Definición de apósito
El vocablo latino apposĭtum llegó a nuestro idioma como apósito. Así se denomina al producto que se aplica sobre una lesión, cubriéndola.
Los apósitos pueden sujetarse con una venda, un paño o un elemento similar. En algunos casos son autoadhesivos, con lo cual pueden cubrir la herida sin necesidad de recurrir a ningún implemento adicional.
Al usar un apósito, se busca evitar el desarrollo de una infección y se favorece la cicatrización. Los apósitos deben ser estériles, tienen que disponer de capacidad de absorción y resultar impermeables para impedir el paso de agua y partículas.
Es importante, a su vez, que el apósito no se adhiera a la herida en sí misma. Por supuesto, estos artículos no deben ser tóxicos y además no tienen que generar alergias.
Entre los apósitos más conocidos se encuentran las vendas adhesivas o tiras adhesivas sanitarias, conocidas en algunas regiones como tiritas o curitas debido a marcas comerciales. Estas tiras presentan un apósito esterilizado en su parte central y son autoadhesivas en sus extremos: de este modo, cuando alguien sufre una lastimadura de poca magnitud, puede cubrir la herida con un apósito de esta clase.
Los apósitos posparto, por otra parte, son utilizados por las mujeres después de dar a luz. Ubicados en la zona genital, estos apósitos absorben eventuales sangrados y pérdidas de orina.
Los apósitos posquirúrgicos, finalmente, se usan para acelerar la curación de heridas de exudado leve que quedan luego de una intervención quirúrgica. Por su capacidad de absorción ayudan a mantener seca la zona.