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Sarcasmo

Te explicamos qué es el sarcasmo, su relación con la ironía y su uso como figura retórica. Además, frases sarcásticas de autores famosos.

¿Qué es el sarcasmo?

Llamamos sarcasmo a una forma de expresión sutil pero burlona, mordaz, con la que manifestamos desagrado o indignación, empleando para ello la ironía. Es decir, que una expresión sarcástica utiliza la ironía para mofarse de un argumento o ridiculizar al interlocutor, a menudo expresando lo contrario de lo que realmente se piensa.

El sarcasmo es tenido, como reza el proverbio, por “la forma más baja de humor, pero la más alta de ingenio”, queriendo decir que se trata de una burla soez, insultante, pero que al mismo tiempo emplea para hacerla formas muy sutiles y elaboradas.

En muchos países el sarcasmo es tenido como una manifestación irritante de la inteligencia, a menudo empleada como un medio de expresión “en clave” o “en código” entre quienes conocen el verdadero sentido de lo dicho, que pasa inadvertido para el insultado.

Por su parte, la palabra sarcasmo proviene de la antigüedad griega, del vocablo sarkasmós, traducible como “rasgadura de carnes”, con el sentido de que se trata de una burla que penetra profundamente. Está compuesta por las voces sarkós (“carne”) y el sufijo -asmos (“golpe”, “algo abrupto”).

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Sarcasmo e ironía

La línea que separa el sarcasmo de la ironía es muy delgada y muy sutil, y a menudo depende del contexto que acompaña a lo dicho. En general, ambas cosas consisten en decir lo contrario a lo que se piensa.

Sin embargo, cada una se usa con intenciones ligeramente distintas. El sarcasmo aspira a la burla, a herir al otro sin que siquiera lo note o de una forma que no sea directa. En cambio, la ironía es una figura retórica que expresa lo contrario de lo dicho o que invierte la lógica usual de las cosas, alcanzando un efecto cómico o dramático.

Así, una ironía puede recibirse como un cambio de perspectivas o una frase que revela cosas ocultas en lo dicho; mientras que el sarcasmo suele recibirse como un comentario más destructivo, malintencionado, que al ser descubierto suele generar malestar en el otro. Dicho de otro modo: si no arremete contra nadie, no es sarcasmo.

Por ejemplo, en las siguientes dos frases ingeniosas del escritor irlandés Oscar Wilde (1854-1900) podemos distinguir la fina línea entre el sarcasmo y la ironía:

  • “Un verdadero amigo te apuñala de frente” (ironía: un amigo no debería apuñalarnos, pero según la visión humorística de Wilde, si ha de hacerlo, tendría que hacerlo de frente y no por la espalda).
  • “¿Por qué habré nacido con estos contemporáneos?” (sarcasmo: arremete contra sus contemporáneos, probablemente sus rivales en la escritura, con una pregunta aparentemente ingenua, que expresa lo contrario: “¿por qué habrán nacido ellos en la misma época que yo?”).

El sarcasmo como figura retórica

Así como la ironía, el sarcasmo puede ser empleado como figura retórica, ya que expresa lo contrario a lo que en apariencia se dice o lo que inicialmente se afirmaba. Sin embargo, el resultado del uso literario del sarcasmo tiende a ser humorístico, burlesco, o bien como una forma de crítica o censura respecto de algo.

Por eso muchos escritores acudían al sarcasmo como una forma de expresar su desacuerdo o su reprobación respecto de un gobernante, sin que pudieran los censores identificar la burla fácilmente.

Ejemplos de sarcasmo

Otros ejemplos de sarcasmo pueden ser, por ejemplo:

  • Un hijo pasea con su padre y nota que empieza a llover, y le dice: “Padre, qué magnífico día elegiste para salir a pasear”.
  • Ahora tomemos la misma situación, pero pensemos que el hijo no quería salir a pasear y al final se dejó convencer por el padre, y le dice: “Padre, qué bueno que me convenciste de salir a pasear”.
  • Y una respuesta sarcástica del padre podría ser: “Hijo, no sabes la grata compañía que eres para mí en este instante”.

Frases sarcásticas de personajes célebres

Otras frases sarcásticas de reconocidos autores y personalidades son las siguientes:

  • “A veces necesito algo que sólo tú puedes darme: tu ausencia” – Ashleigh Brilliant, historietista y escritor británico.
  • “Encuentro la televisión muy educativa: cada vez que alguien la enciende, yo me voy a la otra habitación a leer un libro” – Groucho Marx, humorista estadounidense.
  • “La historia demuestra que las naciones se comportan sabiamente luego de haber agotado todas las alternativas” – Abba Eban, político israelí.
  • “El matrimonio consiste en intentar resolver un problema que ninguno de los dos tendría de haber seguido solteros” – Eddie Cantor, comediante estadounidense.
  • “El verdadero héroe de algunas obras literarias es el lector que se las aguanta” – Sergio Golwarz, artista argentino.

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Referencias