es normal que residan bacterias sobre la piel saludable. Si se produce una ruptura, dichas bacterias pueden causar una infección y, por lo tanto, celulitis.
Un problema estético
Existe otra acepción de la noción de celulitis, asociada a un problema estético. En este caso, la celulitis es la acumulación de grasa en zonas subcutáneas, lo cual hace que la piel se vuelva rugosa y presente protuberancias o pequeños pozos.
Las mujeres son más propensas a desarrollar celulitis que los hombres. Cuestiones hormonales, la genética, el tono muscular y el sobrepeso son algunos de los motivos que pueden favorecer la aparición de celulitis.
Los tratamientos de la celulitis suelen ofrecer resultados temporales y en ocasiones generan efectos secundarios. Radiofrecuencia, ondas acústicas, láser y cirugía están entre las opciones para tratar este trastorno.
Consejos para combatir la celulitis
En una sociedad que se preocupa por la estética al mismo nivel que por la salud, la celulitis es un problema que nadie quiere en su vida. Por eso existe un sinfín de tratamientos y productos, desde naturales hasta clínicos, con precios también de lo más variados. Centrándonos únicamente en las medidas que podemos tomar en el hogar, el primer consejo para evitar la celulitis es llevar una vida sana. Esto se aplica a todos los aspectos, desde la alimentación hasta las relaciones interpersonales.
El estrés, por ejemplo, es un gran enemigo de nuestra salud, y entre sus innumerables consecuencias se encuentra la celulitis, porque provoca la liberación de insulina y la acumulación de azúcares y grasas. Construir un entorno social que no nos estrese no es nada fácil, pero sin duda vale la pena. La dieta es otro aspecto fundamental, y en este caso no hay nada mejor que abstenerse de las grasas saturadas, optando en cambio por los productos más naturales.
El ejercicio ayuda a mantener la piel lisa y libre de celulitis
La hidratación es tan importante como la alimentación, y debemos entenderla como el consumo de agua mediante la bebida y el baño de la piel a diario para mantenerla limpia. Se recomienda beber agua con una escasa concentración de sodio, para evitar la retención de líquidos. Con respecto al baño, el agua fría es más beneficiosa que la caliente, ya que estimula la circulación y previene los edemas; claro que la temperatura debe adecuarse a la época del año, pero lo importante es que nunca sea muy elevada.
Como en toda lista de consejos para cuidar la salud, el ejercicio físico no puede faltar. Sus beneficios también incluyen la prevención de celulitis porque fortalece los tejidos y mantienen los procesos orgánicos en funcionamiento. Para complementar la hidratación del cuerpo, nada mejor que la natación, el deporte más completo. Por último, es importante usar ropa relativamente suelta y cómoda, ya que cuanto más ajustada sea mayor será la acumulación de grasa ante la imposibilidad de la piel para respirar.