Objetivo
Te explicamos qué son los objetivos y para qué sirven. Además, otras acepciones del término, tipos de objetivos y algunos ejemplos.
¿Qué es un objetivo?
Un objetivo o finalidad es una meta o fin último hacia el cual se dirigen las acciones o las operaciones de algún proyecto específico. Todo lo que hacemos tiene un fin, un sentido final adonde queremos llegar, que es la sumatoria de los pasos dados para alcanzarlo. Eso es un objetivo, y de nuestra capacidad para alcanzarlo o no, dependerá generalmente nuestra medida del éxito o del fracaso.
Los objetivos suelen plantearse antes de emprender la acción, ya que resulta conveniente saber hacia dónde vamos antes de empezar a caminar, es decir, sólo podremos determinar la mejor ruta hacia el éxito si sabemos cuál es el objetivo que nos hemos propuesto. De ese modo, los objetivos forman parte de cualquier intento de planificación en cualquier ámbito.
Las investigaciones académicas, los proyectos factibles, los planes empresariales o las estrategias militares tienen siempre en mente el objetivo trazado de antemano, y por lo tanto buscan determinar el método más conveniente (más rápido, más seguro, más lucrativo, etc.) para convertirlo en realidad. Una vez alcanzado un objetivo, surgirá otro más adelante para poder continuar la acción.
Ver también: Objetivos organizacionales
Objetivo y subjetivo
Otra utilización del término objetivo es la que tiene que ver con la objetividad, una palabra que deriva del nombre de los lentes de microscopios, largavistas y otros aparatos que permiten ver con claridad lo normalmente invisible. En este sentido, lo objetivo tiene que ver con lo que no está nublado por consideraciones externas, o sea, por motivos que no tienen que ver con lo observado.
Por ejemplo, si una persona le pregunta a otra su opinión objetiva respecto a cómo le queda una prenda de vestir, le está pidiendo una opinión descarnada, real, que haga a un lado la cautela o el miedo a herirla con su opinión y simplemente diga lo que piensa.
Lo contrario, en ese sentido, es lo subjetivo: aquello que depende del punto de vista de cada quien, de sus emociones y opiniones personales. Un juicio objetivo no se deja llevar por emociones o sentimientos; un juicio subjetivo, en cambio, se compone de ellos.
Tipos de objetivo
Los objetivos usualmente se clasifican de dos formas distintas:
- Conforme al tiempo que toma realizarlo. Los objetivos se clasifican en tres, dependiendo de qué tan próxima esté en el tiempo su realización:
- Objetivos a corto plazo. Aquellos que están muy próximos a realizarse o que tomará poco tiempo concretar.
- Objetivos a mediano plazo. Aquellos que no podrán ser concretados de manera inmediata, pero tampoco en un futuro muy lejano.
- Objetivos a largo plazo. Aquellos que planteamos para un futuro incierto, usualmente remoto, pero que guían nuestras acciones presentes.
- Conforme a su perspectiva. Atendiendo a los elementos en los que se centran, los objetivos pueden ser de dos tipos:
- Objetivos generales. Aquellos que son muy abarcativos o involucran de manera amplia un cometido.
- Objetivos específicos. Aquellos que están acotados o van a lo puntual, a un cometido concreto.
Ver además: Objetivos generales y específicos
Ejemplos de objetivo
Algunos ejemplos de objetivos a mediano, corto y largo plazo pueden ser:
- Fumar la mitad de los cigarrillos diarios (corto plazo)
Fumar la mitad o menos de las cajetillas al mes (mediano plazo)
Dejar de fumar (largo plazo)
- Incrementar las ventas semanales de la página web (corto plazo)
Aumentar la cartera de clientes al doble (mediano plazo)
Copar el mercado y ser líder de la región (largo plazo)
- Trotar quince minutos cada día (corto plazo)
Perder un par de kilos a final de mes (mediano plazo)
Mantenerse en forma (largo plazo)
Objetivo de la administración
La administración se propone un único objetivo: la eficiencia. Esto significa el mejor o más conveniente manejo o gestión de los recursos de los que se dispone para algún fin, de manera que no sólo se pueda conseguir la meta propuesta, sino además que se lo haga de manera definitiva, precisa y no más costosa de lo indispensable.
Para ello, la administración define las estructuras más idóneas para el aprovechamiento de los recursos disponibles, evaluando los procesos de entrada, salida y control de los que dispone una organización o un sistema, ya sea una empresa, un país o una familia.
Otros tipos de objetivos
- En las organizaciones. Los objetivos son los valores y las finalidades que se piensan realizar en un futuro cercano. En la ciencia del marketing, los objetivos se refieren a la innovación en productos para así poder incentivar las ventas, acrecentar la productividad y demás. También laboralmente podemos hablar de los objetivos cuando nos referimos a aquellas metas que un profesional quiere lograr como tal, como puede ser llegar a un puesto alto en el trabajo o poder hacer un doctorado o un voluntariado, cualquier hecho que sume a su currículum vitae.
- En el aprendizaje. Son etapas que se van cumpliendo de a poco y prueban que los conocimientos han sido adquiridos. Los profesores suelen realizar evaluaciones periódicas para poder probar si todos sus alumnos se encuentran a la misma altura en el aprendizaje, si todos ya han cumplido con el objetivo de ese mes, por ejemplo.
- También hablamos de objetivos cuando nos referimos a la práctica de tiro en donde se dispara hacia ellos y se tiene como fin sumar experiencia. Este objetivo se fija a cierta distancia y respetando ésta, los tiradores practican. Por ejemplo, la consigna puede ser disparar a un objetivo a una distancia de unos 25 o 30 metros.
- En el ámbito militar. Un objetivo es un lugar o cosa que se va a ocupar teniendo un plan determinado para poder llegar a ello. En este caso un objetivo puede ser derribar un avión, ocupar una zona o rescatar a alguien.
- En el ámbito de la óptica. Se habla de objetivo refiriéndose a un lente, que funciona como un instrumento que se va a ubicar en la zona que apunta hacia un objeto.