Definición de balde

Un balde es un cubo: un recipiente que, en su sector superior, dispone de un asa abatible para facilitar su traslado. Los baldes suelen tener la forma de un cono invertido y truncado.

Al ser cóncavos, los baldes resultan apropiados para el almacenamiento y el transporte de líquidos. También conocidos como cubetas, estos utensilios suelen fabricarse con plástico, aunque también existen los baldes metálicos.

Se cree que los primeros baldes se utilizaron en la Antigua Roma, de acuerdo a distintos hallazgos arqueológicos. Aquellos baldes se usaban para trasladar vino o agua. De hecho, durante mucho tiempo los baldes fueron indispensables para llevar agua desde pozos y fuentes hasta los recipientes de conservación ubicados en los pueblos y ciudades, como cisternas y barriles.

En la actualidad, los baldes más usuales son aquellos con una capacidad de cinco litros. De todos modos, hay más grandes y más pequeños. Los baldes suelen usarse para almacenar el agua que se utiliza para lavar o limpiar, por ejemplo.

Existen baldes, por otra parte, que sirven para que los niños jueguen en la playa. Estos baldes de dimensiones reducidas permiten llevar agua y arena y ayudan en la construcción de los típicos castillos.

El término balde, finalmente, se emplea en varias locuciones adverbiales. En este caso, se considera que la raíz etimológica se encuentra en el árabe clásico bāṭil, que se traduce como “inútil” o “carente de valor”. Lo que se hace “en balde”, pues, resulta en vano, mientras que aquello que es “de balde” no tiene costo, precio, causa o motivo.

Definición siguiente →