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Jeroglíficos

Te explicamos qué son los jeroglíficos, sus diferencias con la escritura alfabética y su evolución. Además, los jeroglíficos egipcios.

¿Qué son los jeroglíficos?

Se llama jeroglífico o jeroglifo a cada uno de los signos que componen el sistema de escritura de distintas culturas antiguas, pero especialmente la egipcia.

Su nombre proviene del vocablo griego hieroglyphikós, composición de hierós (“sagrado”) y glýphein (“cincelar”), ya que se trata de un modo de escritura que sobre todo se encuentra cuidadosamente tallado en piedra, ya sea mediante relieves o bajorrelieves.

La escritura alfabética, como la que conocemos y usamos en nuestra vida diaria, está compuesta por una serie de signos convencionales, que en nada se parecen al sonido que evocan. Por el contrario, los jeroglíficos son figuras o símbolos de semejanza visual con determinados objetos de la vida cotidiana, que puede comprobarse (o suponerse). Por esta razón, se llama también jeroglíficos a los ideogramas, pictogramas o logogramas que generaron la cultura maya, la hitita, o algunas otras de la antigüedad.

La escritura mediante jeroglíficos probablemente fue la más antigua del mundo. Fue empleada principalmente para dejar inscripciones oficiales en las tumbas y los templos, o en los edictos del rey (o faraón).

En algunos casos, como el egipcio, los jeroglíficos mutaron a una versión más simple, llamada hierático, para pintar en vasijas o placas de barro. Mucho después, como consecuencia de la influencia griega en la región, mutaron también al demótico, en donde aparecen ya signos griegos de escritura.

El pueblo egipcio escribió en jeroglíficos durante casi 3.600 años, ya sea en paredes, vasijas o papiros.

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Jeroglíficos egipcios

En el caso de la escritura del Antiguo Egipto, la organización de los ideogramas (dibujos que representan ideas) y fonogramas (dibujos que representan sonidos) que la componen se da dentro de bloques imaginarios, distribuidos de arriba abajo, de izquierda a derecha o de derecha a izquierda.

Es decir que la escritura egipcia podía leerse en cualquiera de estas direcciones, dependiendo de hacia dónde miraran las figuras representadas. Además, dentro de cada bloque deben leerse los signos de arriba antes que los de abajo, de haberlos.

La antigua escritura egipcia fue descifrada por el padre francés de la egiptología, Jean François Champolion (1790-1832).

Este investigador también manejaba con soltura el farsi, hebreo, árabe, chino y otras lenguas asiáticas, gracias al empleo de la piedra de Rosetta, un fragmento de antigua estela egipcia en donde figura un mensaje escrito en jeroglíficos egipcios, escritura demótica y griego antiguo, de modo que podía servir de diccionario.

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Referencias