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Fuentes de información

Te explicamos qué son las fuentes de información en una investigación y cómo se clasifican. Además, cómo identificar las fuentes confiables.

¿Qué son las fuentes de información?

En una investigación, hablamos de fuentes de información o fuentes documentales para referirnos al origen de una información determinada, es decir, el soporte en el cual encontramos información y el cual podemos referir a terceros para que, a su vez, la recuperen para sí mismos.

Las fuentes de información pueden ser de muy diverso tipo y pueden brindar datos más o menos fidedignos, lo cual influirá de manera decisiva y determinante en los resultados que vayamos a obtener. Investigar es obtener información, y saber investigar es, por ende, saber cómo recoger la información del modo más confiable posible.

En el mundo contemporáneo, la información fluye y está al alcance de la mano gracias a Internet y a las tecnologías computarizadas. Sin embargo, se encuentra poco ordenada y poco jerarquizada, haciendo que mucho de ella se pierda entre información “basura” o de poco valor, que de tanto repetirse ha ido perdiendo necesario contexto o se ha ido transformando en lo que no es.

Por esta razón, poder identificar las fuentes fidedignas y pertinentes es más necesario que nunca, así como los estudios de gestión de la información. Además, la información es fundamental para una toma de decisiones responsable, por lo que empresas y organizaciones confían en investigaciones minuciosas con fuentes confiables para alcanzar sus objetivos.

Ver además: Métodos de investigación

Tipos de fuentes de información

Las fuentes de información se pueden clasificar en:

  • Primarias. Las fuentes primarias son aquellas más cercanas posible al evento que se investiga, es decir, con la menor cantidad posible de intermediaciones. Por ejemplo, si se investiga un accidente automovilístico, las fuentes primarias serían los testigos directos, que observaron la acción ocurrir. En cambio, si se investiga un evento histórico, la recopilación de testimonios directos sería una fuente primaria posible.
  • Secundarias. Las fuentes secundarias, en cambio, se basan en las primarias y les dan algún tipo de tratamiento, ya sea sintético, analítico, interpretativo o evaluativo, para proponer a su vez nuevas formas de información. Por ejemplo, si se investiga un evento histórico, las fuentes secundarias serían aquellos libros escritos al respecto tiempo después de ocurrido lo ocurrido, basándose en fuentes primarias o directas. Si lo que se investiga, como en el ejemplo anterior, es un accidente, entonces un resumen de los testimonios de los testigos, escritos por la policía, constituye una fuente secundaria.
  • Terciarias. Se trata de aquellas que recopilan y comentan las fuentes primarias y/o secundarias, siendo así una lectura mixta de testimonios e interpretaciones, por ejemplo. Atendiendo al caso del accidente, una fuente terciaria al respecto sería el archivo policial completo, en el que figuran fotos, testimonios, informes policiales elaborados a partir de estos últimos, etc.

La mayoría de las investigaciones suelen combinar los tres tipos de fuentes.

Ejemplos de fuentes de información

Las fuentes de información o documentación pueden hallarse en diversos soportes, como grabaciones audiovisuales, grabaciones auditivas, libros, artículos, prensa escrita y básicamente cualquier tipo de soporte que permita capturar y preservar la información, para recuperarla luego.

Por otro lado, son fuentes de información los testimonios, los relatos, las reseñas, los ensayos, las páginas web, las reflexiones, los listados bibliográficos, los índices, las grabaciones profesionales, accidentales o clandestinas, las fotografías, las filmaciones e incluso ilustraciones.

Puede servirte: Investigación cuantitativa y cualitativa

Fuentes de información confiables

La confiabilidad de una fuente de información proviene de su manejo responsable de la misma. Son fuentes de información confiable aquellas que:

  • Indican claramente cuáles son sus propias fuentes. En la medida en que sus fuentes, a la vez, sean fuentes confiables, mayor será la credibilidad acumulada.
  • Aplica razonamientos o interpretaciones comprensibles. Es decir, expone sus ideas de manera clara, transparente, frontal, sin ocultar información y sin conclusiones disparatadas.
  • Evita el plagio y la repetición. El manejo responsable de la información pasa por no repetir a ciegas lo que otros dicen, ni robarse la información que terceros han rescatado, sino que aborda de manera seria y paulatina el tema de interés.
  • Maneja distintas perspectivas. La elección de las fuentes puede revelar un sesgo en cualquier investigación, por lo que siempre se estima responsable abarcar la mayor cantidad posible de puntos de vista, incluso cuando sean contradictorios. Un texto responsable no tiene nada que ocultar.
  • Está legitimado por terceros. En la medida en que una fuente sea considerada confiable por una gran cantidad de investigadores serios, será más probable que sea confiable, pues es muy difícil engañar el criterio de cientos de profesionales de la investigación por siempre.

Especial: ¿Qué tan confiable es la información en internet?

Referencias