Definición de carga

El acto y la consecuencia de cargar dan origen a la noción de carga. El concepto, que puede aprovecharse en ciertos contextos como sinónimo de cargo, está relacionado a aquella cosa que genera peso o presión respecto a otra o a la estructura que se transporta (ya sea sobre la espalda o los hombros de un individuo, sobre el lomo de un animal o en un vehículo).

Por ejemplo: “La carga ya está en el camión: en cuanto recibamos la orden, partimos rumbo a la ciudad”, “No creo que puede llevar tanta carga, no soy tan fuerte”, “Este caballo siempre me ha ayudado a transportar la carga hasta el pueblo”, “La carga llegó con cuatro horas de retraso”.

Resulta interesante resaltar que carga también puede ser el peso que consigue soportar una determinada base o estructura: “Esta mesa reforzada puede sostener una carga de una tonelada”, “El estante cedió ante la carga y se partió a la mitad”, “Ten cuidado, la carga ya está doblando las patas del mueble”.

Asimismo, no podemos obviar que carga es también como se conoce a la cantidad de munición o de explosivo que se coloca en un arma de fuego para proceder a su disparo. En este caso, nos encontramos que los rifles, pistolas o morteros, por ejemplo, requieren de su correspondiente carga para funcionar.

Además, también se hace uso de lo que se da en llamar carga de profundidad. Un término con el que se define al explosivo que se emplea para hacer volar y atacar a lo que son objetos submarinos.

En este sentido bélico, hay que subrayar que este concepto que abordamos también se emplea para referirse al ataque enérgico, frontal y contundente que una tropa lleva a cabo contra su rival. El objetivo de dicha acción es claro: entrar en contacto directo con el enemigo y lograr desestabilizarlo.

A lo largo de la Historia han existido diversos tipos de cargas, pero la más conocida es la que acometía la caballería. La misma se caracterizaba porque se ponía en marcha cuando el contrincante estaba atravesando sus peores momentos, fases de debilidad, y porque, en su mayoría de ocasiones, se manifestaba a través del galope de las tropas que aportaban rapidez y contundencia.

En este último caso, hay que subrayar que, hasta la aparición de las armas de fuego, esa carga bélica se desarrollaba empleando desde espadas o lanzas hasta arcos con flechas.

Un tipo de carga el que estamos abordando al que también se conoce por el nombre de carga de petral, denominado así por enfrentarse los miembros de las dos caballerías cuerpo a cuerpo.

Otro uso del término está relacionado al dispositivo, parte o repuesto de una pieza cuyo contenido se agota o se termina con cierta frecuencia: “La batería se quedó otra vez sin carga”, “¿Tienes carga en tu teléfono? El mío se quedó sin crédito”, “Tengo que comprar una nueva carga para mi bolígrafo azul”.

En el campo de la física, en cambio, se conoce como carga eléctrica a la propiedad que poseen ciertas partículas de carácter subatómico que se hace evidente a través de fenómenos de atracción y repulsión que consiguen fijar entre ellas múltiples interacciones a nivel electromagnético. La materia que posee una carga eléctrica está condicionada por campos electromagnéticos y, al mismo tiempo, los genera.

En ciertos deportes, carga es la acción de cargar (en el sentido de desplazar a otro jugador mediante un choque violento): “Gómez anotó el doble, pero el árbitro le cobró carga y anuló la jugada”.

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