Definición de borrasca
El latín boreas se convirtió, en el latín tardío, en borras. Luego el concepto llegó al castellano como borrasca. Las primeras acepciones que incluye la Real Academia Española (RAE) en su diccionario hacen referencia a una tormenta, una tempestad o un temporal.
Por ejemplo: “Con esta borrasca es mejor no salir a navegar”, “La borrasca causó graves daños en la zona centro del país”, “Llevamos tres días de borrasca: los cultivos no resistirán tanta lluvia”.
La idea de borrasca puede servir para mencionar distintos fenómenos atmosféricos. En su sentido más amplio alude a la combinación de precipitaciones intensas, ráfagas de viento y, en ocasiones, actividad eléctrica.
También se llama borrasca a una zona atmosférica de baja presión, que suele provocar que el cielo se cubra de nubes. Los ciclones árticos, polares y extratropicales y las tormentas tropicales se originan en borrascas.
Una de las posibles clasficaciones de este concepto nos permite distinguir entre borrasca térmica y borrasca dinámica. La primera se puede definir como el ascenso de una masa de aire cuando su temperatura es considerablemente superior a la de su entorno.
En pocas palabras, la borrasca térmica tiene lugar a causa del exceso de calor. A lo largo de todo su desarrollo, es común que se produzca un intenso grado de evaporación, seguido de condensación y, como consecuencia casi inevitable, precipitaciones. En España, por ejemplo, pueden apreciarse durante la época de verano en el interior del territorio continental, y llegan allí desde el norte del continente africano.
Por otro lado tenemos las borrascas dinámicas, las cuales podemos definir como el ascenso de una masa de aire en dirección a la tropopausa a causa de una presión que sufre por parte de otras masas, en este caso de aire frío, que consiguen desplazarla. Por tropopausa entendemos el límite más alto de la troposfera, es decir, de la capa de la atmósfera que toca la superficie terrestre y llega hasta los 10 kilómetros de altitud. Dos corrientes de chorro seccionan la tropopausa, y su temperatura no varía de los -57 °C aproximadamente.
Las borrascas dinámicas entran en el grupo de los fenómenos subpolares. Se trata de vaguadas (depresiones barométricas que se pueden apreciar en medio de dos zonas de alta presión y cuya representación gráfica tiene forma de valle) en la corriente en chorro (corriente de aire que se caracteriza por su fuerza y su estrechez, y se concentra por un eje prácticamente horizontal en la estratosfera o en la alta troposfera).
Otras de las características de las borrascas dinámicas son las siguientes: se las asocia a los frentes polares atlánticos, provocan lluvias y afectan el tiempo volviéndolo inestable. Si nos situamos una vez más en España con el propósito de brindar un dato estadístico real, este tipo de borrasca tiene lugar tanto en otoño como en invierno y primavera; si tomamos en cuenta todo lo expuesto hasta el momento, entre las borrascas dinámicas y las térmicas abarcan todas las estaciones del año.
En el lenguaje coloquial, una borrasca es una situación inestable o de riesgo que dificulta el desarrollo de un proyecto o de una actividad: “La renuncia del gerente nos dejó en medio de una borrasca, pero ya nos acomodaremos”, “Sin ayuda financiera externa no podremos superar la borrasca”, “Desde hace tres años que estamos de borrasca en borrasca”.
La RAE, por último, indica que borrasca puede utilizarse como sinónimo de orgía (una fiesta donde abundan los vicios y los excesos): “En la madrugada la reunión se convirtió en una borrasca donde no faltaron las drogas y el alcohol a montones”, “Desperté rodeado de personas desnudas tras una noche intensa de borrasca”, “La borrasca se interrumpió cuando la policía llegó al lugar”.